Una de las obras importantes de Fray Angélico “La Madonna de la Humildad”, obra pintada en 1440, realizado sobre madera con temperas.

El gran pintor florentino Guido di Pietro más conocido con el nombre que se le da después de su muerte Fray Angélico también es recordado como Beato Angélico, poco se sabe de su vida con respecto a la pintura, aunque se cree que fue alumno de Gherardo di Jacopo Starnina, sus primeras obras las realiza en el convento de San Marco de Florencia donde pinto la decoración de los frescos del claustro. Esta obra la pinta dentro de su madurez artística. Ofrece un cambio innovador del canon oficial sobre la pintura religiosa durante el Renacimiento Italiano. La Virgen sostiene sobre su mano derecha una rama de lirio (símbolo cristiano de la Virgen Maria) en la mano derecha sujeta al niño Jesús que no esta completamente sentado, es una niño que comienza andar, esta intentando abrazar a su madre y acariciar su meguilla con su brazo derecho hace un signo de humanidad y sensibilidad. La virgen esta sentada en un trono cubierto con una tela de oro, el manto que la recubre se representa amplio y con numerosos pliegues.