Pocas ciudades del norte de África tienen la historia a sus espaldas como la ciudad de Tánger, desde los fenicios, pasando por los visigodos, españoles, portugueses y multitud de países han dejado huella en las ciudad.
Tánger parece hacerle un guiño constante a una Europa cada vez más cercana, y es natural si tenemos en cuenta la distancia que separa los continentes y la necesidad de abrir una gran puerta de comunicación entre dos continentes. |