BLOG DEL VIAJE POR FRANCIA E ITALIA EN NAVIDAD PARTE II, por A. López
 
Directorio:

 

Blog por Italia Parte II Blog de viaje por Francia e Italia en navidad, Parte I

 

Itinerario del viaje por Italia

Continuamos el relato en esta segunda parte:

EL VIAJE

“Retrato Isabella Brandt”, obra de Piter Paul Rubens, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato Isabella Brandt”, obra de Piter Paul Rubens, esta datado 1626, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas 86 x 62 cm. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

Isabella Brant (1591–1626) fue la primera mujer de Peter Paul Rubens. Era hija de Jan Brant, importante funcionario del municipio de Amberes, y Clara de Moy. Brant se casó con Rubens el 3 de octubre de 1609 en la Abadía de San Miguel de Amberes. Tuvo tres hijos con Rubens: Clara Serena, Nikolaas y Albert. En 1626, con 34 años, fallece víctima de la peste. Su esposo se casaría en 1630 con Helena Fourment (1614-1673), sobrina carnal de Isabella, puesto que era hija de su hermana Clara.

“Retrato Jean de Monfort”, obra de Anthonie Van Dyck, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato Jean de Monfort”, obra de Anthonie Van Dyck, esta datado 1628, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas 63 x 50.5 cm. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

El cuadro se representa a Jean de Monfort con la cabeza hacia la izquierda, un caballero de mediana edad, vestido a la moda española con ropilla negra, gran cadena de oro y gola de rueda de molino, blanca, transparente, bigote y perilla. Fondo uniforme gris verdoso.

“Guirnalda de flores y busto de mármol”, obra de Daniel Seghers, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Guirnalda de flores y busto de mármol”, obra de Daniel Seghers, esta datado 1647, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas 117 x 96 cm. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

Esta pintura muestra el archiduque Leopoldo Guillermo de Habsburgo-Austria (Viena, 1614-1662), un hermano del emperador Fernando III. Él perteneció a la orden de los jesuitas, entre varios obispos, ordenó la Guerra de los Treinta Años, el ejército imperial. A partir de 1647-1656 fue gobernador de los Países Bajos españoles. Daniel Seghers le ha representado en esta pintura como un emperador romano, rodeado por una guirnalda de flores.

“Bacanal”, obra de Piter Paul Rubens, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Bacanal”, obra de Piter Paul Rubens, esta datado entre 1635-1640, realizado en óleo sobre tela. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

La bacanal es una fiesta orgiástica en honor de Baco, durante el cual los fieles seguidores de los dioses del vino, sátiros y bacantes se dedicaron a libaciones incontrolables y entretenimiento.

“Fontana con guirnaldas”, obra de Nicola van Houbraken, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Fontana con guirnaldas”, obra de Nicola van Houbraken, está datado en el siglo XVIII, realizado en óleo sobre tela, tiene unas medidas de 132 x 98 cm. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

El pintor de familia flamenca especialista en un léxico figurativo utiliza en unas variantes de flores y animales. Esta fuente es utilizada como un elemento irónico donde pone de manifiesto la combinación de las uvas y las setas.

“Retrato de una señora”, obra de Jacob Jordaens, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de una señora”, obra de Jacob Jordaens, esta datado 1660, realizado en óleo sobre tela. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

Fue un pintor de éxito y un notable ejecutor de tapices. Al igual que Rubens, Jordaens fue un maestro de los tapices, las escenas mitológicas y las alegorías, y a partir de 1640 año de la muerte de Rubens, fue el más notable pintor de Amberes, y como tal recibió numerosos encargos de cortesanos, familias adineradas y otros mecenas. Hoy, sin embargo, es más conocida su obra “de género”, pinturas basadas en escenas costumbristas al modo de su contemporáneo Jan Brueghel el Viejo. Entre sus influencias se cuentan no solo pintores flamencos como Brueghel o el mencionado Rubens, sino también artistas del norte de Italia como Jacopo Bassano, Paolo Veronese o Caravaggio.

“Alegoría de la tierra y el agua”, obra de Jan Brueghel el Joven, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Alegoría de la tierra y el agua”, obra de Jan Brueghel el Joven, esta datado entre 1650-1660, realizado en óleo sobre tabla. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

Fue entrenado por su padre y pasó su carrera en la producción de obras de un estilo similar. Junto con su hermano Ambrosius, produjo paisajes, escenas alegóricas y otras obras de detalle meticuloso. Brueghel también copio las obras de su padre y las vendió con la firma de su padre. Sus obras se distinguen de las de su padre por no estar tan bien ejecutadas y ser de un estilo más ligero

“Pasaje con ganado”, obra de Jan Brueghel el Joven, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Pasaje con ganado”, obra de Jan Brueghel el Joven, esta datado 1607, realizado en óleo sobre tabla. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

Pintor flamenco de naturalezas muertas y flores, de paisajes y de escenas mitológicas y alegóricas. Jan Brueghel el Joven fue un artista independiente y de gran talento, que a veces ha sido poco valorado en la historiografía. Fue el hijo mayor de Jan Brueghel de Velours y, por tanto, nieto de Pieter Bruegel el Viejo. Probablemente se formó en el taller de su padre, quien le incitó a viajar a Milán en 1622 y a ponerse al servicio del cardenal Federico Borromeo. Desde Milán viajó a Malta y Sicilia. Cuando en 1625 recibió la noticia de la muerte de su padre, regresó a Amberes para hacerse cargo de su taller.

“Alegoría del fuego”, obra de Jan Brueghel el Joven, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Alegoría del fuego”, obra de Jan Brueghel el Joven, esta datado entre 1650-1660, realizado en óleo sobre tabla. Se expone en la sala 55 pintura flamenca.

La tabla forma parte de una copia del díptico dedicado a los Cuatro Elementos, un tema presente en la cosmología medieval y renacentista. En este caso se representa el fuego y en el centro una armadura.

“Autorretrato anciano”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Autorretrato”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, esta datado 1669, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 74 x 55 cm. Se expone en la sala Rembrandt.

Rembrandt realizó numerosos autorretratos a lo largo de la vida, siendo uno de los artistas que mayor número pintó, lo que permite conocer su evolución estilística. Le servían para interrogarse, analizarse a sí mismo. Estos autorretratos de su vejez, como el Autorretrato ya anciano que destaca por su realismo.

“Retrato de un anciano rabino”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de un anciano rabino”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, esta datado 1690, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 74 x 55 cm. Se expone en la sala Rembrandt.

En el siglo XIX llevó a teorizar a los coleccionistas judíos con la especial afinidad de Rembrandt con los judíos. Algunos llegaron a sugerir que se había iniciado en la Cábala.”Barbas, casquetes, ojos almendrados, narices grandes, así como el habitual uso que Rembrandt hizo del alfabeto hebreo que se encuentran en gran número de sus obras”.

“Autorretrato”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Autorretrato”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, esta datado 1655, realizado en óleo sobre lienzo. Se expone en la sala Rembrandt.

Este cuadro tiene una duda razonable de la autoría del mismo porque podría tratarse de algún pintor que trabajase en el taller de Rembrandt aunque su valor no ofrece ninguna duda.

La obra estuvo expuesta en el “Gabinetto” del Gran Príncipe Fernando de Medici (1702-1710) y que llegó a la Galería de los Uffizi en 1773.

“Autorretrato”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Autorretrato”, obra de Rembrandt Hermensz van Rijn, esta datado 1634, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 62,5 x 54 cm. Se expone en la sala Rembrandt.

El cuadro fue pintado en Ámsterdam cuando Rembrandt tenía 28 años, es uno de los ochenta retratos que el artista ejecuta, incluyendo pinturas y grabados, imprescindible para estudiar su maduración como hombre y como artista.

En este caso vemos que lleva una rica túnica de terciopelo marrón, adornado con una cadena pesada; rizos rubios están cubiertos por un sombrero de ala ancha.

La última restauración llevada a cabo por Daniele Rossi en la Galería de los Uffizi ha revelado la presencia de la inscripción debajo de la pintura.

“Piazza Dam”, obra de Jan Van del Heyden, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Piazza Dam”, obra de Jan Van del Heyden en colaboración con Adrian Van de Verde, esta datado 1667, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 62,5 x 54 cm. Se expone en la sala Rembrandt.

Alumno del pintor de naturalezas muertas que trabajó en Berckheyde, se dedicó principalmente a la pintura de paisaje.

Pintó vistas de las ciudades de Colonia, Bruselas y Londres, pero la mayor parte de la ciudad de Ámsterdam y sus alrededores, revelando aspectos de la vida burguesa pacífica.

“Retablo Virgen de las Arpías”, obra Andrea del Sarto, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retablo Virgen de las Arpías”, obra Andrea del Sarto, esta datado 1517, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 208 x 178 cm.

Virgen de las Arpías es un retablo pintado por el artista italiano renacentista Andrea del Sarto (1486-1531), que se considera su obra maestra. Pintado para las monjas de San Francesco de Macci, esta pintura se encuentra en la Galería Uffizi , Florencia.

El cuadro fue contratado el 14 de mayo de 1515 donde la imagen debía mostrar a la Virgen y al Niño coronados por dos ángeles y flanqueado por San Juan Evangelista y San Buenaventura, y que se entregarán dentro de un año. Pero, de hecho, el trabajo tiene fecha de 1517, y muestra de San Juan Evangelista y San Francisco a ambos lados de la Virgen y el Niño en un alto pedestal poligonal. Esta última está decorada en las esquinas con figuras de monstruos asemejados a arpías, mientras que en el centro, bajo la firma del artista, están las palabras de inicio de un himno a Nuestra Señora de la Asunción. Por lo tanto, no muestra la Coronación de la Virgen , sino la Virgen de la Asunción.

Estas variaciones sobre el encargo original, así como en el tema en sí, que no es la tradicional Virgen y el Niño entronizados entre Dos Santos y mártires, sino de una representación muy inusual de la Virgen , la figura entera del enigmático pedestal con las imágenes de las “Arpías”, han dado lugar a una gran cantidad de ideas y de intentos de explicaciones por parte de todos los críticos. La interpretación más reciente es que se trata de una descripción, basada en el texto del libro del Apocalipsis, de la Virgen triunfante sobre el mal, simbolizado por las figuras monstruosas, las “Arpías”, que son, en realidad, la “langosta” que se menciona en el Apocalipsis, y además de eso, es testigo del culto de la Virgen de los clientes, las franciscanas conventuales.

La figura de la Virgen ilumina el centro de la imagen con el intenso color rosa de su túnica, moderado por la armonía con el color azul claro de su manto, y con el amarillo brillante de la luminosa tela sobre los hombros bajo el velo blanco que cubre su cabeza. A su izquierda se encuentra la escultural figura de San Juan envuelto en un manto de color rojo cinabrio atado sobre la túnica lila que es una tela muy refinada, mientras que en el otro lado está la figura de San Francisco destaca una nota que se desprende de las variedades del tono sutil de los motivos arquitectónicos del fondo, mientras que en el fondo se puede ver un cálido y misterioso halo, hecho de colores y de sombras, que detrás y alrededor de las figuras en torno genera una atmósfera que implica el rico mensaje espiritual que nos ha traído esta pintura.

La Virgen de las Arpías es un hito en la carrera de Andrea del Sarto, y da testimonio de un nivel de madurez de las más importantes experiencias artísticas de principios de siglo XVI: la atmósfera de la pintura de Leonardo, la meditación infundida recientemente con una nueva frescura en la grandiosa las maneras de Miguel Ángel, el elegante y solemne clasicismo de Fra Bartolomeo.

“Santiago con dos niños”, obra Andrea del Sarto, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Santiago con dos niños”, obra Andrea del Sarto, esta datado 1528, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 159 x 86 cm.

El Apóstol Santiago el Mayor (en la Toscana conocido simplemente como St. James) se muestra de espaldas y de cuerpo entero, mientras se vuelve a acariciar la barbilla de un niño arrodillado a su derecha y en la izquierda un segundo agacha la celebración con un libro verde grande, con la mirada reflexiva a la izquierda, fuera de los límites de la pintura. El santo es reconocible por el gorro como atributo y el bastón del peregrino. El paisaje estéril tiene una consistencia presente en otras obras de plena madurez.

Tanto el color, especialmente con la mancha de la capa roja, es la monumentalidad de las figuras aisladas del fondo marcan el último momento al estilo de Fra Bartolomeo, con el fin de una mayor solidez de los volúmenes. La intensa caracterización del santo, con la barba y un rostro tan específico como para sugerir un retrato, se anticipó a la caracterización devocional marcada en la Contrarreforma.

“Retablo de los cuatro santos”, obra Andrea del Sarto, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retablo de los cuatro santos”, obra Andrea del Sarto, esta datado 1528, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 200 x 250 cm.

Detalle “Retablo de los cuatro santos”, obra Andrea del Sarto

El retablo debe su forma a la función particular para el que fue solicitada, para enmarcar una tabla del XIV venerada de la Virgen y el Niño. El conjunto, encargado por la Congregación Vallombrosana Canigiani Giovanni Maria, fue desmembrado con la supresión del convento en 1810. En esa ocasión, la estructura de madera se perdió, lo que probablemente había sido diseñado por Baccio d'Agnolo, la tableta antigua (que Ignacio Hugford había atribuido a Giotto) y el compartimiento central de la predela, que representa probablemente la “Anunciación“.

Cuando los dos paneles más grandes llegaron a las galerías de Florencia que fueron pegados el uno al otro, estando separadas sólo con la restauración de la 1962-1965.

Desde el punto de vista del estilo, las obras de este período marcaron un cambio de actitud hacia el estilo de Fra Bartolomeo, con el fin de una mayor solidez de los volúmenes, los colores más brillantes (aunque todavía se presentan los efectos iridiscentes chirriantes) y mayores monumentalidad de las figuras aisladas del fondo.

“Retrato de Pietro Carnesecchi”, obra Domenico Puligo, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Pietro Carnesecchi”, obra Domenico Puligo, esta datado 1527, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 59 x 39 cm.

Pietro Carnesecchi nació en la ciudad de Florencia el 24 de diciembre de 1508, en el seno de una familia noble florentina. Su padre era un mercader llamado Andrea di Simone Carnesecchi y su madre era Ginevra Tani. A través de los años, su padre, recibió el patrocinio de la familia Médici, en especial de Julio de Medici –conocido como el papa Clemente VII–, quien le permitió alcanzar un alto cargo en la corte papal.

“Retrato de un hombre”, obra Francesco di Cristofano, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de un hombre”, obra Francesco di Cristofano conocido como, Franciabigio, esta datado 1514, realizado en temple sobre tabla; tiene unas medidas de 60 x 47 cm .

Su apodo se cree derivado del maestro que habría estudiado o de una abreviatura de su nombre de pila. Su breve carrera artística se desarrolló íntegramente en Florencia, donde empezó a destacar sobre todo como retratista. Alumno de Mariotto Albertinelli, sintió la influencia de Rafael y, especialmente, Andrea del Sarto, con el que colabora desde 1510.

“Predela con la historia de san Acacio”, obra Francesco Ubertini, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Predela con la historia de san Acacio”, obra Francesco Ubertini conocido como Bacchiacca, esta datado 1514, realizado en temple sobre tabla. Se exponen en la sala de Rafael.

La predela cuenta tres historias, de izquierda a derecha: el bautismo a los compañeros del santo; derrota a los rebeldes con la ayuda de los Ángeles; el martirio de los compañeros del santo.

“Cristo ante Caifás”, obra Francesco Ubertini, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Cristo ante Caifás”, obra Francesco Ubertini conocido como Bacchiacca, esta datado 1514, realizado en temple sobre tabla; tiene unas medidas de 50,5 x 41 cm. Se exponen en la sala de Rafael.

Un pintor florentino y dibujante, Bachiacca es principalmente reconocido como un artista que ayudó a evolucionar el estilo del manierismo. Se dice que estudió con el pintor de Umbría, Pietro Perugino y también colaboró con otros artistas de la época como Franciabigio y Pontormo.

“Deposición de Cristo de la Cruz ”, obra Francesco Ubertini, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Deposición de Cristo de la Cruz”, obra Francesco Ubertini conocido como Bacchiacca, esta datado 1518-1520, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 93 x 71 cm. Se exponen en la sala de Rafael.

El cuadro fue pintado para el convento de Santa María de los Ángeles, se aprecia una notable influencia de Perugino; en 1867 el cuadro entra a formar parte de la Galería de los Uffizi

“Leda y el cisne”, obra Andrea del Sarto, Galería Uffizi

La siguiente tabla “Leda y el cisne”, obra Andrea del Sarto, esta datado 1512-1513, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 55 x 40 cm. Se exponen en la sala de Rafael.

El cuadro ya estaba en la Tribuna de los Uffizi en 1589, aunque sin atribución precisa, había una profunda controversia de la autoría entre Andrea del Sarto, Pontormo y Perin del Vaga; Sin embargo, tradicionalmente el trabajo puede ser considerado como una obra de juventud de Pontormo, siendo influenciado por el estilo de Leonardo da Vinci.

“Alegoría de la fortuna”, obra Giovanni di Lorenzo Larciani, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Alegoría de la fortuna”, obra Giovanni di Lorenzo Larciani, esta datado entre 1520-1525, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 30,5 x 24,5 cm. Se exponen en la sala número 60.

Giovanni di Lorenzo Larciani fue identificado recientemente como el creador de las obras que se conocían anteriormente sólo como nombres provisionales y genéricos como el “Maestro de los paisajes Kress” Este nombre fue dado a él por tres de sus paisajes. Algunas de sus obras en galerías de arte italianas se habían atribuido erróneamente al joven Rosso Fiorentino.

“Retrato femenino”, obra Rosso Fiorentino, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato femenino”, obra Giovan Battista di Jacopo di Gaspar conocido como Rosso Fiorentino, esta datado 1510, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 45 x 33 cm. Se exponen en la sala número 60.

El retrato permite ver el fondo de un paisaje con dos árboles pequeños que se interponen en un cielo en pendiente, se coloca el busto de una niña, de tres cuartos a la izquierda. La ropa es una reminiscencia de los primeros años del siglo XVI, con un vestido negro.

“Retrato de un joven vestido de negro”, obra Rosso Fiorentino, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de un joven vestido de negro”, obra de Giovan Battista di Jacopo di Gaspar conocido como Rosso Fiorentino, esta datado 1512-1513, realizado en óleo sobre tabla. Se exponen en la sala número 60.

El hombre retratado se ha identificado recientemente como Domenico Puligo. Se representa de medio cuerpo y la cara vuelta hacia el espectador. Él lleva un traje y un sombrero negros, típico de la moda masculina en las primeras décadas del siglo XVI. En las manos sosteniendo un libro y un rollo, que aluden a sus actividades, tal vez un erudito y diplomático.

“Retablo de Spedalingo de Santa María Nueva”, obra Rosso Fiorentino, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retablo de Spedalingo de Santa María Nueva”, obra de Giovan Battista di Jacopo di Gaspar conocido como Rosso Fiorentino, esta datado 1518, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 172 x 141,5 cm. Se exponen en la sala número 60.

Es una conversación sagrada, en el centro de la Virgen , ésta se sienta en el fondo de un damascado de oro, con el Niño de pies sobre sus piernas, conversa con cuatro santos a su alrededor. A la izquierda está San Juan Bautista, patrón de Florencia, y el titular de la Capilla Santos , seguido de San Antonio Abad, protector de los animales y por lo tanto adecuado para la ubicación en el campo, y, por otro lado, está San Esteban, el propietario de la iglesia Grezzano, se representa con la piedra de la lapidación en la cabeza, y el cuerpo esquelético de San Jerónimo con el libro, con el vientre descubierto, esternón, costillas y clavículas a la vista, la extrema delgadez del cuello y el brazo, dejando al descubierto un vínculo con los estudios anatómicos que en ese momento se empiezan a hacer de los cuerpos en la pintura. Los dos santos centrales, fueron San Benito, patrono del padre de una viuda que había dejado a sus familiares en el hospital, y San Leonardo.

A los pies de María, sentados sobre una tarima, hay dos ángeles, abstraídos en la lectura de un libro, que parecen no tener relación con la acción general de los Santos.

“Ángel músico”, obra Rosso Fiorentino, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Ángel músico”, obra de Giovan Battista di Jacopo di Gaspar conocido como Rosso Fiorentino, esta datado 1521, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 39 x 47 cm. Se exponen en la sala número 60.

Tal vez se trata de un resto pequeño de algún retablo, en el fondo oscuro se esconde de hecho incisiones paralelas en el diseño, en el que el ángel estaba sentado, probablemente, en las faldas de un trono de la Virgen y el Niño. En la esquina inferior derecha se han recuperado, parcialmente erosionada, la firma del Rosso y la fecha. Ya que el artista está firmado "Florent [inus]" es probable que la obra fuera pintada durante uno de sus viajes fuera de la ciudad de origen, tal vez en Volterra, como sugiere la fecha apenas legible de 1521.

“Moisés defiende a las hijas de Jetro”, obra Rosso Fiorentino, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Moisés defiende a las hijas de Jetro”, obra de Giovan Battista di Jacopo di Gaspar conocido como Rosso Fiorentino, esta datado 1523, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 160 x 117 cm. Se exponen en la sala número 60.

El trabajo presenta una composición muy original, en la que el profeta tiene un papel pleno y activo en la posición violenta de los pastores. Moisés aparece furioso y medio desnudo en el centro, mientras que permanece escondido sobre los cuerpos de sus rivales.

La escena está básicamente dividida en tres niveles, pero la complejidad de la articulación que une las figuras con referencias constantes, pueden subvertir el período del renacimiento tradicional. Los colores complementarios son a menudo yuxtapuestos y tienen diversas formas geométricas utilizadas en la superficie pictórica, que contribuyen a anular el sentido de la profundidad espacial y la plasticidad de los volúmenes, en una dirección decididamente anti-clásica

“Dama con cesto de husillos”, obra de Andrea del Sarto, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Dama con cesto de husillos”, obra de Andrea del Sarto, esta datado entre 1514-1515, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 76 x 54 cm. Se exponen en la sala número 60.

El vestido parece el verdadero protagonista de esta pintura, que muestra a una mujer en tres cuartos a la derecha, sujeta una cesta con un poco de lana fundida uniforme sobre un fondo oscuro. El retrato parece indicar que la mujer podría haber sido muerta cuando fue retratada. Otras hipótesis es que la figura femenina pueda ser la esposa de un comerciante de telas. El resultado del cuadro viene afectado por el juego de luces que iluminan la superficie de la tela de damasco y el moteado de los pliegues blancos de la camisa plisada que cubre su pecho, también enmarcado por una cadena trenzada, haciéndose cargo de la decoración de los tocados.

“Retrato de un músico”, obra de Pier Franccesco di Jacopo Foschi, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de un músico”, obra de Pier Franccesco di Jacopo Foschi, esta datado 1525-1530, realizado en óleo sobre tabla.

Hijo de un pintor de idéntico nombre, fue alumno en el taller de Andrea del Sarto. Colaboró con Pontormo en los frescos que éste realizó en Careggi hacia 1536.

El pintor poco a poco fue alejándose del estilo de Sarto para acercarse a un manierismo típico y algo vacuo, de profundo tinte academicista. Su forma de pintar se acercó al de Pontormo y a una espiritualidad cercana al estilo contramanierista.

Foschi fue un cotizado retratista. En diversas colecciones europeas se conservan muestras de su talento en este campo. Estas obras se caracterizan por la pose típicamente manierista de los personajes, llamada contraposto, consistente en girar levemente la cabeza del retratado con respecto al cuerpo. Esta postura consigue una sensación de dinamismo y movimiento en la figura, sin perder la elegancia requerida. Foschi consiguió algunas piezas de notable frescura, pero acabó convirtiéndola en una fórmula manida con el paso de los años.

“Expulsión de Adam y Eva del paraíso”, obra de Jacopo Carucci, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Expulsión de Adam y Eva del paraíso”, obra de Jacopo Carucci conocido como Pontormo, esta datado entre 1518-1520, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 43 x 31 cm.

El trabajo fue inventariado entre las colecciones del cardenal Leopoldo de Medici y se atribuyó a Pontormo.

Inspirado por el maestro Masaccio, Pontormo diseñó a nuestros progenitores atormentados por el remordimiento, mientras se pasean desnudos por el bosque oscuro del paraíso terrenal, entre la serpiente que quedó enredado en un árbol y el ángel con espada. Este personaje es quizás el más original de la escena, fue diseñado como un querubín en el aura brillante rojizo que está de espaldas al espectador, lo que amplifica la sensación de profundidad espacial de la escena

“Navidad de San Juan Bautista”, obra de Jacopo Carucci, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Navidad de San Juan Bautista”, obra de Jacopo Carucci conocido como Pontormo, esta datado 1526-1527, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 54 x 54 cm.

El trabajo muestra la escena del nacimiento de San Juan organizada como una composición original. La cama St. Elizabeth está en posición horizontal y la mujer mira con sus ojos atentos a su marido Zacarías que está escribiendo el nombre del niño que va a nacer, rompiendo el castigo que le había obligado a silenciar a todos el hecho del nacimiento anunciado por un ángel que le había advertido del nacimiento de un niño. Una criada que sostiene al bebé en sus brazos está el centro de la escena, colocándolo en diagonal a lo largo de una línea de fuerza que lleva a la cara de la madre. Otras mujeres se agolpan en el torno para leer el nombre en la hoja.

“Cena Emaús”, obra de Jacopo Carucci, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Cena Emaús”, obra de Jacopo Carucci conocido como Pontormo, esta datado 1525, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 230 x 173 cm.

El episodio viene detallado en el Evangelio de Lucas, cuando el Cristo resucitado se aparece a dos de sus discípulos, que en un principio no le reconocieron y le invitan a cenar con ellos. En la mesa, sin embargo, en el gesto de la bendición, partió el pan y les invitó a distribuirlo; este es el momento en que lo reconocen: los ojos de ambos se abrieron y reconocieron a Jesús, pero él desapareció de su vista

“Enano Morgante”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Enano Morgante”, obra de Bronzino , esta datado 1553, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 149 x 98 cm.

Durante la vida del Duque Cosme de Medici se realiza el doble retrato de su apreciado Morgante Vasari, siempre habla de él en términos muy elogiosos, e incluso se sabe que le concedieron unas tierras a su familia. El cuadro siempre estuvo en el Palazzo Pitti, pero a la muerte del poderoso Medici fue trasladado a otro lugar.

En el siglo XVIII, alguien debió considerar que el cuerpo desnudo mostrado en aquel retrato singular resultaba obsceno y poco decoroso, por lo que se procedió a su repintado, añadiéndole hojas de parra, uvas y otros elementos para ocultar su desnudez y convertirlo en una representación de Baco.

“Enano Morgante”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Enano Morgante de espaldas”, obra de Bronzino , esta datado 1553, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 149 x 98 cm.

Durante siglos las cortes más importantes de toda Europa contaron entre sus miembros con la presencia de personas aquejadas de enanismo cuya ocupación principal era entretener a reyes y nobles con sus rimas, chistes y otros espectáculos.

Muchos de ellos alcanzaron la fama gracias a los pintores de corte, como sucede con los célebres bufones de Velázquez, pero otros —aunque mencionados en las fuentes e igualmente retratados en obras de arte — son mucho menos conocidos.

“Retrato de Lucrecia Panciatichi”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Lucrecia Panciatichi”, obra de Bronzino , esta datado 1541, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 104 x 84 cm.

La mujer está representada con un vestido rojo muy suntuoso, adornada con encaje en la parte superior y un cinturón de piedras preciosas. Las mangas tienen una parte más ancha y rizada en la parte superior.

“La sagrada familia Panciatichi”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “La sagrada familia Panciatichi”, obra de Bronzino , esta datado 1540, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 117 x 93 cm.

En un fondo oscuro, las rocas de las cuales brotan torres bajo un cielo plomizo, la Sagrada Familia con el niño San Juan se representa en primer plano, con el Niño durmiente colocado en paralelo al borde de la mesa, acostado sobre una almohada que aluden al tema el descanso en la huida a Egipto. A Jesús se le representa gordito, pero a su vez está pálido y abandonado, parece dar una premonición de su muerte y nada sirve el beso y el abrazo del pequeño San Juan al despertar. Se ven por detrás de una Madonna escultural, acostada de medio cuerpo, y un joven de San José, con barba y atento a la escena principal. Una luz fría e intensa incide en las figuras en el primer plano, mientras que las hojas del fondo están a la sombra.

“Retrato de Bartolomeo Panciatichi”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Bartolomeo Panciatichi”, obra de Bronzino , esta datado 1540, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 104 x 85 cm.

Bartolomeo Panciatichi era hijo natural del comerciante de Pistoia, Bartolomé el Viejo, propietario de la empresa comercial florentina principal que operaría en Francia, en Lyon. Se convirtió en un humanista y gran político italiano.

“Lamentación de Cristo muerto”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Lamentación de Cristo muerto”, obra de Bronzino , esta datado 1529, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 115 x 100 cm.

La Lamentación sobre Cristo muerto es una escena sagrada del arte cristiano que se hizo popular desde el siglo XIV y sobre todo en el Renacimiento. En ella se representa a Jesús después de su deposición de la cruz, está rodeado de varios personajes que lloran su muerte.

“Retrato de Francisco de Medici”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Francisco de Medici”, obra de Bronzino , esta datado 1551, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 58,5 x 41,5 cm. Se expone en la sala 65 Bronzino.

Francisco I de Médici (Florencia, 25 de marzo de 1541-19 de octubre de 1587), II gran duque de Toscana, de 1574 a 1587, fue el hijo mayor de Cosme I de Medici, I gran duque de Toscana; casado con Leonor Álvarez de Toledo, hija del virrey de Nápoles Pedro Álvarez de Toledo y Zúñiga.

“Retrato de María de Medici”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de María de Medici”, obra de Bronzino , esta datado 1551, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 52,5 x 38 cm. Se expone en la sala 65 Bronzino.

María estaba comprometida con Alfonso II, Duque de Ferrara, pero murió a la edad de diecisiete años, antes de que el matrimonio pudiera consumarse. Se educó con sus hermanos y fue uno de los más brillantes de los niños. Cuando su hermano Francisco no entendía la lección de griego, sus tutores pidieron a María que se lo explicará. María se mantenía un poco apartada de sus hermanos y hermanas más pequeñas. Ella creció en un elegante alto nivel de educación, y se convirtió en una mujer decorosa.

“Retrato de María de Medici”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de María de Medici”, obra de Bronzino , esta datado 1551, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 52,5 x 38 cm. Se expone en la sala 65 Bronzino.

Este retrato de Bronzino de una niña que fue identificada como María de Medici. El cuadro fue pintado en enero de 1551 cuando la niña tenía 10 años.

María murió era probablemente la malaria en la ciudad de Livorno. Su padre hizo un profundo duelo y mantuvo su retrato en su habitación hasta que la enterraron; estaba muy triste porque había perdido dos de sus hijas.

“Retrato de Eleonora de Toledo”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Eleonora de Toledo”, obra de Bronzino , esta datado 1545, realizado en temple sobre tabla; tiene unas medidas de 115 x 96 cm. Se expone en la sala 65 Bronzino.

La obra retrata a la hermosa duquesa de Florencia Eleonora de Toledo, esposa de Cosme I de Medici, en compañía de uno de sus once hijos, probablemente John nació en 1543 y destinado a convertirse en un cardenal.

Detalle “Retrato de Eleonora de Toledo”, obra de Bronzino

Durante mucho tiempo se creyó que Eleonora había sido enterrada con el mismo vestido que aparece en esta imagen: este tipo de noticias se extendió después de hacerse el reconocimiento de los restos de la capilla de los Medici de 1857, en el procedimiento de los cuales se enumeran de forma genérica “ricas vestiduras modeladas de acuerdo primero la moda de mediados del siglo XVI”.

El fondo oscuro, aparentemente plano, se enciende alrededor de la cara de Eleonora, en el cuadro con su hijo sentado al lado de sus pies. La imagen trasera resulta que no es un muro, sino un cielo plomizo, a lo lejos, una vista de una finca, probablemente la de Poggio a Caiano.

La atención del artista se concentró principalmente en la ropa haciendo una descripción precisa, que califica de inmediato el rango de los personajes. La mujer lleva un elaborado vestido, dejó perfectamente en su tridimensionalidad y la materialidad, muestra un corpiño ajustado, un cordón de oro de cuentas en los hombros, mangas anchas dejan ver en los extremos la camisa blanca y una amplia falda.

“Retrato de Giovanni de Medici”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Giovanni de Medici”, obra de Bronzino , esta datado 1545, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 58 x 45,4 cm. Se expone en la sala 65 Bronzino.

La identificación del niño como John, el segundo hijo del Gran Duque de Toscana Cosme I y Leonor de Toledo, preparado para la carrera eclesiástica, se basa esencialmente en los documentos de archivo y comparaciones estilísticas, que sitúan la obra hacia 1545: en esa fecha John tenía, de hecho, dos años.

Sobre un fondo uniforme y de color verde oscuro, iluminado en la cabeza del niño, Giovanni de Medici en un retrato de medio cuerpo, vestido de rojo (referencia a su destino en el mundo eclesiástico), con un vestido brillante, con bordados de oro y forrado de blanco, con un ropaje producido en las fábricas de seda florentinas Cosimo.

“Retrato de una chica con el libro”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de una chica con el libro”, obra de Bronzino , esta datado entre 1542-1545, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 58 x 46 cm. Se expone en la sala 65 Bronzino.

Bronzino se convirtió en un pintor de la corte de los Medici donde hizo muchos retratos de miembros de la aristocracia y la clase media, como este retrato de una chica sin nombre.

“Retrato de Cosme I con armadura”, obra de Bronzino , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Cosme I con armadura”, obra de Bronzino , esta datado entre 1543-1546, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 74 x 58 cm. Se expone en la sala 65 Bronzino.

En su posición de pintor de corte de los Medici, Bronzino fue autor de varios retratos del Duque Magnífico Cosme I de Medici. En este, Cosme está representado en sus años jóvenes aparece vestido con armadura blanca y el casco sobre una mano. El retrato ha sido identificado como ejecutado en la Villa de Poggio a Caiano en 1545, y mencionado en algunas cartas.

El retrato está diseñado para mostrar el temperamento dominante y orgulloso del Duque Magnífico, con una luz lateral que brilla en su cara y en la armadura metálica.

“Retrato de Julio II”, obra de Raffaello Sanzio , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Julio II”, obra de Raffaello Sanzio conocido como Rafael , esta datado entre 1510-1511, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 108 x 80,7 cm. Se expone en la sala 66 Rafael.

Rafael pinta un retrato inusual para su época y marcaría una gran influencia sobre los siguientes retratos papales. Desde sus inicios fue colgado, de manera especial, en los pilares de Santa María del Popolo, a las puertas de Roma, durante los días de fiesta y de los santos. Se decía del retrato que era tan real y verdadero, que asustaba a todo el que le veía, como si estuviera vivo.

Detalle “Retrato de Julio II”, obra de Raffaello Sanzio

Julio II comisionó a Rafael para la realización de su retrato, y de la pintura “Madonna del Loreto”, que fue guardada en Santa Maria del Popolo, a las puertas de entrada a Roma.

Una impresionante variedad de artistas del Renacimiento fueron llamados para decorar Santa Maria del Popolo después de Rafael. Tanto las pinturas de Rafael, Julio II y la Virgen fueron colgadas en los pilares durante los días de fiesta o los días de los santos.

Las dos pinturas, casi del mismo tamaño, parece como si fueran destinados a complementarse entre sí. Ellas también poseen una fuerte orientación vertical. Los ojos de las pinturas fueron abatidos y dio una sensación contemplativa. El posicionamiento y la iluminación dentro de la pintura parecen indicar que estaban destinados a cada flanco, a un lado del altar de la capilla de la cúpula. Aunque las pinturas fueron emparejadas por un tiempo a través del cambio de propiedad, la “Madonna del Loreto” se encuentra ahora en el Museo Condé de Chantilly, Francia.

Como un medio para indicar la devoción del Papa Julio hacia la Virgen , que dio lugar a la pareja de pinturas, Julio encargó otro cuadro mariano, la “Madonna Sixtina”, en la que se aprecia al Papa de rodillas a los pies de la Virgen.

Hay muchas suposiciones acerca de las circunstancias de la pintura luego de ser extraída de Santa Maria del Popolo, en parte porque había muchas copias de la pintura, y en parte debido a los retrasos en la publicación de documentos vitales.

“Retrato de Guidobaldo da Montefeltro”, obra de Raffaello Sanzio , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Guidobaldo da Montefeltro”, obra de Raffaello Sanzio conocido como Rafael , esta datado 1506, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 69 x 52 cm. Se expone en la sala 66 Rafael.

El sujeto es un retrato de medio cuerpo, en el fondo de una habitación con una ventana abierta hacia la derecha del paisaje. Lleva un gorro negro con grandes solapas, porta una camisa de color negra con bata voluminosa cubierta con tela del mismo color en el reverso de una tela bordada de plata con pequeños motivos geométricos o florales.

“Virgen del jilguero”, obra de Raffaello Sanzio , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Virgen del jilguero”, obra de Raffaello Sanzio conocido como Rafael , esta datado 1505-1506, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 107 x 77 cm. Se expone en la sala 66 Rafael.

La Virgen del jilguero fue pintada durante la estancia de Rafael en Florencia. La Virgen fue un regalo de bodas de Rafael a su amigo Lorenzo Nasi. El 17 de noviembre de 1548, la casa de Nasi quedó destruida por un terremoto, y la pintura se partió en diecisiete fragmentos. Fueron donde Battista, hijo de Lorenzo, muy amante del arte, para que las rehiciera de la mejor manera que pudiese. Fue restaurada poco después, pero el daño aún resulta visible.

En esta pintura, como en la mayor parte de las Vírgenes de su periodo florentino, Rafael colocó las tres figuras ( la Virgen María , el Niño Jesús —a la derecha— y san Juan) dentro de un dibujo geométrico. Aunque las posiciones de los tres cuerpos son naturales, juntos forman un triángulo prácticamente regular.

La Virgen sostiene un libro, lo que permite identificarla como Sedes Sapientiae («Asiento de la Sabiduría »). El jilguero es un símbolo de la futura muerte violenta de Cristo. San Juan ofrece el jilguero a Cristo como advertencia en relación con su futuro.

La influencia de Leonardo da Vinci se evidencia en muchos rasgos de la obra, como la estructura piramidal y el claroscuro. También se nota en la oscuridad del terreno y en el tratamiento atmosférico del paisaje del fondo, que se pierde en las brumas del horizonte. Los rostros del Bautista y de Cristo tienen una impronta inconfundiblemente de Leonardo en el esfumado que les rodea y en los rasgos somáticos.

“Retrato Pietro Perugino”, obra de Raffaello Sanzio , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato Pietro Perugino”, obra de Raffaello Sanzio conocido como Rafael , esta datado entre 1505-1506, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 51 x 37 cm. Se expone en la sala 66 Rafael.

El personaje principal es interpretado de medio cuerpo mientras mira fijamente al espectador y mantiene sus manos descansando sobre una balaustrada en el primer plano, con un trozo de papel enrollado en el puño derecho como un personaje joven, siempre atribuida a Rafael. La escena se desarrolla en una habitación con una ventana abierta en el paisaje de la izquierda. La razón del parapeto y la ventana son una derivación obvia de obras flamencas, especialmente los retratos de Hans Memling. El hombre está vestido de negro, con una camisa blanca que sobresale del cuello y una boina oscura. Curiosamente es la misma ropa del retrato de Lorenzo di Credi atribuido a Perugino, que muestra lo que iba a ser la forma habitual de vestir entre los artistas de círculo de Perugino.

“Retrato del Papa León X”, obra de Raffaello Sanzio , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato del Papa León X”, obra de Raffaello Sanzio conocido como Rafael , esta datado 1518, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 115,2 x 118.9 cm. Se expone en la sala 66 Rafael.

El gran retrato del papa fue enviado a Florencia en 1518 para representar al papa, incapaz de moverse, a la boda de su sobrino Lorenzo, duque de Urbino con la noble francesa Madeleine de la Tour d'Auvergne (pariente del rey francés Francisco I), a partir de cuya unión nació Catalina de Médicis.

Con este retrato oficial, Raphael continuó en los trabajos de renovación de la tradición, ya había comenzado con el retrato de Julio II. El Papa, está vestido con camauro, la muceta y un vestido de terciopelo con bordes de piel y ricamente decorado, está, de hecho, sentado en una mesa cubierta con una tela roja en la silla de Cámara en la que se ve un reflejo de la ventana y la habitación.

“Alegoría de la Caridad”, obra de Francesco de Rossi , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Alegoría de la Caridad”, obra de Francesco de Rossi también conocido como Cecchino Salviati , esta datado entre 1544-1548, realizado en óleo sobre tabla.

Salviati fue uno de los mejores ejemplos del estilo manierista y el valor de su obra se puede apreciar mediante el examen de la tabla que representa a una mujer desnuda mientras está en el fondo dos niños abrazándose unos a otros, de ahí el término "Alegoría de la Caridad " aunque por lo general en el momento de la Caridad se presentó con tres hijos, según otras teorías la madre lactante que representaría el amor sagrado, mientras que los dos querubines, uno es macho y la otra figura femenina.

“Cristo porta la cruz”, obra de Francesco de Rossi , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Cristo porta la cruz”, obra de Francesco de Rossi también conocido como Cecchino Salviati , esta datado entre 1547-1548, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 66 x 45 cm.

Esta pintura de pequeño formato que fue utilizada de carácter devocional muy copiado, producido en Florencia por un desconocido patrón, refleja la influencia de Sebastiano del Piombo.

“Madonna con el Niño”, obra de Giulio Pippi, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Madonna con el Niño”, obra de Giulio Pippi, también conocido como Giulio Romano, esta datado entre 1520-1522, realizado en óleo sobre tabla.

El cuadro donde destacan: la suavidad de la carne, la idealización de las figuras, la ternura de expresión, incluso los rasgos faciales que se asemejan a las madonnas de Rafael.

El pintor estudiaba en el taller de Rafael, cuando muere y Giulio asume la conducción de taller del maestro. En el mismo año el artista diseña su primer trabajo como arquitecto, Adimari Palazzo Salviati en Roma. En estos años pintó muchas vírgenes que se derivan de la técnica de Rafael.

“Madonna con el Niño y dos ángeles musicales”, obra de Antonio Allegri , Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Madonna con el Niño y dos ángeles musicales”, obra de Antonio Allegri conocido como Corregio , esta datado entre 1515-1516, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 20 x 16.3 cm. Se exponen en la sala de Corregio.

La obra tiene una estructura arcaica, la Virgen está sentada con el Niño en su regazo entre dos ángeles músicos, rodeado de un fondo de oro entre una gloriosa nube de serafines. Las figuras son tratadas de una manera realista, con Jesús que se inclina hacia el ángel de la derecha. Es notable la sensibilidad a la luz, con algunos detalles a contraluz, como la manga derecha del ángel o el ala de la izquierda, eclipsado María.

“Descanso en la huida a Egipto”, obra de Antonio Allegri, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Descanso en la huida a Egipto”, obra de Antonio Allegri conocido como Corregio , esta datado 1517, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 123.5 x 106.5 cm. Se exponen en la sala de Corregio.

El cuadro muestra una clara influencia del Manierismo ya está presente en este trabajo, una licencia curiosa tratándose de una temática concreta que vendría determinada por el lugar a donde se dirigía la tabla. La oscuridad de la noche envuelve el espacio donde se desarrolla la composición, creando un atractivo juego de luces y sombras con el foco que procede de la derecha e impacta en María, resaltando su túnica blanquecina y su manto azulado.

“Adoración del Niño”, obra de Antonio Allegri, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Adoración del Niño”, obra de Antonio Allegri conocido como Corregio, esta datado 1526, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 81 x 67 cm. Se exponen en la sala de Corregio.

Esta pequeña obra, que representa a la Adoración del Niño por la Virgen , permite verificar la capacidad del Correggio para renovar la tradición iconográfica se centra en el estudio y la representación de los movimientos del alma. De hecho, es el gesto más natural de la Virgen con las manos suavemente y se separó la expresión absorta en la contemplación del Niño para hacer un cuadro fresco e intimista de una relación entre madre e hijo que se ve además favorecido por la idea de descansar el pequeño bebé en el borde de su manto.

Se detectaron algunos posibles significados simbólicos relacionados con la higuera visible a la derecha o la tela blanca sobre la que el niño se presenta: razón por la que podría ser interpretado en términos eucarísticos. Más explícita, sin embargo, aunque todavía reduce al mínimo, son las alusiones a la huida a Egipto por medio de la visible silla en primer plano y de palma que agita en el fondo. Lo mismo se aplica a la higuera que crece a partir de las ruinas, y que sirve como un recordatorio de que el sacrificio de Cristo ha redimido a la primera desobediencia de Adán. Las antiguas ruinas cubiertas de hierba aluden al final del paganismo.

“Madona con el cuello largo”, obra de Girolamo Francesco Maria Mazzola, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Madona con el cuello largo”, obra de Girolamo Francesco Maria Mazzola conocido como Il Parmigianino, esta datado entre 1534-1540, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 216 x 123 cm.

Se trata de una Virgen con Niño, acompañados por ángeles. La pintura está inacabada debido a la muerte de Parmigianino en 1540. La Virgen se sienta en un alto pedestal y la envuelven unas ropas lujosas; sostiene en su regazo un Niño Jesús bastante crecidito. A su derecha son visibles seis ángeles que se agrupan en torno a la Virgen y que adoran a Jesús. El rostro inacabado del ángel en la parte inferior derecha (desde la perspectiva del espectador) puede verse más claramente en reproducciones recientes posteriores a la restauración de la pintura. Además, el ángel en el medio de la fila inferior actualmente mira al jarrón que sostiene el ángel de su derecha, en el que puede verse la imagen de una cruz. Antes de la restauración, este ángel miraba hacia abajo, hacia el Niño Jesús. Los cambios que se realizaron durante la restauración probablemente reflejan la pintura original, que debe haberse alterado en algún momento de su historia. A la izquierda de la Virgen hay una escena enigmática, con una fila de columnas de mármol y la figura extremadamente delgada de san Jerónimo. El comitente había exigido una representación de san Jerónimo debido a la conexión del santo con la veneración a la Virgen María. La pintura recibe popularmente el nombre de «Virgen del cuello largo», debido a que «el pintor, en su impaciencia por hacer que la Virgen pareciera graciosa y elegante, le ha proporcionado un largo cuello, como el de un cisne».

Parmigianino, perteneciente a la escuela manierista que distorsiona la naturaleza para conseguir sus mejores propósitos artísticos. La Virgen no tiene proporciones humanas, con dedos largos y elegantes; y casi tiene el doble del tamaño de los ángeles que hay a su derecha. Es de interés el pie derecho de la Virgen : descansa en cojines que parecen estar sólo a unos centímetros del plano pictórico, pero el pie en sí parece proyectarse más allá de él, y está por lo tanto en «nuestro» lado del lienzo, rompiendo las convenciones de un cuadro enmarcado. Jesús es también extremadamente grande para ser un bebé, y descansa precariamente sobre el regazo de María como si fuera a caerse en cualquier momento.

“Retrato viril”, obra de Girolamo Francesco Maria Mazzola, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato viril”, obra de Girolamo Francesco Maria Mazzola conocido como Il Parmigianino, esta datado 1530, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 100 x 70 cm.

El cuadro retrata a un hombre de medio cuerpo dentro en una habitación oscura, en la que sólo reconoce una bóveda y un medallón de bajo relieve de la derecha, ocupa la mayor parte de la pintura con una dilatada pose, con los brazos en la cintura y los codos lejos de cuerpo, uno descansa sobre una plataforma, con el fin de mostrar mano con anillos. La chaqueta negra, el color del sombrero de acuerdo a la moda de los hombres de un caballero de la época, es en este caso se abre en el pecho, donde los bordes sobresalientes del cuello de la camisa de lino blanco. Un haz de luz ilumina la cara del personaje, también ilumina la pared en el centro. Tiene mirada intensa y larga barba de pelo largo, espeso y oscuro se vuelve hacia el espectador y expresa nobleza orgullosa y seria, inspirando valor. La cara es ligeramente estilizada, construido con una simetría perfecta, con el fin de dar una idealización formal, típica de la producción del artista después de 1530.

“Muerte de Adone”, obra de Sebastiano Piombo, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Muerte de Adone”, obra de Sebastiano Piombo, esta datado 1512, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 189 x 285 cm.

El cuadro representa en el centro a Venus, desnuda, sentada con las piernas cruzadas y cerca de Cupido, se manifiesta que está triste por la muerte de Adonis, cuyo cuerpo sin vida está acostado a la izquierda. La pose de la diosa recuerda a la escultura helenística, muy conocido en los círculos intelectuales romanos. Compañeros de la diosa participan en el dolor a la derecha, y hablan, señalando, con una especie de Sileno que toca la flauta.

En el fondo, entre las ramas, que se ve un lago, y, además, en la cálida luz del atardecer, aparece la ciudad de Venecia: de hecho se reconoce por el Palacio Ducal, las cúpulas de la basílica de San Marcos y la torre del reloj.

“Retrato de una mujer joven”, obra de Sebastiano Piombo, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de una mujer joven”, obra de Sebastiano Piombo, esta datado 1512, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 68 x 54 cm.

La pintura tiene una influencia en Rafael, reconocible en la pose, la iluminación y la atención que se presta a la prestación de los efectos materiales de la ropa, como en la piel que mantiene a la mujer apoyada en el hombro. El efecto con el que la mujer emerge del fondo oscuro que recuerda matices de Leonardo, de la escuela veneciana incontrovertible es en cambio el color denso, especialmente en la encarnación, por lo que es posible que fuera cuando Sebastián Piombo estuvo durante los primeros años de su estancia en Roma.

“Retrato de Guerrero”, obra de Giorgio Barbarelli da Castelfranco, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Guerrero”, obra de Giorgio Barbarelli da Castelfranco, conocido como Giorgione, esta datado entre 1505-1510, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 90 x 73 cm.

El retrato representa una pequeña escena de género, anticipando un sabor típicamente del siglo XVII: el guerrero lleva una armadura bruñida, mira directamente al espectador con una expresión frunciendo el ceño tristemente, sosteniendo una espada de dos manos en la posición vertical y, por el parapeto, elemento típico de unos retratos de medio cuerpo, están descansando sobre una visera del casco brillante con fuelle.

El personaje se ha identificado tradicional con el Gattamelata (muerto en 1443) aunque ahora pudiera tratarse del líder Bartolomeo d'Alviano, el jefe de las tropas venecianas en la victoria contra el emperador Maximiliano I en Cadore en 1508.

“Juicio a Salomón”, obra de Giorgio Barbarelli da Castelfranco, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Juicio a Salomón”, obra de Giorgio Barbarelli da Castelfranco, conocido como Giorgione, esta datado 1505, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 89 x 72 cm.

El cuadro representa en el momento que en el trono Salomón dio la orden a un soldado de dividir por la mitad a un niño en disputa a partir de dos mujeres. Aquí está uno de ellos de rodillas y mirando fijamente en los pañales, mientras que el otro parece hacer un gesto de egoísmo desinteresado.

Alrededor hay varias figuras con vestidos con formas exóticas, típicas de Venecia que estaba acostumbrado a la gente y las costumbres extranjeras.

Detrás se despliega un vasto paisaje con árboles de roble y cipreses, y con una parte oscura, los datos del espolón rocoso a la derecha, y en la distancia en un paisaje abierto, donde se pueden ver los castillos y montañas que se pierden en el horizonte.

“La prueba de Moisés”, obra de Giorgio Barbarelli da Castelfranco, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “La prueba de Moisés”, obra de Giorgio Barbarelli da Castelfranco, conocido como Giorgione, esta datado 1505, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 89 x 72 cm.

Un faraón de Egipto preocupado por un gesto del niño del que había caído la corona de su cabeza, y temeroso de que en el futuro podría usurpar la riqueza y el poder. Coloca por delante carbones calientes y monedas de oro, el recién nacido elige el carbón, la quema de la lengua (para esto se convirtió en tartamudo), pero tranquilizar al faraón en su inocencia. Esto no es un episodio de la Biblia , sino de los textos hebreos medievales.

El faraón se sienta en un trono a la izquierda, rodeado de varios personajes; antes de ver a su hija con el bebé Moisés, que adoptó en sus brazos, que se adentra en uno de los dos contenedores transportados. Detrás hay otras figuras vestidos con trajes exóticos, típicos de Venecia.

Detrás se despliega un vasto paisaje con árboles de sombra altos en la abertura izquierda y en la derecha en la distancia donde se ve colinas, castillos y montañas que se extienden hasta el horizonte.

“Retrato viril”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato viril”, obra de Tizziano Vencello, esta datado 1515, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 81 x 60 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

Sobre un fondo oscuro, con un olivo silvestre, un hombre se encuentra en la mitad de la figura con el torso ligeramente abierto hacia la derecha y la cara girada de tres cuartos a la izquierda. Lleva un gorro negro, una gran capa de piel y guantes, con las manos apoyadas en una altura en una hipotética balaustrada en el borde inferior. Es un ejemplo típico de la moda del siglo XVI cuenta con una larga barba y bigote, que, con el pelo negro y grueso enmarca la cara. La expresión es de melancólica y piel clara, combinada con una sensación de malestar, dieron a luz el título de el mejor “enfermo”, en realidad no hay fundamento real para el titulo.

“La Madona de la rosa”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “La Madona de la rosa”, obra de Tizziano Vencello, esta datado 1530, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 69 x 96.5 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

El cuadro tiene una inspiración y mezcla de los estilos de Giovanni Bellini y Tiziano ya utilizado en las primeras obras, una cortina entreabierta a la izquierda revela un paisaje entre el trasfondo de las medias figuras de la Virgen y el Niño en sus brazos sobre una almohada, entre los santos, en este caso es Juan y tiene Antonio abad a la derecha.

El nombre tradicional proviene de las rosas que ofrece al niño a María, la flor típica Mariana cuyos pétalos rosados también recuerdan la sangre roja de la pasión.

“La adoración de los pastores”, obra de Lorenzo di Credi, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “La adoración de los pastores”, obra de Lorenzo di Credi, esta datado 1495-1497, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 224 x 196 cm.

El cuadro fue encargado por las monjas de Santa Clara, para su realización el pintor hizo varios estudios preparatorios que se conservan en la Albertina en Viena, el Cabinet des Dessins de París (1780 de la figura de San José) y el Gabinete de Dibujos y Grabados de los Uffizi (para el cordero en sus brazos al pastor).

Debajo del portal de Belén en ruinas, un símbolo tradicional de paganos y judíos, la veneración alrededor del bebé Jesús, el centro de la composición, descansando en la parte inferior central sobre un velo cubría que un poco la paja del suelo. Desde la izquierda, en un semicírculo, se ve un pastor con un cordero, un símbolo del sacrificio de Cristo, que mira fijamente a la izquierda inspirado por Perugino, dos pastores en la oración que se hacen eco del Tríptico Portinari, tal vez inspirado por el ejemplo de Ghirlandaio, un ángel vestido rojo de rodillas, María, dos ángeles de pie y un ángel arrodillado y vestido rojo, y San José de pie. La Virgen y los ángeles recuerdan las caras de Leonardo da Vinci, en obras como la Virgen de las rocas.

“Anunciación”, obra de Leonardo da Vinci, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Anunciación”, obra de Leonardo da Vinci, esta datado entre 1472-1475, realizado en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 98 x 217 cm.

Es uno de los primeros encargos de Leonardo donde se representa la Anunciación a la Virgen , ella está a la derecha y el ángel a la izquierda, característica de las pinturas florentinas; además, la cabeza del ángel carece del esfumado típico de Leonardo, apareciendo los cabellos compactos. No obstante, el ángel parece próximo a la factura del que aparece en el Bautismo de Cristo de Verrocchio, y existen dos dibujos ciertos de Leonardo, un estudio del brazo en la Christ Church de Oxford y un estudio de drapeado en el Louvre que hacen referencia precisa, respectivamente al arcángel y a la Virgen : si bien hay en el cuadro una simplificación y un convencionalismo de composición, estos rasgos pueden atribuirse a la relativa inexperiencia y a la necesidad de concluir, exigencia lejana del espíritu de Leonardo, una obra de la cual no podía atribuirse la plena responsabilidad.

Detalle “Anunciación”, obra de Leonardo da Vinci

La obra era desconocida hasta el año 1867, en que llegó a los Uffizi desde la sacristía de la iglesia de San Bartolomeo, aneja al suprimido monasterio de los Olivetanos. Entonces se atribuyó a Ghirlandaio, quien era, como Leonardo, un aprendiz en el taller de Verrocchio; también hay quien consideraba que era obra de este último. En 1869, algunos críticos la reconocieron como obra de juventud de Leonardo.

En esta Anunciación, lo mismo que en la pequeña predela sobre el mismo tema que pintó Leonardo por la misma época, ha usado la colocación, muy formal, que proviene de las dos pinturas de Fra Angélico sobre el tema, bien conocidas, con la Virgen María sentada o arrodillada a la derecha de la pintura, a la que se acerca desde la izquierda un ángel de perfil, con rico ropaje que flota, alas alzadas y portando un lirio.

Sin embargo, a diferencia de la iconografía clásica, la escena se desarrolla enteramente en el exterior, dentro de un jardín cerrado de una típica villa florentina. Este es un rasgo innovador, ya que en la tradición medieval la ambientación era siempre en el interior (lo que favorecía la representación de la cama), al menos en lo que se refería a la Virgen , mientras que el ángel podía estar en el exterior, pero en un hortus conclusus, es decir, en un jardín delimitado por altos muros que aludían al vientre de María. Para mantener la reserva del encuentro, Leonardo pinta a la Virgen en un palacio, pero dejando entrever el lecho; además, un pequeño muro delimita el jardincillo.

Detalle “Anunciación”, obra de Leonardo da Vinci

El ángel es clásico, como iconografía, tiene las alas batiendo y sostiene un lirio blanco (Lilium candidum), símbolo de pureza. El ángel manifiesta su peso sobre la hierba, y se representa incluso el movimiento del aire que provoca al aterrizar. A diferencia de los ángeles que normalmente se representaban no tiene alas de pavo real (considerado animal sagrado y de carne incorruptible al ser un animal exótico y bello), sino las alas de un pájaro auténtico, cuya anatomía ha estudiado el autor. Se supone que Leonardo copió originalmente las alas de las de un pájaro en vuelo. Hay una extraña anomalía: las alas originales eran más cortas, pero fueron alargadas por un artista posterior, sin comprender que aquí Leonardo representó al ángel que está aterrizando, y que por lo tanto está cerrando las alas, y por este motivo carece de sentido pintar un ala batiendo. Esta corrección destruye toda la labor de estudio de Leonardo sobre la anatomía de las aves, así como la representación realista del ala.

La impostación de la posición es clásicamente de Leonardo, considerando los drapeados, con pliegues amplios y mórbidos. Giorgio Vasari cuenta que el artista hacía a menudo modelos de arcilla de las figuras, los vestía con mórbidos mantos bañados en yeso y entonces reproducía pacientemente la caída de los drapeados. La posición de las manos es natural, la derecha bendiciendo mientras que la izquierda lleva la azucena.

Detalle “Anunciación”, obra de Leonardo da Vinci

Cierta perplejidad causa la cabeza del ángel: las carnaciones son pálidas y planas, sin las transparencias clásicas de Leonardo, hay una gran diferencia con el ángel del Bautismo de Cristo, aquí los cabellos no se difuminan, sino que aparecen como una masa de rizos compacta.

La Virgen María , a diferencia de lo que era habitual, no adopta la postura de sumisa aceptación de su destino cruzando los brazos. La hermosa joven, interrumpida en su lectura por este mensajero inesperado, pone un dedo de la mano derecha sobre la biblia para marcar el lugar, como si quisiera evitar que se cerrara, y alza la mano izquierda a modo de saludo. Esta serena joven acepta su papel como Madre de Dios no con resignación, sino con confianza. En esta pintura el joven Leonardo presenta la cara humanista de María, una mujer que reconoce el papel de la humanidad en la encarnación de Dios.

A primera vista parece tener tres piernas, ya que el borde del manto está sobre el brazo del sillón. Está situada junto a una especie de altarcillo o mesa de mármol en el que se evidencian las enseñanzas de Verrocchio. Esta mesa de mármol frente a la Virgen probablemente es una cita de la tumba de Pedro y Juan de Medici en la sacristía Basílica de San Lorenzo de Florencia de Brunelleschi, que fue esculpida por Verrocchio en esa misma época. Es un sarcófago con elementos broncíneos cincelados que recuerdan a las ornamentaciones de este altar.

Al fondo se ve un río con meandros y barcas, montañas y árboles. El paisaje del fondo muestra una escena de puerto que se cree que está en Roma. Usa perspectiva aérea, a la que Leonardo daba mucha importancia: pintaba los detalles más alejados como envueltos en una niebla, pues sabía que entre el ojo y un objeto visto a distancia se interponían capas de polvo atmosférico, de partículas y motas muy pequeñas, que hacen los contornos menos nítidos; Leonardo fue el primer pintor en preferir esta perspectiva atmosférica sobre la geométrica. Los objetos próximos se representan minuciosamente porque se ven mejor.

El cuadro está caracterizado por un hecho curioso: Leonardo comete un error de perspectiva. Tal error se refiere al brazo de la Virgen. Analizando el cuadro con una simulación gráfica, y haciéndolo girar, se observa la desproporción en cuanto a la longitud del brazo. Este error no existe en la otra versión de la Anunciación de Leonardo que hoy en día está en el Louvre.

“El bautismo de Cristo”, obra de Leonardo da Vinci, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “El bautismo de Cristo”, obra de Leonardo da Vinci, esta datado entre 1470-1475, realizado en temple sobre tabla; tiene unas medidas de 177 x 171 cm.

Es un cuadro del taller del pintor renacentista italiano Verrocchio, algunas de cuyas partes se atribuyen a Leonardo da Vinci.

Posiblemente se tratara de un encargo de la iglesia de San Salvi de Florencia, donde estuvo hasta que pasó, tiempo después, al convento de santa Verdiana. Ambas iglesias pertenecieron a la orden de los vallombrosanos (congregación benedictina). En 1810 fue llevado a la Academia de Bellas Artes y, en 1914, a la Galería de los Uffizi.

Se considera que este es el primer trabajo importante de Leonardo da Vinci como aprendiz. Hizo la pintura junto con su maestro Verrocchio. Para esta pintura, Verrocchio contó con la colaboración de Botticelli y de un Leonardo adolescente.

El primero que mencionó la intervención de Leonardo en esta tabla de Verrocchio fue Giorgio Vasari. Afirma Vasari que Verrocchio acabó disgustado con el arte de pintar, al sentirse superado por su propio aprendiz, contándose la leyenda de que llegó a romper sus pinceles en frente de todos sus aprendices prometiendo no volver a pintar nunca jamás; en realidad no es cierto, pero la anécdota ejemplifica cuánto talento mostró de repente Leonardo como pintor. Verrocchio ejerció sobre Leonardo una profunda influencia, más intelectual que artística.

Se le atribuyen a Leonardo todas las partes ejecutadas al óleo. Es obra suya indiscutible: el ángel que está de perfil, abajo a la izquierda, arrodillado y recogiendo sus ropas. Se evidencia la delicadeza de la mano de Leonardo, que ejecutó el rostro del ángel de modo muy maduro. Los ángeles expresan las diferencias estéticas de Verrocchio y Leonardo. El ángel del maestro mira con extrañeza al del discípulo, cuyo dinamismo contrasta con la rigidez del otro. Además, el ángel de Leonardo se distingue por su elegancia; sobre él derrama una luz que pone de relieve los drapeados rígidos y delicados de la vestimenta y las ondas de la cabellera dorada.

También realizó algunos rizos del otro ángel, el paisaje del fondo y retocó la faz de Cristo. En la concepción del paisaje del Bautismo de Cristo se hace patente la observación de la naturaleza por parte de Leonardo. Algunos autores consideran que el pájaro también es obra suya.

Ya aquí se evidencia el estilo que caracterizará incluso las obras de Leonardo de la madurez; se distingue a simple vista por la intensidad de los colores y, de modo más determinante, por el dinamismo que consigue imprimir en la figura del ángel y por los matices de color del paisaje. En algunas partes se evidencia el uso de las yemas de los dedos para extender la pintura y lograr mejor los matices de la epidermis.

El cuerpo del Bautista parece más propio del Pollaiolo, mientras que las manos de Dios y la palmera resultan arcaicas y cualitativamente más vulgares.

“Retablo de San Domenico”, obra de Pietro di Cristoforo Vanucci, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retablo de San Domenico”, obra de Pietro di Cristoforo Vanucci llamado El Perugino , esta datado 1493, realizado en óleo sobre tabla.

El cuadro fue un encargo realizado para la iglesia de Santo Domingo en Fiesole, está firmada y fechada. Esta obra goza de una fama superior a su valor artístico real. La composición se basa en aspectos meramente formales y carentes de vida.

Perugino recibió una gran cantidad de encargos como este durante la última década del siglo XV y con la sobreproducción disminuyó la calidad. Se especializó en un tipo de Madonna amable, joven y dulce. Una sólida ambientación arquitectónica proporciona estabilidad compositiva a los dos santos que de pie flanquean a la Virgen y el Niño.

“Sagrada conversación”, obra de Domenico Ghirlandaio, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Sagrada conversación”, obra de Domenico Ghirlandaio , esta datado entre 1484-1488, realizado en temple sobre tabla; tiene unas medidas de 190 x 200 cm.

La pintura se encontraba expuesta en el altar mayor de la iglesia de San Giusto Alle Mura, llamado el Ingesuati, fuera de los muros de Florencia

La iglesia fue destruida en 1529 por el cerco de Florencia. Las pinturas fueron traídos por los frailes a su nuevo hogar del convento de San Giovanni Battista della Calza en Porta Romana. La tabla llegó a los Uffizi en 1853.

Detalle “Anunciación”, obra de Leonardo da Vinci

Es una sagrada conversación donde se ofrece una solución bien establecida en la tradición florentina, derivado del retablo de San Marcos de Fra Angélico (1438-1440). Ubicado en una terraza, tiene en su centro a la Virgen con el Niño sentado en la posición delantera (pero con las piernas hacia la izquierda) en un magnífico trono de mármol, rodeado por cuatro ángeles. Se presta gran atención a la representación de los detalles decorativos, incluyendo el friso con relieves dorados establecidos con perlas (símbolo de pureza), la pequeña bóveda con rosetas, el soporte lateral en forma exuberante. El manto de la Virgen es la estrella bordada, antiguo símbolo de la gracia divina sobre María y recordado por el cometa que guió a los magos después de la Natividad. El broche ovalado clavado en su pecho se compone de un gran zafiro, símbolo de la castidad y la modestia, rodeado de perlas. El bebé es gordito y en la posición de bendición, la celebración de una bola de cristal con oro mezclado con perlas, que simboliza su dominio sobre el mundo. Piezas virtuosas auténticas son las transparencias de vidrio o del velo impalpable que lo viste.

En los laterales hay algunos santos que están en diferentes planos del espacio, que se resumen en distintas ubicaciones en las diferentes etapas: a la izquierda el arcángel Miguel, a la derecha el arcángel Gabriel con un lirio. A continuación, de rodillas, están dos obispos. Su identificación se aclaró desde el estrado: son San Zenobio y San Justo de Volterra, la iglesia titular, que no debe confundirse con San Giusto mártir.

El esquema de la composición es piramidal, con la Virgen en la parte superior y los dos santos arrodillados en la base, por lo que surge del ejemplo de Fra Angélico. Incluso el fondo, con una pared que actúa como una quinta parte y algunas copas de los árboles que brotan más allá de la cortina, en este caso, una naranja, una granada y cipreses, todo tratados con un realismo extremo, que también alude a significados simbólicos (el símbolo de la granada de la fertilidad y la realeza, los cítricos, el emblema del pecado original que se supera con el nacimiento de Cristo y el establecimiento de una nueva alianza entre Dios y el hombre).

“Retrato del papa Sixto IV”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato del papa Sixto IV”, obra de Tizziano Vencello, esta datado entre 1545-1546, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 109 x 83 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

El cuadro representa la figura del papa aunque en el momento de pintarse el cuadro por Tizziano ya había fallecido en 1484 por lo que se cree que el cuadro obedece a un estudio para la creación de una medalla o para ser expuesto a modo de recordatorio.

Sixto IV incurrió en el nepotismo. Nombró en cargos de autoridad y de economía a más de 25 sobrinos y parientes, entre ellos ocho cardenales. Casó dos sobrinos con princesas bastardas de Nápoles, otro con la heredera del Ducado de Urbino, otro con los Sforza de Milán. Todo tan rápidamente y en tan poco tiempo que nadie llegaba a hacer el recuento de aquella parentela.

“Retrato del obispo Ludovico Beccadelli”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato del obispo Ludovico Beccadelli”, obra de Tizziano Vencello, esta datado 1552, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 117,5 x 97 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

El personaje había nacido de una antigua familia de Bolonia, que abandonó sus estudios de derecho con su amigo Giovanni Della Casa para dedicarse a la literatura. Junto con la casa se mudaron de Bolonia a Padua, donde desarrolló su formación humanística, asistiendo a Pietro Bembo y otros literatos.

“Retrato Eleonora Gonzaga della Rovere”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato Eleonora Gonzaga della Rovere”, obra de Tizziano Vencello, esta datado entre 1536-1537, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 114 x 103 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

En enero de 1536 la duquesa escribió a su embajador en Venecia informando del deseo de ser retratado por Tiziano que estaba en la ciudad de Pesaro, donde residía la mujer. El artista ya se había comprometido hacer un retrato incluso con su marido, Francesco Maria della Rovere, durante los días de la coronación de Carlos V en Bolonia en 1530.

Eleonora Gonzaga está sentada y representada de medio cuerpo y girada hacia la izquierda. Lleva un tocado con bordados de oro que refleja una tendencia iniciada por Isabel de Este-Gonzaga, muy en boga en esos momentos entre las mujeres de la nobleza.

“Venus de Urbino”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Venus de Urbino”, obra de Tizziano Vencello, esta datado 1538, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 165 x 119 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

La pintura, cuyo comitente fue Guidobaldo II della Rovere, entonces hijo del duque de Urbino, representa a una joven desnuda reclinada sobre un lujoso lecho en el interior de un palacete veneciano. En el fondo se observa una gran ventana por donde entran leves reflejos de la laguna y se observa el cielo tras un árbol; al lado de la ventana se encuentran dos criadas casi enigmáticamente de espaldas acomodando ropas en un cassone o arcón de bodas; el arcón parece evocar el mito de la caja de Pandora. A los pies de la joven desnuda duerme un perrito; la presencia del perro es signo de que la representada no es una diosa, sino una mujer real, aunque no se sabe exactamente quién es. Algo más: el perro, típica alegoría de la fidelidad, aquí aparece, sugerentemente, dormido.

Detalle “Venus de Urbino”, obra de Tizziano Vencello

Aunque esta pintura se encuentra directamente inspirada por la Venus dormida del Giorgione, es evidente que se aleja del idealismo característico del Renacimiento italiano. La mayor diferencia con las Venus típicas es que la joven aparece obviamente consciente y orgullosa de su belleza y su desnudez; no existe ningún elemento que provoque la sensación de un distanciamiento “divino”: ella mira de un modo dulce, cómplice y decidido al que la observa, mientras su mano izquierda se apoya sobre el pubis, que se ubica en el centro de la composición. Las flores en la mano derecha resaltan el aura de erotismo ya reforzada por la luz casi dorada que ilumina al cuerpo. El color claro y cálido del cuerpo produce una impresión de sensual indolencia, realzada en el contraste con el oscuro del fondo y el colchón; en efecto, el color oscuro del lienzo de la pared provoca una cesura en la mirada que entonces se centra en el cuerpo de la mujer. La fuga de la perspectiva se dirige hacia la derecha y está acentuada por las criadas figuradas totalmente vestidas y con tonos fríos que aportan una cuota de realismo, la presencia de la columna y el árbol en el punto de fuga, y los sucesivos planos iluminados y sombreados que se resaltan en las baldosas. Todo esto hace destacar a la joven desnuda que se encuentra dispuesta en una elegante línea oblicua.

Aunque la obra mantiene elementos del Giorgione, Tiziano innova al exponer claramente la voluptuosidad merced al tratamiento resuelto del desnudo y a la gran pureza formal del conjunto.

El cuadro fue un regalo del Duque hacia su joven esposa. La pintura representa la alegoría al matrimonio y era un modelo “didáctico” para Giulia Varano la joven esposa, de erotismo, fidelidad y maternidad.

El erotismo es evidente en la pintura, de hecho, recuerda las obligaciones maritales de la mujer hacia su esposo. La alegoría erótica es aún más clara en la representación de Venus, diosa del amor, como una mujer sensual y exquisita que mira fijamente al espectador, que no puede ignorar su belleza. La luz y el color claro y cálido del cuerpo de Venus, en contraste con el fondo y los cojines obscuros, resaltan ulteriormente el propio erotismo.

El perro a los pies de la mujer es un símbolo de fidelidad conyugal mientras que detrás, la empleada que observa a la niña mientras hurga en un cajón simboliza la maternidad.

“Retrato de Francesco Maria de lla Rovere”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Francesco Maria de lla Rovere”, obra de Tizziano Vencello, esta datado 1536-1538, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 114 x 103 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

La pose elegida por el duque recuerda al de Carlos V de Tiziano ejecutado en el Palacio Ducal de Mantua dentro de la serie de los doce Césares, y que hoy se conoce de los grabados. De medio cuerpo, una armadura que llevaba y, girando ligeramente su cuerpo, se apoya en el bastón de mando del líder (símbolo del generalato obtenido de la República de Venecia), estirando el brazo derecho cerca de la de la espada.

“Santa Margarita de Antioquía y el dragón”, obra de Tizziano Vencello, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Santa Margarita de Antioquía y el dragón”, obra de Tizziano Vencello, esta datado entre 1565-1570, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 116.5 x 98 cm. Se expone en la sala 83 Tiziano.

Santa Margarita es encarcelada por no acceder a los requerimientos del prefecto, se cuenta que consiguió echar, de sí misma, un demonio de su garganta por medio del signo de la cruz; otra versión es que un demonio se le apareció en forma de dragón y la devoró, pero ella poseía un crucifijo con el cual rasgó la piel del dragón y salió de allí. Entonces la sometieron a las más terribles torturas: la azotaron con varillas, cortaron su cuerpo con tridentes, le clavaron clavos y fue lacerada con un gancho.

“La Sagrada Familia con San Jerónimo y Anna”, obra de Lorenzo Lotto, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “La Sagrada Familia con San Jerónimo y Anna”, obra de Lorenzo Lotto, esta datado 1534, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 69 x 87,5 cm.

La pintura de los Uffizi, muestra a San Jerónimo en el mercado, donde hay un paisaje a través de una ventana. La composición se juega a lo largo de las diagonales, con el grupo de la Virgen con el Niño vigilado por Santa Ana a la derecha y la izquierda está san José en adoración, coronado por san Jerónimo en la sombra y ligeramente expresa una menor calidad en el detalle.

Al igual que en otras obras de la época destacan los animados contrastes de los colores, la pañería, la expresión patética de los personajes, sobre todo por la cara de éxtasis de san José. La luz se detiene en las figuras con mucha libertad, destacando el grupo de la derecha y cambiando el énfasis de los caracteres a la izquierda.

“Susana y los viejos”, obra de Lorenzo Lotto, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Susana y los viejos”, obra de Lorenzo Lotto, esta datado 1517, realizado en óleo sobre lienzo; tiene unas medidas de 66 x 51 cm.

Susana era la esposa de Joaquín, un rico e influyente judío en el Exilio Babilónico, que fue amenazada por dos personas por cuestiones legales de su marido. Mientras que la mujer estaba caminando en el jardín con dos criadas, tomó la decisión de tomar un baño en una bañera, mientras que los dos criadas se habían alejado, mientras dos personas de edad avanzada la espiaron, dos ancianos jueces, al verse rechazados, acusan a Susana de adulterio. Tuvo que intervenir el profeta Daniel para exonerarla del pecado.

“Transfiguración”, obra de Giovanni Girolamo Savoldo, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Transfiguración”, obra de Giovanni Girolamo Savoldo, esta datado 1517, realizado en óleo sobre tabla.

Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a Jacobo y a Juan su hermano, y los llevó aparte a un monte alto; y se transfiguró delante de ellos, y resplandeció su rostro como el sol, y sus vestidos se hicieron blancos como la luz.

“Retrato de un joven”, obra de Lorenzo Lotto, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de un joven”, obra de Lorenzo Lotto, esta datado 1506, realizado en óleo sobre tabla; tiene una medidas de 29 x 23 cm.

El cuadro fue parte de la colección del cardenal Leopoldo de Medici, que se menciona en el inventario de 1675 como un retrato de Raphael de Leonardo da Vinci, una hipótesis mantenida hasta que el inventario de 1784. En la Galería de 1825 se atribuye como una obra de autor anónimo, posteriormente, después de un estudio detallado fue atribuido a Lorenzo Lotto.

“Retrato del cavaliere Pietro Seco Suardo”, obra de Giovanni Battista Morini, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato del cavaliere Pietro Seco Suardo”, obra de Giovanni Battista Morini, esta datado 1513, realizado en óleo sobre tabla; tiene una medidas de 183 x 104 cm.

El hombre es retratado con notable penetración de la fisonomía, cerca de una ventana en la que se ve un paisaje cristalino de Lombardía con la arruinada torre de la ciudad, que parece salir del pincel de Bramantino de simplificación geométrica y control del luminismo pictorico.

“Retrato de un hombre con libro”, obra de Giovanni Battista Morini, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de un hombre con libro”, obra de Giovanni Battista Morini, esta datado entre 1560-1565, realizado en óleo sobre tela.

Moroni siempre permanecerá fiel a su convicción de miembro naturalista, no se limita a la caracterización individual, sino la búsqueda de una verdad más profunda y humana, para transmitir la verdad moral y social del personaje representado.

“Retrato de Giovanni Antonio Pantera”, obra de Giovanni Battista Morini, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Giovanni Antonio Pantera”, obra de Giovanni Battista Morini, esta datado 1545, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 81 x 63 cm.

La identidad del hombre representado pudo identificarse a través del libro que sostiene en su mano izquierda y, inscripción legible en la base de la última cubierta, que se identifica con la monarquía de nuestro Señor Jesucristo, poema espiritual publicado en Venecia en 1545, y se trata de una obra del poeta Giovanni Antonio Pantera.

Retrato de Santa Catalina de Alejandría”, obra de Artemisia Gentileschi, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Retrato de Santa Catalina de Alejandría”, obra de Artemisia Gentileschi, esta datado entre 1613-1620, realizado en óleo sobre tela.

El cuadro de Santa Catalina de Alejandría fue pintado por Artemisia hacia 1620 durante su estancia en Florencia, se presenta como una mujer de noble linaje que lleva una corona engastada con piedras preciosas y un vestido de príncipe. En su mano derecha sostiene la palma del martirio mientras que la izquierda está descansando en el símbolo del engranaje de la tortura a la que fue sometido, según la leyenda, alrededor de 305 d. C por el entonces emperador de Alejandría, por negarse a abandonar su fe en Cristo.

“Judit decapita a Holofermes”, obra de Artemisia Gentileschi, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Judit decapita a Holofermes”, obra de Artemisia Gentileschi, esta datado entre 1620-1621, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 199 x 162.5 cm.

El tema de Judith Holofernes es uno de los episodios de Antiguo Testamento más frecuentemente representados en la historia del arte. Sin embargo, con la importante excepción del cuadro de Judith y Holofernes de Caravaggio que esta conservado en Roma, nunca se ha llegado a representar una escena tan cruda y dramática como la pintada en esta pintura de Artemisia Gentileschi.

“Escudo con la cabeza de Medusa”, obra de Michelangelo Merisi da Caravaggio, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Escudo con la cabeza de Medusa”, obra de Michelangelo Merisi da Caravaggio, esta datado 1597, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 60 x 65 cm.

El tema de la medusa era muy querido por los Medici. En las humanidades, la cabeza de la Gorgona Medusa tenía un valor simbólico como una alegoría de la prudencia y la sabiduría. Este simbolismo era bien conocido y presente en muchas de pinturas y tratados la época

Medusa era un monstruo con la cabeza cubierta con cabellos de serpiente, cuya mirada tenía el poder de petrificar a cualquier persona que la miraba. El héroe Perseo, con la ayuda de Minerva y Mercurio buscó a Medusa y la mató cortando la cabeza. Con el fin de evitar una apariencia aterradora, el héroe no veía al monstruo, pero si el reflejo en un escudo de bronce pulido.

“Baco”, obra de Michelangelo Merisi da Caravaggio, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “Baco”, obra de Michelangelo Merisi da Caravaggio, esta datado entre 1597-1598, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 98 x 84 cm.

La pintura representa a un joven dios Baco, reclinado a la manera clásica con uvas y hojas de parra en el pelo, manoseando el cordel de la floja toga que le cubre. Sobre una mesa de piedra que hay enfrente de él, además de un bol de fruta y una jarra grande de cristal con vino tinto; con su mano izquierda ofrece al espectador un cáliz o copa de vino llana y ancha, aparentemente invitando al espectador a unirse a él.

“El tributo del cesar”, obra de Bartolomeo Manfredi, Galería Uffizi

El siguiente cuadro “El tributo del cesar”, obra de Bartolomeo Manfredi, está datado siglo XVII, realizado en óleo sobre tela; tiene unas medidas de 130 x 191cm.

Bartolomeo Manfredi pudo haber sido un alumno de Caravaggio en Roma: en su famoso juicio por difamación en 1603 Caravaggio mencionó que un tal Bartolomeo, acusado de distribuir poemas difamatorios atacando a su rival detestado. Caravaggio Baglione, había sido un sirviente de suyo. Ciertamente, la Manfredi Bartolomeo conocido en la historia del arte era un seguidor de cierre innovador del estilo de Caravaggio, con su pintura mejorada del claroscuro y la insistencia en el naturalismo, con un don para contar historias a través de la expresión y el lenguaje corporal.

Plaza Signoria en Florencia

Aquí damos por finalizada nuestro recorrido por la Galería de los Uffizi, como siempre que se visita un mueso tan grande de pintura tenemos la cabeza embotada, hemos accedido antes de las 11,00 horas y son las 16,30 horas, tiempo más que suficiente para necesitar coger aire puro.

Cuando salimos es casi de noche, aunque la luz es todavía suficiente para disfrutar de las replicas de las esculturas de la plaza de la Signoria , el elemento central el palacio Viejo que representa una audaz proyecto arquitectónico con su adjunta torre de Ardolfo de 95 metros de altura.

A sus pies destaca la fuente de Neptuno que corresponde con la primera fuente publica de Florencia, construida con un impecable mármol blanco que tuvo tanta controversia durante su inauguración por que el pueblo con grandes necesidades gritaba: “Ammannato Ammannato, quanto marmo hai sciupato!” (Ammannato Ammanato, ¡cuánto mármol has malgastado!).

En una plaza tan prestigiosa de Florencia no podía faltar la tienda de mayor notoriedad mundial de la moda “Chanel”, su escaparate esta puesto con las nuevas tendencias para la primavera, los precios son no aptos para viajeros de clase media; tres cuartos 5.000 euros, vestido 1500 euros, etc.

Porcellino en Florencia

Ya es muy tarde para intentar ver algún sitio turístico y nos dedicamos a vagar por la ciudad, lo primero que vemos es el la estatua que la llaman el Porcellino. Se trata de una escultura de bronce de un jabalí situado en la entrada al mercado Nuovo.

Según la leyenda, tocar su hocico nos dará fortuna, este lo tiene bien desgastado lo que indica que ha repartido mucha fortuna desde su nacimiento, aunque ahora ha comenzado la tradición de pedir fortuna aportando una moneda, para lo cual debemos meter una moneda en la boca del jabalí, por donde sale el agua. Si la moneda cae dentro de la pila que reposa a sus pies y se cuela por la ranura tendremos suerte en abundancia. Lo que no todos saben es que si la moneda que depositamos pesa poco, la presión del agua la lanzará hacia los lados y no se introducirá por la rendija (mala suerte), siempre tienes la posibilidad de repetir la acción hasta que la moneda se introduzca por la rendija y quede en manos del ayuntamiento quien será el que tenga buena suerte.

Los escaparates de las mejores tiendas de moda se suceden, ahora estamos en tiempo de rebajas, en la de la marca “Guess” indica “fino al 50 saldi” pero ni con las rebajas nuestra cartera puede comprar los zapatos de esta tienda.

Selfie en puente Vecchio de Florencia

Caminamos por la vía de santa María hasta el puente Vecchio que salva el río Arno. La imagen a esta hora de la tarde es muy bonita, las tiendas comienzan a iluminarse mientras que el sol describe los efectos rosas de su último aviso.

Es una zona preferida de Florencia de los turistas para hacer un selfies y enviarlo por internet, en este momento las mujeres no tiene problemas para con ayuda de sus palos pueden hacerse sus propias fotografías que podrán contemplar sus novios a miles de kilómetros de distancia gracias a compartirlas inmediatamente en las redes sociales. En este momento es cuando echas en falta la fotografía analógica porque siempre te pedía ayuda para que les hicieras una fotografía, ¡ya ni eso!.. Para el viajero solitario, un selfie es un medio muy común para documentar los lugares que visita.

Reconozco con soy miembro de una generación anterior, y no entiendo muy bien, el uso excesivo de selfies porque puede ser considerado un poco narcisista, pero en realidad, más que tratarse de un problema de postureo de la moda, más bien parece ser una cuestión de brecha generacional.

Joyerías en puente Vecchio de Florencia

El puente Vecchio se ha convertido en la imagen de identidad de toda una ciudad y por su aspecto es uno de los más famosos del mundo. Atraviesa el río Arno por una de las partes más estrechas.

El puente, por sí solo, es casi una ciudad con sus tres arcos que sostienen una calle repleta de edificios y en sus locales comerciales se especializaron en venta de joyerías porque según la leyenda la venta de esos artículos estaba exenta de impuestos. Los comerciantes eran autorizados antiguamente a mostrar sus mercancías sobre mesas por el Bargello (una especie de magistrado comunal). Se cree además que el término Bancarrota se originó en este puente, debido a que cuando un vendedor no podía pagar sus deudas, su mesa o puesto para la venta, era rota por los soldados: banco+rotto, bancarrota. Al no disponer ya de una mesa el comerciante no podía vender sus mercancías.

Los carniceros habían monopolizado las ventas en el puente en la época medieval pero en 1593 se creó un decreto que prohibió la venta de carne sobre el puente y el lugar fue ocupado por los comerciantes de joyas.

Benvenuto Cellinien puente Vecchio de Florencia

En el centro del puente hay dos terrazas panorámicas: una está cubierta por el corredor vasariano; la otra alberga el monumento a Benvenuto Cellini, realizado por Raffaello Romanelli e inaugurado el 26 de mayo de 1901. La obra, dotada con una fuente, fue colocada en la celebración del cuarto centenario de la muerte de Cellini.

Es la hora de regresar hacia el área de autocaravana en nuestro camino tenemos que pasar nuevamente por la plaza del Duomo, la imagen de la catedral y del baptisterio es excepcional, el mármol blanco, verde y rojo brilla especialmente esta noche después de la tarde de lluvia.

Antes de coger el autobús todavía tenemos tiempo de hacer una parada para ver la Iglesia de Santa María de Maggiore, en su cartel informativo indica que es una de las más antiguas de Florencia.

La fachada de mampostería demuestra que es románica del siglo XI, los laterales fueron construidos en el siglo XIII momento en que fue utilizada por los monjes cistercienses en estilo gótico.

El interior, la planta describe tres naves con columnas cuadradas y arcos de medio punto que sujetan una bóveda de crucería, tanto las columnas como las bóvedas están decorados con frescos.

Plaza del Duomo de Florencia

Sus obras de arte que podemos ver incluyen los frescos de Bernardino Poccetti (Historias de San Zenobio en la bóveda), y, sobre el altar de la capilla transepto izquierdo, un panel de relieve de estuco policromado de la Virgen del Carmelo, mucho tiempo se atribuyó al artista del siglo XIII, Coppo di Marcovaldo. Una restauración reciente ha llegado a cuestionar esta atribución y postular una fecha anterior del siglo XII. En la capilla alberga la tumba de Brunetto Latini, descubierta en 1751,

Otras obras de arte de la iglesia incluyen el tríptico de Carnesecchi, por Masolino y Masaccio, así como el Martirio de San Sebastián y la Lamentación sobre Cristo muerto con los santos de Botticelli.

En uno de los altares podemos ver la “Virgen confía el niño a San Francisco”, obra de Matteo Roselli (1576-1650), realizado en óleo sobre lienzo.

En el siguiente altar está presidido por “Cristo se aparece a Santa María Magdalena de Pazzi”, obra de Onofrio Marinari (1627-1715), realizado en óleo sobre lienzo.

Iglesia de Santa María de Maggiore de Florencia

El siguiente altar está decorado con un altorrelieve “San Camilo de Lellis habla con Jesucristo”, obra de Francesco Collina en el siglo XIX.

Interior de la iglesia de Santa María de Maggiore de Florencia

En uno de los laterales hay una escultura funeraria, con el sarcófago esta atribuida a Tino di Camaino (1285-1337), procede de una urna funeraria y está realizada en mármol.

Después de esta iglesia ya solamente nos quedan fuerzas para ir hasta cerca de la estación de tren para coger el autobús número 4 que nos deja en la misma puerta del área de autocaravanas de Florencia.

Día 7 de enero (jueves)

Ruta: Florencia

Plaza del Duomo de Florencia

Al día siguiente repetimos la misma historia para volver hasta el centro de Florencia. Hoy tenemos pensado ir directamente hasta la plaza del Duomo donde podemos ver el conjunto monumental.

Una vez llegados a la plaza de la catedral acudimos directamente a la taquilla donde puedes comprar un billete combinado para el conjunto: Catedral, Baptisterio, Campanille y Museo, el precio es de 15 euros por adulto y 3 euros para cada niño.

Comenzamos la visita por el Museo del Duomo donde en tres niveles se exponen muchas de las obras originales retiradas del conjunto catedralicio, entrepaños de las puertas de la catedral, maquetas de madera de la construcción, objetos litúrgicos, el altar de plata de san Juan y la segunda piedad de las tres ejecutadas por Miguel Ángel. En su interior se ha alejado mucho en materia expositiva del típico museo catedralicio donde se exponen los excesos del obispado en plata y oro, en este museo se exponen muchas de las obras de arte de los artistas más famosos de Italia: Donatello, Pisano, Miguel Ángel, Della Robbia y constituye un sitio imprescindible para el conocimiento del arte italiano.

Nada más entrar al museo se abre una gran sala donde están colocadas muchas de las figuras rescatadas de la antigua catedral, entre las que podemos ver:

“Cristo Bendiciendo”, obra de Tino di Camaino, Museo Duomo de Florencia

La escultura de “Cristo Bendiciendo”, obra de Tino di Camaino, está datada entre 1320-1324, realizada en mármol.

El escultor era hijo de Camaino di Crescenzio di Diotisalvi, fue alumno de Giovanni Pisano, al que ayudó en la construcción de la fachada de la Catedral de Siena.

Se traslado a Florencia donde ejecuto muchos trabajos entre los que destacan una Virgen en el Museo Nacional del Bargello y la Caridad en el Museo Bardini, además de otro monumento funerario para Gastone de a Tour conservado en el museo de la Basílica de la Santa Cruz.

“Cabeza de San Juan Bautista” obra de Tino di Camaino, Museo Duomo de Florencia

Más adelante podemos ver la escultura “Cabeza de San Juan Bautista” obra de Tino di Camaino, obra datada entre 1320-1324, realizada en mármol.

“Caridad” obra de Tino di Camaino, Museo Duomo de Florencia

Más adelante podemos ver un fragmento de la escultura “Caridad” obra de Tino di Camaino, obra datada entre 1320-1324, realizada en mármol.

Fragmento Puerta Norte del Baptisterio, obra de Lorenzo Ghiberti, Museo Duomo de Florencia

En el centro de la sala podemos ver la Puerta Norte del Baptisterio, obra de Lorenzo Ghiberti, esta datada entre 1403-1424, realizada en bronce.

La puerta está dividida en cuarterones donde en cada uno se representan escenas del nuevo testamento, se puede leer de abajo arriba, a partir de la tercera fila de izquierda a derecha vemos: Anunciación, Nacimiento de Jesús, Adoración de los Reyes Magos, Jesús entre los doctores; entre la cuarta fila vemos: Bautismo; tentaciones en el desierto; Jesús echa a los mercaderes del templo; Jesús camina sobre las aguas y salva a Pedro; en la quinta fila: Transfiguración; Resurrección de Lázaro; Entrada de Jesús en Jerusalén; ultima cena; en la sexta fila podemos ver: Oración en el Huerto; Prendimiento; Flagelación; Jesús ante Pilatos; en la séptima fila y ultima podemos ver: Subida al Calvario; Crucifixión; Resurrección; Pentecostés. En las dos filas primeras podemos ver figuras que representan a los santos, en la primera fila de abajo: San Ambrosio, San Jerónimo; San Gregorio y San Agustín; en la fila superior San Juan Evangelista; San Mateo; San Lucas y San Marcos.

En el centro “Maestá”, obra del escultor Arnolfo di Cambio, Museo Duomo de Florencia

En uno de los laterales del museo destaca la escultura de “Maestá” (Virgen en Majestad), obra del escultor Arnolfo di Cambio, esta datada entres 1300-1305, realizada en mármol.

Se sabe poco tanto de la familia como de los orígenes de Arnolfo di Cambio, pero parece ser que era hijo del Messer Lapo, notario en Colle di Val d'Elsa.

Arnolfo di Cambio se formó con Nicola Pisano y con él trabajó en el púlpito del Duomo di Siena (1265-1269), en el Arca di San Domenico en la Iglesia de San Domenico de Bolonia y por un periodo breve en la Fontana Maggiore de Perugia.

Fragmento “Puerta Este”, obra de Lorenzo Ghiberti, Museo Duomo de Florencia

En el otro lado de la sala se encuentra otra de las puertas del Baptisterio es la llamada “Puerta Este”, obra de Lorenzo Ghiberti, esta datada entre 1403-1424, realizada en bronce.

Se representan escenas del antiguo testamento, realizado en cuarterones más grandes con cinco filas y ocho columnas, se puede leer de arriba abajo y de izquierda a derecha: Historia de Adán y Eva, Historias de Caín y Abel, Historias de Noé, Historias de Abraham, Historia de Isaac y sus hijos, Esaú y Jacob; Historias de José; Historia de Moisés; Historias de Josué; Historia de David; Salomón y la reina de Saba.

“Domitio Virginis” obra del escultor Arnolfo di Cambio, Museo Duomo de Florencia

Otra de las esculturas “Domitio Virginis” (Dormición de la Virgen ) obra del escultor Arnolfo di Cambio, esta datada entre 1300-1305, realizada en mármol.

“Santa Reparata en una escena de su vida”, obra pintor anónimo, Museo Duomo de Florencia

Entre las pinturas que exhibe el museo podemos ver “Santa Reparata en una escena de su vida”, obra de un pintor anónimo florentino, estada datada a principios del siglo XV.

“Santa Reparata” obra del Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

A su lado una escultura del mismo tema “Santa Reparata” obra del Andrea Pisano, esta datada en el segundo cuarto del siglo XIV, realizada en mármol.

“Santa Catalina de Alejandría”, obra atribuida a Bernardo Daddi, Museo Duomo de Florencia

Un poco más adelante esta la tabla “Santa Catalina de Alejandría”, obra atribuida a Bernardo Daddi, está datada en el mitad del siglo XIV, realizada en temple sobre madera.

“Santa Catalina de Alejandría con escenas de la vida y el retrato del donante”, obra de Giovanni del Biondo, Museo Duomo de Florencia

A su lado la tabla de “Santa Catalina de Alejandría con escenas de la vida y el retrato del donante”, obra de Giovanni del Biondo, realizado a finales del siglo XIV o principios del siglo XV, realizada en temple sobre madera; tiene unas medidas de 226 x 117 cm.

Giovanni del Biondo va desarrollando su propio estilo como pintor caracterizado por los esquematismos iconográficos arcaizantes basados en la pintura bizantina, la fuerte caracterización de los rostros y su vivo colorido con fondos dorados. En su obra se aprecia la introducción en la escuela de Florencia de las nuevas formas del gótico internacional.

“Luneta con Santa María Magdalena penitente”, obra de Benedetto Buglione, Museo Duomo de Florencia

Un poco más adelante podemos ver la escultura “Luneta con Santa María Magdalena penitente”, obra de Benedetto Buglione, está datada a finales del siglo XV o principios del siglo XVI.

Benedict Buglioni se formó en el taller de Andrea della Robbia que le instruye en la loza vidriada con diversas técnicas de acristalamiento (loza de barro esmaltada). Gracias a una técnica más rápida se logró reducir el costo de producción de cerámica vidriada, obteniendo trabajos sobre nuevas obras importantes, tales como el friso de los trabajos de la misericordia en el Hospital de Yule en Pistoia, llevado a cabo en gran medida por su sobrino Buglioni Santos.

“Busto Santa María Magdalena”, obra de Giovanni Bandini, Museo Duomo de Florencia

A su lado “Busto Santa María Magdalena”, obra de Giovanni Bandini, está datada a mediados del siglo XVI.

Giovanni Bandini estudió con Baccio Bandinelli y a la muerte de su maestro, heredó el taller adelantando los trabajos pendientes, como los relieves para la balaustrada de Santa María del Fiore. Emprendió entonces una larga carrera al servicio de la "Obra del Domo" que le valió el sobrenombre de Giovanni "dell'Opera".

”Santa María Magdalena penitente”, obra de Donatello, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura que nos propone el museo es ”Santa María Magdalena penitente”, obra Donato di Niccolò di Betto Bardi más conocido con el sobrenombre de Donatello (1386-1466), está datada en la mitad del siglo XV, realizada en madera.

Donatello realiza una obra general con una temática religiosa cuya inspiración se encuentra en la Leyenda dorada de Jacopo de la Vorágine ; en ella se explica cómo María Magdalena arrepentida por sus pecados se retira al sur de Francia para dedicarse a la vida ascética.

Parece ser que la obra fue encargada al artista para el Baptisterio de San Juan de Santa María dei Fiore, Florencia. Se trata de una escultura tallada en madera y policromada que representa a María Magdalena como una mujer de avanzada edad en cuyo rostro y cuerpo se aprecia el paso de los años y la vida de redención. Su ropa son harapos que cuelgan de su demacrado cuerpo en un sinfín de pliegues así como las calidades táctiles que el artista ha logrado en la representación del cabello y la piel de la mujer. El claroscuro cobra especial importancia en esta composición donde una infinidad de pliegues recrean un continuo juego de luces y sombras.

El artista ha logrado recrear una figura dramática, teatral, con un marcado discurso propio que poco tiene que ver con las obras contenidas de la etapa clásica, acercándose más bien a la estética manierista o incluso barroca.

“Tríptico de San Zenobio, San Juan Bautista y Santa Reparata”, obra de un pintor florentino, Museo Duomo de Florencia

En la misma sala podemos ver “Tríptico de San Zenobio, San Juan Bautista y Santa Reparata”, obra de un pintor florentino anónimo, realizado en temple sobre madera, está datado en la primera mitad del siglo XIV.

“Crucifixión”, obra de Giovanni di Balduccio, Museo Duomo de Florencia

Más adelante esta la escultura “Crucifixión”, proviene del Baptisterio, obra de Giovanni di Balduccio, está datado en la primera mitad del siglo XIV.

Giovanni di Balduccio (Pisa 1290-después de 1349) fue un escultor italiano. Estuvo activo entre los años 1317 y 1349, fue uno de los discípulos relevantes de Andrea Pisano.

“San Zenobio con Anunciación y el retrato del donante”, obra de Jacopo di Cione, Museo Duomo de Florencia

La siguiente tabla es “San Zenobio con Anunciación y el retrato del donante”, obra de Jacopo di Cione, está datado a finales del XIV, realizado en temple sobre madera.

Jacopo di Cione nacido en Florencia entre 1320 y 1330, su obra está estrechamente relacionada con sus tres hermanos mayores Andrea di Cione di Arcangelo (llamado Orcagna), Nardo di Cione y Matteo di Cione. Los hermanos trabajaron a menudo en colaboración. Jacopo vivió en el popolo Sancte Marie Novelle y, más tarde en la vida, en el popolo Sancti Laurentii.

“Relicario de San Antonio Abad”, obra de Antoni di Salvi, Museo Duomo de Florencia

Una de las muestras más importantes de la orfebrería del museo “Relicario de San Antonio Abad”, obra de Antoni di Salvi, realizado en plata dorada, está datada en 1514.

“Relicario de la cadena de San Pedro”, obra de un maestro orfebre florentino, Museo Duomo de Florencia

A su lado “Relicario de la cadena de San Pedro”, obra de un maestro orfebre florentino, datado en la primera mitad de siglo XV, realizado en plata.

“Degollación de san Juan Bautista”, obra atribuida Antonio Veneciano, Museo Duomo de Florencia

La siguiente tabla “Degollación de san Juan Bautista”, obra atribuida Antonio Veneciano, está datada en el primer cuarto del siglo XIV, realizado en temple sobre madera.

Antonio Veneciano se cree que nació en Venecia y fue discípulo de Taddeo Gaddi. Entre 1384 y 1387 acabó los frescos de San Rainer, empezados por Andrea da Firenze en el cementerio de Pisa.

“Relicario del velo de Santa Agata y otra reliquia”, obra de Giovan Battista Foggini, Museo Duomo de Florencia

Otro de los trabajos de orfebrería del museo es el “Relicario del velo de Santa Agata y otra reliquia”, obra de Giovan Battista Foggini, Bernardo Holzmann, está datado entre 1710-1714.

Relicario de san Jerónimo”, obra de Antonio di Salvi, Museo Duomo de Florencia

Más adelante podemos ver “Relicario de san Jerónimo”, obra de Antonio di Salvi, está datado en 1487, realizado en plata.

“Relicario de san Antonio Abad”, obra de Antonio di Salvi,, Museo Duomo de Florencia

A su lado podemos ver otra obra del mismo maestro “Relicario de san Antonio Abad”, obra de Antonio di Salvi, está datado en 1514, realizado en plata y oro.

“Piedad”, obra de Michelangelo Bionarroti, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra es una de las más famosas del museo “Piedad”, obra de Michelangelo Bionarroti, realizada en mármol, está datada entre 1547-1555.

Detalle “Piedad”, obra de Michelangelo Bionarroti

Es conocida como la Piedad Bandini o Piedad florentina tiene una medida de más de dos metros de altura, y fue empezada hacia el año 1550 y realizada en Roma, donde el artista tenía su residencia habitual desde 1534. Representa el cuerpo de Cristo sostenido por Nicodemo, abrazado por la Virgen María y a la izquierda del grupo, María Magdalena. En el rostro de Nicodemo el artista realizó su propio autorretrato. En esta época ya Miguel Ángel estaba muy influido por su profundo pensamiento religioso, y este grupo escultórico lo realizó con el deseo que fuera colocado en su sepultura en la basílica de Santa María la Mayor en Roma.

La escultura la vendió Miguel Ángel a Francesco Bandini por doscientos escudos, ya que cambió de opinión y decidió ser enterrado en Florencia. La escultura estuvo en la villa romana de Francesco Bandini hasta su traslado y colocación en la iglesia de San Lorenzo de Florencia por Cosme III en 1674. Allí estuvo hasta que en el año 1722 fue transferida a Santa María del Fiore y finalmente desde 1960 se expone en el museo de la catedral

Detalle “Piedad”, obra de Michelangelo Bionarroti

A diferencia de la serenidad que representó en su primera realización de la Piedad del Vaticano, en esta demuestra su estado anímico presentando el dramatismo de la muerte con la angustia en los personajes. Los representan dentro de una composición piramidal, el Cristo se muestra como una figura “serpentinata” propia del manierismo.

La obra se patentiza por el simbolismo de los lados: el derecho, donde se halla la Magdalena , es el de la Vida , y el izquierdo, donde está María, es el de la Muerte. Personificando a la divina Providencia, Nicodemo, como el sacerdote en unos esponsales, completa con profunda emoción la reunión de la Madre y el Hijo, tan deseada por María. El dolor por la muerte ha sido superado: los personajes vivos están invadidos del mismo sentimiento de beatitud que se lee en los serenos rasgos de Cristo muerto. Los cuerpos individuales se funden uno en otro, compenetrándose íntimamente como los sentimientos de los personajes. Esta nueva concepción de la Piedad es una demostración de que Miguel Ángel se ha reconciliado con la idea de la muerte, a la que ve ahora llama como la suprema liberación del alma.

Miguel Ángel insatisfecho por su obra, empezó a destruirla siendo detenido por su criado, aún actualmente es posible ver algunas roturas en el cuerpo de Cristo en el brazo y en la pierna izquierda y en los dedos de la mano de la Virgen. La figura de la Magdalena , a la izquierda del grupo, fue terminada por Tiberio Calcagni, alumno y amigo de Miguel Ángel, resaltando del resto del grupo por su dimensión más pequeña.

“Cristo en el trono con las tres Marías y un santo florentino”, obra de Niccolo Barabino, Museo Duomo de Florencia

La siguiente tabla “Cristo en el trono con las tres Marías y un santo florentino”, obra de Niccolo Barabino, realizado en óleo, está datado entre 1882-1883.

“Sibila”, obra de Nino Pisano, Museo Duomo de Florencia

Más adelante podemos ver la escultura “Sibila”, obra de Nino Pisano, está datada en la segunda mitad del siglo XIV, realizado en mármol.

Nino Pisano fue el último de los grandes escultores del trecento italiano, hijo de Andrea Pisano. Su estilo está relacionado con cambios en el gusto, de acuerdo con los dictados provenientes de Francia, con sinuosos planteamientos, más alejado del clasicismo de su padre

“Profeta”, obra de Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

A su lado podemos ver la escultura “Profeta”, obra de Andrea Pisano, está datada en la segunda mitad del siglo XIV, realizado en mármol.

“David”, obra de Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

Más adelante podemos ver la escultura “David”, obra de Andrea Pisano, está datada en la segunda mitad del siglo XIV, realizado en mármol.

“Profeta Zuccone”, obra de Donatello, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta Zuccone”, obra de Donato di Niccolò di Betto Bardi, conocido como Donatello, está datada entre 1423-1435, realizada en mármol.

El profeta Habacuc, es una figura un poco idealizada, con características irregulares y pelo cortado casi a cero, que los florentinos llaman el nombre de “Zuccone”. Las estatuas del lado Este, fueron las últimas obras talladas entre 1420 y 1435 y estaban destinados originalmente para el lado norte, el menos visible, ya que esta cerca de la pared de la catedral.

“Profeta San Juan Bautista”, obra de Nanni di Bartolo, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta San Juan Bautista”, obra de Nanni di Bartolo, está datada en 1425, realizada en mármol.

“Profeta Pensativo”, obra de Donatello, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta Pensativo”, obra de Donato di Niccolò di Betto Bardi, conocido como Donatello, está datada entre 1418-1420, realizada en mármol.

El personaje de la estatua no ha sido claramente identificado por la falta de atributos iconográficos, por lo que es llamado por el nombre convencional de Profeta pensativo, a causa del gesto que realiza con la cabeza baja y la mano apoyada en el mentón. La estatua se caracteriza por un gran realismo y una profunda intensidad en la expresión con un sentido de la energía retenida como las mejores obras de Donatello.

“Sacrificio de Isaac”, obra de Donato di Niccolò di Betto Bardi, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Sacrificio de Isaac”, obra de Donato di Niccolò di Betto Bardi, conocido como Donatello con la ayuda del escultor Nanni di Bartolo, está datada 1421, realizada en mármol.

“Profeta”, obra de Nanni di Bartolo, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta”, obra de Nanni di Bartolo, está datada en la primera década del siglo XV, realizada en mármol.

“Profeta Imberbe”, obra de Donatello, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta Imberbe”, obra de Donato di Niccolò di Betto Bardi, conocido como Donatello, está datada entre 1416-1428, realizada en mármol.

El personaje de la estatua no ha sido claramente identificado por la falta de atributos iconográficos, por lo que se denomina con el nombre convencional del Profeta imberbe o profeta con cartela. La estatua fue inspirada en el modelo clásico de orador y se caracteriza por un gran realismo y una profunda intensidad expresiva, se destaca por la desviación de la cabeza hacia la izquierda, se mantiene entre las mejores obras de Donatello. Parece que para este trabajo empleó como modelo a Filippo Brunelleschi, amigo de Donatello. El rostro está tratado con una penetrante fisonomía nada convencional.

“Profeta”, obra de Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta”, obra de Andrea Pisano, está datada entre 1337-1341, realizada en mármol.

“Profeta”, obra de Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta”, obra de Andrea Pisano, está datada en la última mitad del siglo XIV, realizada en mármol.

“Profeta”, obra de Nino Pisano, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Profeta”, obra de Nino Pisano, está datada entre 1337-1341, realizada en mármol.

“Moisés”, obra de Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Moisés”, obra de Andrea Pisano, está datada entre 1337-1341, realizada en mármol, colocada en el lado Sur.

“Astronomía”, obra del taller Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Astronomía”, obra del taller Andrea Pisano, está datada entre 1343-1360, realizada en mármol, colocada en el lado Norte.

“La Virgen y el Niño”, obra del taller Luca della Robbia, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “ La Virgen y el Niño”, obra del taller Luca della Robbia, está datada entre 1437-1439, realizada en barro cocido, colocada en el lado Norte.

Luca della Robbia nació en el seno de una familia de tintoreros (robbia significa “granza” en toscano, y esta palabra designa a una planta utilizada para teñir), empezó como escultor de mármol y estudió la escultura antigua. Luca Della Robbia realizó la Tribuna de los Cantores, en la Catedral de Florencia (1431), bajorrelieve muy importante que tenía que emplazarse encima de la puerta de la sacristía. La terminó hacia 1438-1439.

“Dios crea a Eva”, obra del taller Andrea Pisano, Museo Duomo de Florencia

La siguiente escultura “Dios crea a Eva”, obra del taller Andrea Pisano, está datada entre 1334-1343, realizada en mármol, colocada en el lado Oeste.

Esculturas del Campanile di Giotto, Museo Duomo de Florencia

La siguiente sala exponen las esculturas del Campanile di Giotto, de 36 metros de largo, con 16 estatuas de tamaño natural incluyendo los trabajos extraordinarias de los profetas de Donatello Habacuc, Jeremías, el profeta imberbe y el sacrificio de Isaac más 54 paneles que adornaban el campanario.

La siguiente sala del museo es la galería de la cúpula de Brunelleschi, dentro de la exposición se destina un gran apartado para exhibir los trabajos previos sobre la cúpula de Brunelleschi (1418-1436) con los modelos originales de madera del siglo XV, uno de ellos atribuido al mismo Brunelleschi, también se puede ver los materiales y herramientas del periodo utilizado para la construcción de la bóveda y de la máscara del gran arquitecto después de muerto.

“Mascara fúnebre de Filippo Brunelleschi”, obra de Andre di Lazzaro Cavalcanti, Museo Duomo de Florencia

Entre las obras más curiosas, ya hemos citado, “Mascara fúnebre de Filippo Brunelleschi”, obra de Andre di Lazzaro Cavalcanti, esta datado en 1446.

“San Juan Evangelista, San Marco y San Mateo”, obra de Lorenzo di Bicci, Museo Duomo de Florencia

Más adelante podemos ver tres ejemplos de decoraciones con pinturas dedicadas a “San Juan Evangelista, San Marco y San Mateo”, obra de Lorenzo di Bicci, realizado en temple sobre madera, está datado a finales del siglo XIV.

Lorenzo di Bicci (1350-1427) fue un pintor italiano de la escuela florentina, fiel a la tradición gótica. Se cree que aprendió el oficio de su padre, con el que además de él, comparte el nombre Bicci con otros pintores más. En 1370, Lorenzo se hizo miembro del gremio de San Lucas, la asociación corporativa de los pintores de Florencia

Estandarte

“Estandarte procesional con la imagen de Santa Agata” obra del Maestro Santa Agata y Jacopo del Casentinoi, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra está pintada por ambas caras “Estandarte procesional con la imagen de Santa Agata” obra del Maestro Santa Agata y Jacopo del Casentino, realizado en temple sobre madera, esta datado a finales del siglo XIII.

“Cristo Bendiciendo, San Ambrogio y un Doctor de la iglesia”, obra de Mariotto di Nardo, Museo Duomo de Florencia

Más adelante podemos ver tres ejemplos de decoraciones con pinturas dedicadas a “Cristo Bendiciendo, San Ambrogio y un Doctor de la iglesia”, obra de Mariotto di Nardo, realizado en temple sobre madera, está datado entre 1402-1404.

Los primeros documentos relativos a Mariotto di Nardo di Cione, probablemente es que era hijo del pintor del siglo XIV Nardo di Cione y por lo tanto nieto de Andrea Orcagna, se remontan a 1389 (inscripción en el arte de los médicos y boticarios), pero los primeros cuadros se refieren a él sobre la base estilística puede surgir a finales del siglo, por lo que se puede suponer razonablemente que nació entre 1360 y 1365

“Madonna y los santos Catalina de Alejandría y san Cenobio y el donante”, obra de Bernardo Daddi, Museo Duomo de Florencia

El siguiente cuadro “Madonna y los santos Catalina de Alejandría y san Cenobio y el donante”, obra de Bernardo Daddi, realizado en temple y oro sobre madera, está datado en el segundo cuarto del siglo XIV.

“San Ivo con suplicantes”, obra de Bernardo di Stefano Rosselli, Museo Duomo de Florencia

El siguiente cuadro “San Ivo con suplicantes”, obra de Bernardo di Stefano Rosselli, realizado en temple y oro sobre madera, está datado entre 1471-1480.

Bernardo di Stefano Rosselli nació con el nombre de Cosimo Rosselli. Comenzó su formación en el taller de Neri di Bicci a partir de 1460. Entre 1488 y 1490 trabajó con los pintores encargados de pintar la sala de los señores del Palacio de la Señoría en Florencia. En 1499 se encuentra documentado que recibió un pago por un altar de Rucellai en San Pancracio.

Alguna reminiscencia clásica es reconocible en algunas de sus obras, lo que ha generado la suposición de un posible viaje a Roma donde posiblemente entró en contacto con el arte antiguo y paleocristiano.

Su obra se desarrolla principalmente alrededor del modelo de Filippo Lippi y de otros artistas menores como Jacopo del Sellaio o el Maestro della lunetta di via Romana.

“Madonna de la leche con san Juan Bautista y san Blas”, obra de anónima de un pintor florentino, Museo Duomo de Florencia

El siguiente cuadro “Madonna de la leche con san Juan Bautista y san Blas”, obra de anónima de un pintor florentino, realizado en temple y oro sobre madera, está datado entre 1471-1480.

“Cabeza de Judas Tadeo”, obra de Bicci di Lorenzo, Museo Duomo de Florencia

El siguiente cuadro es un fragmento de fresco del apóstol “Cabeza de Judas Tadeo”, obra de Bicci di Lorenzo, realizado en temple, está datado entre 1439-1440.

Bicci di Lorenzo (1373-1452) fue un pintor italiano activo en la primera mitad del quattrocento, hijo de Lorenzo di Bicci y padre Neri di Bicci, todos ellos pintores. Es uno de los más caracterizados y prolíficos pintores del gótico internacional.

“Cabeza de Pedro o Andrés”, obra de Lippo d'Andrea, Museo Duomo de Florencia

El siguiente cuadro es un fragmento de fresco del apóstol “Cabeza de Pedro o Andrés”, obra de Lippo d'Andrea, realizado en temple, está datado entre 1436-1440.

Lippo d'Andrea era un miembro del grupo, que incluía Bicci di Lorenzo, Giovanni dal Ponte, y Rosselló di Jacopo Franchi, que se les encomendó la tarea de pintar frescos de los apóstoles en las capillas de la tribuna de la catedral de Florencia para celebrar la consagración de la cúpula de nueva construcción por el Papa Eugenio IV.

“Tríptico San Sebastián”, obra de Giovanni del Biondo, Museo Duomo de Florencia

El siguiente cuadro “Tríptico San Sebastián”, obra de Giovanni del Biondo, realizado en temple sobre tabla de madera, está datado en el tercer cuarto del siglo XIV.

Giovanni del Biondo se formó en Florencia probablemente en el taller de Orcagna, estableciéndose como pintor independiente hacia 1360, desarrollando su propio estilo caracterizado por los esquematismos iconográficos arcaizantes, la fuerte caracterización de los rostros y un vivo colorido marcan su obra. En su pintura se aprecia la introducción en Florencia de las nuevas formas del gótico internacional.

“Dosel de San Cenobio”, obra de Maestro del Bigallo, Museo Duomo de Florencia

El siguiente cuadro “Dosel de San Cenobio”, obra de Maestro del Bigallo, realizado en temple sobre tabla de madera, está datado en el segundo cuarto del siglo XIII.

Su identidad es un verdadero enigma. Alrededor del Maestro del Bigallo se reconocen un conjunto de obras realizadas por este autor en los alrededores del hospital de Bigallo –un refugio para peregrinos y viajeros– bajo la responsabilidad y patrocinio de los doce capitanes que dirigen la Compagnia Maggiore di Santa María, cofradía fundada en 1224 por el dominico San Pedro Mártir.

“Tondo con Agnus Dei”, obra del taller Andrea della Robbia, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra “Tondo con Agnus Dei”, obra del taller Andrea della Robbia, realizado en cerámica, esta datado en el último cuarto del siglo XV.

“Mosaico de san Cenobio”, obra de Monte di Giovanni, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra “Mosaico de san Cenobio”, obra de Monte di Giovanni conocido como “Del Fora”, realizado en mosaico, esta datado en el siglo XV.

“Busto de Cristo”, obra anónima de un maestro florentino, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra “Busto de Cristo”, obra anónima de un maestro florentino, realizado en cerámica, esta datado en el inicio del siglo XVI.

“Luneta con Madonna y el niño con ángel”, obra de Andrea della Robbia, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra “Luneta con Madonna y el niño con ángel”, obra de Andrea della Robbia, realizado en cerámica, esta datado en 1489.

“Relieve con Madonna y el niño”, obra de Pagno di Lapo Portigiani, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra “Relieve con Madonna y el niño”, obra de Pagno di Lapo Portigiani, realizado en mármol, está en datado en la mitad del siglo XV.

“Dios Padre bendiciendo con un ángel”, obra de Andrea della Robbia, Museo Duomo de Florencia

La siguiente obra “Dios Padre bendiciendo con un ángel”, obra de Andrea della Robbia, realizado en cerámica, está en datado en el tercer cuarto del siglo XV.

Cúpula del Duomo de Florencia

Terminamos la visita al Museo del Duomo salimos a la calle para seguir la visita y acceder a la subida hasta la cúpula de la Catedral , se realiza por un puerta independiente y está incluida en la visita general. He de mencionar que la subida hasta la primera parte de la cúpula no tiene ninguna dificultad pero luego la segunda parte se hace difícil por escaleras en vertical que requiere buena forma física.

Después de acceder a la escalera comenzamos la subida por la parte más ancha, donde los escalones no tienen demasiada pendiente, por lo que no debes de tener ningún problema para llegar hasta al primer tramo de la cúpula.

Una puerta te conduce al primer anillo interior que se encuentra bajo la bóveda de la cúpula de Brunelleschi. Puedes ir andando en redondo para apreciar los frescos que la decoran, fueron pintados a finales del siglo XVI, y representan diversas escenas del Juicio Final.

No te puedes detener demasiado pues este anillo, en realidad, es un pasillo muy estrecho, y sólo hay espacio para que camine una persona con dificultad, por lo que deberás ir viendo los frescos sin pararte según te diriges a la puerta de subida al mirador, sobretodo si hay mucha gente detrás de ti.

Primer tramo a la cúpula del Duomo de Florencia

Ahora tienes que subir un segundo tramo por una muy estrecha y empinada escalera de caracol, tienes una parte que además debes de compartir con quienes ya descienden de la cúpula

El último tramo es el más difícil con una parte subiendo una escalera que te accede al mirador, es muy empinada que puedes ver como se apoya directamente sobre la propia bóveda interior de la cúpula, estas transitando entre el espacio de la cúpula interior y exterior.

Una vez sobre el mirador sales a la calle y puedes disfrutar de las mejores vistas panorámicas de Florencia pudiendo identificar los más famosos edificios históricos de la ciudad y viendo los paisajes que rodean la ciudad.

Ya hemos visto en el museo cuales eran las dificultades técnicas para la construcción de la cúpula del Duomo que principalmente venían dadas por el tamaño.

La cúpula, de 45,5 m de ancho, era originalmente una cúpula de madera construida por Arnolfo di Cambio. Construir una cúpula sobre el presbiterio conllevaba muchos problemas técnicos. Existía ya un modelo de ladrillo para la cúpula desde 1367 (como queda explicado en la Vida de Brunelleschi de Antonio Manetti).

Vistas desde la cúpula del Duomo de Florencia

En 1419 tendrá lugar un concurso para diseñar una nueva cúpula (cupola en italiano) para la catedral. Los dos competidores más importantes eran Lorenzo Ghiberti (famoso por su labor en las «Puertas del Paraíso», en el baptisterio) y Filippo Brunelleschi.

Un desconocido arquitecto de la época llegó incluso a proponer que se llenara la catedral con tierra antes de levantar la cúpula a fin de construir la cúpula encima de la tierra moldeada (aún no se sabía de qué forma construir una cúpula con tanto peso y magnitud). Cuando se le preguntó cómo sacaría la tierra, se sugirió que la ciudad podría mezclar monedas con la tierra y los pobres, incidentalmente, vaciarían la cúpula.

Brunelleschi se inspiró en la cúpula de la “doble pared” o también conocida como “doble casco” del Panteón de Roma. Con la ayuda de Donatello y Nanni di Banco construyó un modelo de madera y ladrillo (exhibido en el Museo de la Opera del Duomo). Brunelleschi ganó por poco. Su modelo sirvió como guía para los artistas, pero intencionadamente lo presentó incompleto con la finalidad de asegurar su control sobre la construcción.

Maqueta en madera de la cúpula del Duomo de Florencia

Las soluciones del artista eran ingeniosas y sin precedentes como el peculiar diseño octogonal de doble casco se levanta sobre un tambor en piedra. Cada uno de sus ocho lados están revestidos por placas de mármol (blanco y verde) y presenta un gran óculo central. Sobre este tambor se levanta la cúpula propiamente dicha que, al exterior, muestra un claro perfil apuntado en el que destacan los ocho nervios realizados con sillares de mármol blanco de cuatro metros de espesor. Todo el espacio de los plementos existentes entre aquellos está cubierto por tejas de barro planas, de color rojizo. En el punto de convergencia de los nervios se alza una linterna prismática, de ocho lados y 16 metros de altura, con contrafuertes rematados por volutas y cubierta por una estructura cónica coronada por una esfera de cobre dorado sobre la que se alza una cruz.

La cúpula interior, de menor tamaño, posee un total de 24 nervios construidos en ladrillo que reciben las descargas de la estructura, dividiendo el peso de su carga y llevándolo hasta el tambor. Recoge así el empuje de la cúpula externa, mientras ésta aleja a aquélla de la humedad, al tiempo que sus ocho nervios visibles al exterior carecen de verdadera función estructural. Con todo ello se reduce el peso del conjunto y se posibilita la existencia de una galería interna entre ambas cúpulas que conduce hasta la linterna.

Cúpula del Duomo de Florencia

Esta enorme construcción pesa 37.000 toneladas métricas y contiene más de 4 millones de ladrillos. Brunelleschi hizo varios modelos y dibujos durante su construcción. Tuvo que inventar máquinas elevadoras especiales y grúas para izar las piedras grandes. Estas máquinas especialmente diseñadas y las brillantes técnicas de albañilería fueron las espectaculares contribuciones a la arquitectura de Brunelleschi. En la cúpula se utilizaron también refuerzos horizontales de tirantes de piedra y hierro, preparando el camino para las ideas de reforzamiento de hierro y acero que se utilizarían siglos después, como el caso del hormigón.

Pese a la resolución del concurso, ambos arquitectos fueron los encargados de llevar a cabo la obra. No hubo consenso. Ghiberti se burló de estos planos y los tildó de imposibles. Brunelleschi, profundamente ofendido, simuló una enfermedad y partió para Roma, dejando el proyecto en las manos de Ghiberti. Pero Ghiberti pronto se dio cuenta de que no estaba capacitado para llevar a cabo la obra por sí solo. En 1423 Brunelleschi regresó asumiendo la responsabilidad total de su construcción.

Vistas Palacio Vecchio desde la cúpula del Duomo de Florencia

El trabajo de la cúpula comenzó en 1420 y fue completado en 1436. La catedral fue consagrada por el papa Eugenio IV el 25 de marzo de 1436 (el primer día del año de acuerdo con el calendario florentino). Fue la primera cúpula octogonal en la historia que se construyó sin el soporte de un armazón de madera (el Panteón de Agripa fue construido entre 118 y 128 sin estructuras de soporte, pero se trata de una cúpula redonda) y fue la mayor cúpula construida entonces (todavía es la cúpula de albañilería más grande del mundo). Fue uno de los logros más espectaculares del Renacimiento.

La idea de Brunelleschi para coronar la cúpula con una gran linterna fue puesta en duda, dando lugar a otro concurso. Sus competidores fueron Lorenzo Ghiberti y Antonio Cachieri; Brunelleschi resultó ganador. Su diseño era para una linterna octogonal con ocho arbotantes en radio y ocho ventanas arqueadas (ahora exhibidas en el Museo de la Opera del Duomo). La construcción de la linterna se inició unos meses antes de su muerte, en 1446. Su construcción se ralentizó durante 25 años sin que su progreso fuera notable, debido a las intervenciones realizadas por varios arquitectos. Finalmente fue completada por su amigo Michelozzo en 1461. El tejado cónico fue rematado por Verrocchio en 1469, con una capa de cobre y una cruz que contenía reliquias. Éste utilizó una grúa especialmente diseñada por Leonardo da Vinci. Esta última estructura supone una altura total de 114,5 m entre la cúpula y la linterna. La cubierta de cobre fue golpeada por un rayo el 17 de julio de 1600 y se cayó. Fue reemplazada por otra, aún más grande, dos años más tarde.

Frescos de la cúpula del Duomo de Florencia

La decoración del tambor de la galería, realizada por Baccio d'Agnolo, nunca fue acabada porque fue desaprobada por Miguel Ángel.

La construcción de la catedral, empezada en 1296 con el diseño de Arnolfo di Cambio, fue acabada, pues, en 1469 por Verrocchio con el ciborio de cobre en la linterna. Pero la fachada principal aún estaba por completarse y seguiría así durante siglos.

Subir y bajar desde la cúpula del Duomo nos ha demorado más de una hora y media, cuando llegamos abajo estamos completamente agotados porque además del esfuerzo físico tienes que estar mirando donde pones el pie para no resbalar o caerte.

Después hacemos la visita al interior de la Catedral , es gratuita, no es necesario pagar nada por acceder, lo que incrementa la cantidad de público que transita por sus naves. La primera impresión que tenemos es que estamos ante un edificio que no corresponde la belleza del exterior con el interior, es una estructura fría y sin mucha decoración.

Nave del Duomo de Florencia

El proyecto para la construcción de la Catedral de Florencia nace de la idea de crear una iglesia que rivalizase con las ciudades toscanas en pleno auge: Pisa y Siena, que fuese más bonita exteriormente con sus mejores mármoles y las figuras y relieves. Como la mayoría de las catedrales góticas de su tiempo, esta, fue dedicada a la veneración de la Santísima Virgen y se la puso el nombre de “Santa María de la Flor ”, un tributo caballeresco al papel que debía de tener la Virgen en el misterioso designo divino.

Su construcción fue ardua y se necesitó 170 años para completar los trabajos. La primera piedra fue colocada el día 8 de septiembre de 1296, según el proyecto del maestro de obras Arnolfo di Cambio, era el arquitecto que estaba trabajando a su vez en la iglesia de la Santa Croce y el Palacio de la Señoría. El proyecto original sufre numerosas modificaciones, esto se puede ver en las fachadas norte y sur donde las ventanas son más estrechas que en la fachada este que corresponde con la ampliación del maestro Francesco Talente realizada en el siglo XIV.

El interior de la catedral, llama la atención, como ya hemos remarcado, por la sobriedad de la decoración y la amplitud de los espacios. Cuando fue terminada se convierte en la catedral más grande de Europa, en el siglo XV: 153 metros de longitud, 90 metros de ancho del crucero y 90 metros de altura hasta la abertura de la linterna. Este aspecto casi desnudo corresponde con los ideales del espíritu medieval que reinaba en Florencia durante el primer periodo del Renacimiento. La parte más rica del interior son sus pisos de mármol de colores y las hornacinas con formas de templetes.

La construcción se levante a expensas de las aportaciones económicas de la municipalidad y las obras de arte de las naves laterales tratan de ensalzar el honor de las hombres ilustres de la ciudad.

Además de la iconografía cívica, existe un programa religioso que se desarrollo en área destinado al culto.

Mosaico Coronación de la Virgen del Duomo de Florencia

Sobre la puerta central podemos ver en el centro el mosaico “Coronación de la Virgen ” fue realizado a principios del siglo XIV; a la derecha, “Los Ángeles Músicos”, obra al fresco de Santi di Tito, datado a finales del siglo XIV; encima del mosaico, la decoración pintada del reloj, situada en el centro, obra del Paolo Ucello, esta datado en 1443; la vidriera de colores “Asunción de la Virgen ”, obra de Lorenzo Ghiberti, está datado en 1405.

Frescos de la Nave del Duomo de Florencia

El sentido de la iconografía en el interior de la catedral esta entrecruzada con significado civiles y religiosos que giran según el sentido renacentista en torno a la idea de la dignidad del ser humano, su grandeza y la elevación concedida por Dios. Una buena parte de esa dignidad histórica es para el hombre ilustre definido como el recto uso de los talentos al servicio de la colectividad, por el contrario esta el sentido de la espiritualidad del hombre destinada a traspasar los límites de la historia humana para reinar con Cristo.

Las vidrieras de la catedral constituyen el más importante programa de arte de la vidriería en Italia de los siglos XIV y XV. Las 44 vidrieras representan a santos del Antiguo y del Nuevo Testamento, escenas de la vida de la Virgen y de Cristo. Entre sus autores se encuentran los nombres más importantes del arte florentino del primer Renacimiento: Paolo Uccello, Andrea del Castagno, Donatello, Ghilberti.

El momento culminante del arte es el recorrido religioso y arquitectónico dentro del área por debajo de la cúpula, delimitada por el coro y altar mayor, se presentan con forma octogonal, es el símbolo de todos los baptisterios, los ocho lados representan a los siete días de la semana y el octavo al día de la creación se considera simbólicamente como la resurrección de Cristo.

Frescos de la cúpula del Duomo de Florencia

La decoración mediante un mosaico fue proyectado por el arquitecto que diseño la cúpula Brunelleschi, tenía que representar la ampliación del infinito. Aunque la decoración con que se concluyó la cúpula fue realizada entre 1572 y 1579 por Giorgio Vasari y Federico Zuccari fue ejecutado en pintura al fresco aunque el temario obedece a representar el Juicio Final. La superficie de 3600 metros cuadrados de pintura al fresco ilustran la fe tradicional del sueño del Paraíso y un Infierno merecidos por el hombre en base a las virtudes o los vacíos cultivados en esta vida que esperan un juicio definitivo una vez terminado el tiempo útil de la historia. En la zona central, sobre el altar mayor, se encuentra el Juez, Cristo Resucitado rodeado de los ángeles con los símbolos de su Pasión. Esta representación, de la mano de Federico Zuccari, estaba ligada a un grupo escultórico ejecutado veinte años antes por Baccio Bandinelli para al altar ubicado debajo: un Cristo muerto de tamaño monumental.

El primer nivel de los frescos de la parte superior, cerca de la linterna, representa a Los 24 Ancianos del Apocalipsis. El segundo nivel se representa los coros angélicos e instrumentos de la pasión. El tercer nivel se pintó a Cristo, la Virgen y los Santos. El cuarto nivel se puede ver las Virtudes, Beatitudes, dones del Espíritu Santo. En el quinto nivel se puede ver una interpretación de los Vicios del hombre y del Infierno. Las vidrieras que rodean al tambor se puede ver: 1. la de Donatello, Coronación de la Virgen ; 2. la de Paolo Uccello, Representación de Cristo; 3. de Andrea de Castagno, Descendimiento de la Cruz ; 4. de Paolo Uccello, Nacimiento de Cristo; 5.de Paolo Uccello, Anunciación (destruida en 1828); 6. Lorenzo Ghiberti, Presentación de Jesús en el Templo; 7. Lorenzo Ghiberti, Oración en el Huerto de los Olivos; 8. Lorenzo Ghiberti, Ascensión de Jesucristo en los cielos.

Pavimento de la cripta del Duomo de Florencia

El ticket que hemos comprado te da acceso al museo de la cripta de la catedral, ha sufrido laboriosas excavaciones entre 1965 y 1974. Las bóvedas subterráneas fueron usadas para sepultar a los obispos florentinos a través de los siglos. La historia arqueológica de esta enorme área ha sido revelada: ruinas de casas romanas, un pavimento del cristianismo temprano, ruinas de la antigua catedral de Santa Reparata y ampliaciones sucesivas de dicha iglesia. Cerca de la entrada abierta al público está la tumba de Brunelleschi como prueba del gran cariño que le profesaron los florentinos.

Santa Reparata se encontraba entre el mayor conjunto paleocristiano de Tuscia, construido con elegantes arcos y columnas de mármol. La planta tenía tres naves, con columnatas que rodeaban la central y una valla de barreras que separa el coro del ábside y el área de culto de la zona pública de la iglesia, con una extensión en el pasillo central para la distribución de la comunión. El origen de su construcción probablemente se debía a un voto hecho gracias a la victoria cristiana en el año 405, de Radagaiso, rey de los godos.

Reconstruida en la época carolingia, debido a los daños sufridos por la guerra gótico-bizantina, Santa Reparata mantiene la configuración anterior con la adición de dos capillas laterales en el ábside, una pequeña cripta y un nuevo piso y podemos imaginar similar a coetánea iglesia abadía de Pomposa en Ferrara.

Resto de Santa Reparata cripta del Duomo de Florencia

Alrededor de los años 1050-1106, se construyó un coro elevado y una nueva cripta, donde el cuerpo de San Cenobio fue transferido de la antigua catedral de San Lorenzo del siglo IX, será custodiado hasta los años cuarenta del siglo XV, en que son transferidos a la nueva catedral. Se hicieron nuevas acciones de mantenimiento posteriores mantuvieron Santa Reparata en pie hasta 1379, cuando finalmente fue demolida para dar paso a la nueva catedral.

La vasta área, abierta al público en 1974, contiene numerosos restos de paredes y pisos de las casas de la época romana florentina. La planta lleva los nombres de 14 de los donantes de origen latino que financiaron la construcción.

El suelo es de admirar, ya que está formado por un hermoso mosaico policromado con decoraciones geométricas, entre que se puede ver la cruz. También vemos un símbolo con un hermoso pavo real que tiene el significado de la inmortalidad, uno de los pocos elementos figurativos restantes.

Se pueden ver numerosas lápidas como la de Niccolò Squarcialupi de 1313, la de Juan Di Alamanno de Medici, que murió en 1352, y tal vez, pero aún no se encuentra entre ellas, la hermosa tumba de Lando di Giano, capellán de Santa Reparata, que murió en 1353, también las tumbas de dos papas: Stefano IX y tal vez Nicolás II, anteriormente obispo de Florencia, en 1058. Durante la campaña de excavación también se encontró la tumba de Filippo Brunelleschi, mientras que no hay rastros de los de Giotto, Arnolfo di Cambio, Andrea Pisano, también, según la tradición, fueron enterrados aquí.

Baptisterio del Duomo de Florencia

Salimos a la calle para visitar el Baptisterio como ya todos sabemos es la parte de la iglesia que se dedica a administrar el bautismo, en el caso de Italia, las grandes basílicas están en un edificio aislado.

Cuando los baptisterios se erigían en edificio separado se elevaban sobre planta circular o poligonal y se coronaban con una cúpula de idéntica planta que se sostenía por arcos apoyados en una columnata concéntrica al muro. Su interior se adornaba con mosaicos y pinturas y en el centro del plano se alzaba la gran pila bautismal de piedra. Casi todos los baptisterios se dedicaron a San Juan Bautista y no se fundaban nada más que en las ciudades que tenían obispo.

En España prácticamente es desconocida esta práctica porque somos mucho más pragmáticos, enseguida los integramos en el interior de nuestras iglesias y catedrales, dejando una pequeña sala para las celebraciones del bautismo siempre con una pila mucho más pequeña.

El baptisterio es la parte de la plaza del Duomo más antiguo y está dedicado a la veneración de San Juan, que según la tradición era un templo pagano transformado en iglesia cristiana. La historia indica que ya en el siglo V debió de surgir el antiguo baptisterio enfrente de la antigua catedral de santa Reparata, que hemos visto en la cripta de la actual catedral.

Altar del Baptisterio del Duomo de Florencia

El baptisterio tiene forma octogonal por su simbología como el lugar donde se imparte el sacramento de iniciación a la fe cristiana gracias al cual los creyentes pasan de la muerte del pecado a la vida nueva de Cristo en el octavo día. Es simplemente la esperanza de un “octavo día” para la resurrección de los muertos, en muchos de ellos estaban construidos en el interior de un cementerio.

En el siglo XI el baptisterio sufre numerosas reformas que afectan a la decoración, revistiendo sus paredes de estupendos mármoles, muchos de los cuales provienen de la rehabilitación de edificios antiguos. Es el resultado del esplendor económico que vive la ciudad al ser considerada como la capital de la Toscana y el traslado del gobierno imperial. En el siglo XII se añade la cúpula monumental y el ábside rectangular, que obliga a Dante a citarlo en la “Divina Comedia “, lo llama “mi bello San Giovanni”. Entre el siglo XII y XIII fueron colocadas las puertas de bronce y los grupos de mármoles y bronces encima de ellas. La más antigua corresponde con la puerta del lado sur: los paneles fueron acabados por Andrea Pisano en 1336, ilustran la Vida del Bautismo, a san Juan y patrono de la ciudad. La puerta norte fue obra del maestro Lorenzo Ghiberti entre 1402 y 1425, con escenas de la Vida de Cristo. Por último, la Puerta del Paraíso (así la llamó Miguel Ángel) se encuentra situada en el lado este, representa escenas del Antiguo Testamento, fueron modeladas y fundidas oir Ghiberti entre 1425 y 1450 (hoy sustituidas por copias que hemos contemplado en el museo del Duomo).

Pila Bautismal del Baptisterio del Duomo de Florencia

Ya hemos dicho que el origen del edificio es de un templo pagano romano y eso se hace más comprensible cuando se accede a su interior. El aspecto de la cúpula nos recuerda el Panteón, está enriquecido con elementos de monumentos antiguos. Las columnas monolíticas, dos sarcófagos esculpidos y una parte del revestimiento de mármol. El piso tiene un gran parecido con el arte islámico y parece representar las alfombras, sobre todo entre la Puerta del Paraíso y el centro del aula son reconocidos motivos zodiacales orientales. En la decoración de las paredes aparecen formas tardoimperiales donde se encuentran otras de lejana ascendencia germánica.

Elevando la vista aparece ante nuestros ojos una suntuosa cúpula decorada con mosaicos que marcan la influencia bizantina en toda la Italia central. El efecto global es de una magnifica conjunción de las grandes culturas de la época medieval.

En el centro de la nave se hallaba la antigua fuente bautismal cercada por una valla octogonal. En el momento del bautismo el creyente miraba hacia el cielo y ante sus ojos aparecía la figura de Cristo que domina los mosaicos del siglo XIII, y bajo sus pies los muertos que resucitaban en el Juicio Universal, cuando Cristo Resucitado llamará a los vivos y a los muertos para juzgar las acciones de cada uno. A la derecha de Cristo se ven las almas de los Justos en el seno de Abraham, Isaac y Jacob, los patriarcas del antiguo Israel; mientras que a la izquierda está el infierno. Entre los cinco gajos en que se divide la cúpula están representadas la vida de san Juan Bautista y la de Cristo, las historias de José y el comienzo de la vida humana representada por: Adán, Eva, Caín, y Abel, Noé y su familia.

Mosaico de Cristo del Baptisterio del Duomo de Florencia

Viendo la grandiosidad y la hermosura de la cúpula nos podemos imaginar lo que debía de pensar y sentir los creyentes al observar a estos personajes, seguramente como integrantes de una parte de la trama de la historia del pueblo de Dios.

La cúpula se dividió en diferentes espacios donde se representa en la parte más importantes: el Juicio Universal, las distintas Jerarquías angélicas, la historia del Génesis, Historias de José hebreo, Historias de María y de Cristo, historias de san Juan Bautista, y en el centro una faja ornamental.

La Tumba de Juan XXIII es el monumento de la tumba de mármol del Antipapa Juan XXIII (1360–1419), creado por Donatello y Michelozzo, el cual queda adyacente a la Catedral de Santa María del Fiore. Fue encomendado por los ejecutores del testamento de Cossa, después de su muerte en el 22 de diciembre de 1419, y fue completado durante los años 1420, estableciéndolo como unos de los tempranos hitos de la Florencia del Renacimiento. De acuerdo con Ferdinand Gregorovius, la tumba es “a su vez el sepulcro del Cisma de Occidente en una iglesia y la última tumba papal que se encuentra afuera de la propia Roma”.

Tumba del antipapa del Baptisterio del Duomo de Florencia

Cossa tenía una larga historia de la cooperación con Florencia, que lo había visto como el pontífice legítimo en una época durante el Cisma de Occidente. El monumento de la tumba se interpreta a menudo como una tentativa de consolidar la legitimidad del pontificado de Cossa ligándolo a un sitio espiritual de gran alcance como era Baptisterio. La evocación del simbolismo papal en la tumba y el acoplamiento entre Cossa y Florencia se han interpretado como un desaire al sucesor de Cossa, el Papa Martín V o al vicario autopromocionado de los Médici, como tal tumba habría sido juzgada como inaceptable para un ciudadano florentino.

El diseño de la tumba-monumento incluyó las tres virtudes teologales, el emblema de armas de la familia Cossa, una efigie de bronce dorada apoyada sobre un sarcófago con un cojinete de inscripción, una "Virgen con Niño" en una media luneta, y un baldaquino. A la hora de su terminación, el monumento era la escultura más alta de Florencia, y una de las escasas tumbas dentro del Baptisterio o del Duomo vecino. El monumento de tumba era el primero de varias colaboraciones entre Donatello y Michelozzo, y la atribución de sus varios elementos a cada uno de ellos ha sido discutida por los historiadores de arte, como también las interpretaciones de su diseño e iconografía.

Decoración interior del Baptisterio del Duomo de Florencia

El último de los edificios que tiene la plaza del Duomo es el campanario de Giotto, su construcción fue iniciada en 1334 pero no pudo ver su terminación que fue seguida por Andrea Pisano y terminado por Francesco Talenti en 1359, creador de las grandes ventanas de los pisos superiores. La torre es extremadamente rica en la decoración escultórica, con 56 relieves en las dos fajas superpuestas y 16 estatuas de tamaño natural en las hornacinas, obras de los maestros florentinos de los siglos XIV y XV: Andrea Pisano, Donatello y Luca della Robbia.

Campanille de Giotto del Duomo de Florencia

En la parte inferior de la fachada que mira al Baptisterio están ilustrados la creación de Adán y Eva, el primer trabajo del hombre y los fundadores bíblicos donde se representas las distintas actividades humanas: pastoreo, música, metalurgia, viticultura; en la faja superior están los siete planetas, empezando por Saturno en ángulo norte. En las otras fachadas se ven en la parte inferior: La astrología, el arte de la construcción, la medicina, el tejido y otras actividades científicas y técnicas; en la parte superior: las Virtudes Teologales y Cardinales al sur, las artes liberales del Trivio (gramática, retórica y dialéctica) y Cuadrivio (aritmética, música, geometría y astrología o astronomía) y los siete sacramentos (norte). Las estatuas dentro de las hornacinas representan a patriarcas, profetas, reyes de Israel y sibilas. En la actualidad los originales se han trasladado al museo del Duomo que hemos tenido oportunidad de ver.

Son las 14,00 horas cuando terminamos de ver la plaza de Duomo, la visita nos ha ocupado toda la mañana, ahora es hora de buscar algo que comer, esto no es muy difícil de Florencia. Cogemos la Vía Ricasoli en dirección norte y enseguida vemos una Pizzería que en estas horas esta ya vacía donde por muy poco dinero quedamos saciados.

David en la Galleria dell'Accademia de Florencia

Después de comer seguimos por la misma calle hasta nuestro siguiente destino, se trata de la Galleria dell'Accademia, es el segundo destino turístico de la ciudad. Teníamos previsto que al llegar hubiera una enorme cola para acceder. Cuando llegamos no hay nadie esperando y vamos directamente a la taquilla, los horarios es de 8,15 a 18,50 horas, el precio es de 6,50 euros para los adultos, la entrada para los niños menores de 18 años es gratuita.

La Galería de la Academia es el segundo monumento de Florencia pero que el 90% de los visitantes no les interesa para nada la sección de pintura y directamente accede al pasillo de Miguel Ángel para abandonar el museo sin visitar alguna otra de sus salas, seguramente son guiados por los tours turísticos que tienen los horarios tasados y concentran las visitas a la parte más famosa de los viajes.

El museo exponen en sus salas tres importantes series de obras de arte: una colección de trescientas tablas de pintura que abarcan un periodo de tres siglos (XIV,XV y XVI), y una colección de iconos adquiridos por los duques de Lorena y una colección de esculturas en yeso de modelos originales de los escultores Lorenzo Bartolini y Luigi Pampaloni.

La historia de la Galería de la Academia comienza en 1784, año en que el gran duque de Toscana Pedro Leopoldo unifica las distintas escuelas artísticas en una única para la enseñanza del arte.

Galería de yesos en la Galleria dell'Accademia de Florencia

La sede se inscribe en los edificios rehabilitados del antiguo Hospital de San Mateo del siglo XIV, y al convento de monjas de San Niccoló di Cafaggio. Las obras de arte estaban mal dispuestas como corresponden a un centro de enseñanza hasta que en 1841 el presidente de la academia, Antonio Ramirez Montalvo dispone las obras de forma cronológica para poder estudiarse de una forma clara.

La unificación de Italia lleva a convertir a la Academia del primer museo de arte moderno del nuevo estado. En 1872 el ayuntamiento decide construir un espacio para acoger la escultura del David de Miguel Ángel, que necesitaba ser protegida de los peligros de estar expuesta al aire libre en la plaza de la Signoria. Se encarga el proyecto al arquitecto Emilio de Fabris para que proyecte una Tribuna al final de la Galería de los Cuadros Antiguos, iluminando desde el techo por medio de un lucernario natural, acogería en su interior al David como la más valiosa de las obras maestras. En los primeros días del mes de agosto de 1873 la figura de David fue subida a un vagón y sobre raíles fue llevada por las calles del centro de Florencia hasta la Academia , y allí se dejo durante nueve años, el tiempo para construir las obras de la Tribuna , siempre protegida en su caja de madera.

El museo con la parte dedicada a Miguel Ángel fue inaugurada el 22 de julio de 1882, donde además se puso el Moisés, el molde en yeso de la Piedad de San Pedro, el molde de la Piedad Rondanini y del Cristo della Minerva.

“El Rapto de las Sabinas”, obra de Juan de Bolonia en la Galleria dell'Accademia de Florencia

La primera de la salas que visitamos se llama “Sala del Coloso” el nombre viene dado porque se encuentra el yeso de Giambologna, y en las paredes cuadros del siglo XV y a la pintura florentina de principios del siglo XVI. Corresponden con los maestros con crearon talleres para poder atender la demanda de las innumerables obras que iban a adornar las iglesias de la ciudad de Florencia.

La primera obra que vemos es el yeso “El Rapto de las Sabinas”, obra de Juan de Bolonia conocido como Giambologna, que forma parte del encargo de los Grandes Duques de la Logia de Lanzi para ser expuesto en la Piazza della Signoria de Florencia.

Detalle “El Rapto de las Sabinas”, obra de Juan de Bolonia

La estatua original tiene una tamaño de 4.10 metros y representa a un joven que se eleva por encima de la cabeza de una niña, mientras están atados entre las piernas de los jóvenes un viejo que desespera.

La estatua fue colocada en la Loggia della Signoria, también conocida como la Loggia dei Lanzi, junto con otras muchas figuras, incluyendo el Perseo con la cabeza de Medusa por Benvenuto Cellini con la intención de que el Gran Duque pensase que vivía en una casa de campo, si trata de crear un museo al aire libre. En esa posición se colocó inicialmente el Giuditta en bronce de Donatello.

El autor de la imponente escultura, entre las obras maestras del manierismo es Giambologna, seudónimo de Jean de Boulogne (Douai 1529-Florencia, 1608) pasó a ser el escultor de cámara oficial de la familia Médicis. Giambologna realizó la obra entre la competencia técnica con los grandes escultores del clasicismo. La obra representa un verdadero viaje técnico consiguiendo que la estatua fuera realizada de un solo bloque de mármol y logrando imponer muy variadas tendencias, grandes masas y huecos, distribuidos irregularmente, pero sobre todo creó la primera estatua con múltiples puntos de vista, invitando al espectador a crear un camino en espiral para observar el trabajo desde una variedad de ángulos.

“Coronación de la Virgen”, obra del Maestro dell' Epifanía Fiesole en la Galleria dell'Accademia de Florencia

El primer cuadro del museo es “Coronación de la Virgen ”, obra del Maestro dell' Epifanía Fiesole, está datado entre los años 1475-1480, realizado en tabla sobre madera.

La tabla corresponde con una parte separada de un díptico cuya atribución es desconocida, tal vez pudiera tratarse de Filippo di Giuliano, aunque se le ha denominado como Maestro de la iglesia de la Epifanía de Fiesole porque en esa iglesia trabajo este pintor.

“La Trinidad con San Cosme y Damian, Francisco de Asís, Sebastián y Julián”, obra de Apollonio di Giovanni en la Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “La Trinidad con San Cosme y Damian, Francisco de Asís, Sebastián y Julián”, obra de Apollonio di Giovanni, realizado en temple sobre madera, datado en 1450; tiene unas medidas de 99 x 166 cm.

El altar fue pintado por Apollonio di Giovanni di Tommaso también conocido como Apolo de Juan, nació en Florencia, en 1417-1465 fue un pintor y miniaturista italiano.

“Resurrección de Cristo”, obra de Raffaellino del Garbo, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Resurrección de Cristo”, obra de Raffaellino del Garbo conocido como Raffaellino Capponi, realizado en temple sobre madera, datado entre 1500-1505; tiene unas medidas de 177 x 187 cm.

La tabla se pinto para la capilla privada de la familia Capponi, eran una familia de nobles florentinos que se halla en la iglesia de San Bartolomeo Monteoliveto. La capilla se la llamo “El Paraíso”, en esos momentos era considerado el pintor Raffaellino con una clara influencia de Filippino Lippi, añadiendo también a Perugino como el maestro colorista.

“Asunción de la Virgen ”, obra de Pietro Perugino, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Asunción de la Virgen ”, obra de Pietro Perugino, realizado en temple sobre madera, datado en 1500; se exponen en la Sala del Coloso.

Este cuadro es parte de un retablo que se pinto para el altar de la iglesia del monasterio benedictino de Vallombrosa, En la escena el pintor demuestra su pincel experto y una gran seguridad, empleando esquemas y dibujos que antes había experimentado en otras composiciones análogas, se detiene con detalles elegantes y ornamentales que se aprecia en el arcángel Miguel en la parte derecha y en las caras de los ángeles que rodean a la Virgen.

“San Vicente Ferrer”, obra de Giovan Francesco da Rimini, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “San Vicente Ferrer”, obra de Giovan Francesco da Rimini, realizado en temple sobre madera, datado en 1460; se exponen en la Sala del Coloso.

Giovan Francesco da Rimini fue un heredero de la cultura pictórica del siglo XIV, esencialmente enraizada en la perpetuación de un sabor relacionado con el lenguaje de Giotto, en las primeras décadas del siglo XV se marcha a vivir una nueva temporada artística, gracias al patrocinio de Segismundo Pandolfo Malatesta –su maestro desde 1431– llega a la ciudad de Venecia donde tiene muchas oportunidades para desarrollar su pintura.

“Asunción de la Virgen con santo y profeta”, obra de Bartolomeo di Giovanni, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Asunción de la Virgen con santo y profeta”, obra de Bartolomeo di Giovanni, realizado en temple sobre madera, datado en 1490; se exponen en la Sala del Coloso.

Bartolomeo di Giovanni, también conocido como Alumno di Domenico por su relación con su maestro Domenico Ghirlandaio, fue uno de los primeros pintores renacentistas italianos de la escuela florentina que estuvo activo desde aproximadamente 1488 hasta su muerte en 1501.

“San Bartolomeo, Juan Bautista, Santiago el Mayor, San Miguel arcángel, Lorenzo y Leonardo”, obra de Benozzo Gozzoli, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “San Bartolomeo, Juan Bautista, Santiago el Mayor, San Miguel arcángel, Lorenzo y Leonardo”, obra de Benozzo Gozzoli, realizado en temple sobre madera, datado en 1460-1462; se exponen en la Sala del Coloso.

Benozzo Gozzoli habría sido discípulo de Fra Angélico y durante su madurez colaboró con el maestro Angélico, en realidad era colaborador en Florencia de la decoración del monasterio y la iglesia de San Marcos.

“Santa Mónica y San Agustín”, obra de Francesco Botticini, Galleria dell'Accademia de Florencia

Los siguientes cuadros forman el díptico “Santa Mónica y San Agustín”, obra de Francesco Botticini, realizado en temple sobre madera, datado en 1460-1462; se exponen en la Sala del Coloso.

Francesco Botticini fue alumno de Cosimo Rosselli y Andrea del Verrocchio. Estableció su propio taller después de un breve periodo como ayudante de Neri di Bicci; el taller tenía fama por sus obras decorativas, y se dice que quedó oscurecido por sus contemporáneos florentinos, como Filippino Lippi y Botticelli, quienes a menudo influyeron en sus obras.

“San Francisco, San Felipe, Santa Catalina de Alejandría, San Jerónimo y San Vescovo”, obra de Neri di Bicci, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “San Francisco, San Felipe, Santa Catalina de Alejandría, San Jerónimo y San Vescovo”, obra de Neri di Bicci, realizado en temple sobre madera, datado en 1450; se exponen en la Sala del Coloso.

El cuadro pertenece a un políptico que fue pintado para la capilla Villani de la iglesia de la Anunciación de Florencia. El pintor no fue un artista muy creativo y se mantuvo fiel a un estilo tradicional, con profusión de oros en los ropajes.

“Madonna y el Niño, Cristo y Piedad”, obra de Andrea di Giusto, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Madonna y el Niño, Cristo y Piedad”, obra de Andrea di Giusto, realizado en temple sobre madera, datado entre 1435-1440; se expone en la Sala del Coloso.

“Madonna de la Cintura y Santos”, obra de Andrea di Giusto, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Madonna de la Cintura y Santos”, obra de Andrea di Giusto, realizado en temple sobre madera, datado en 1437; se expone en la Sala del Coloso.

La obra fue pintada para la iglesia de Santa Margherita de Cortona. Fue pintado por uno de los maestros florentinos de la mitad del siglo XV que fue discípulo de los maestros: Paolo Uccello y Beato Angélico, perteneciente a la tradición gótica, como pone de manifiesto en este retablo con el uso del pan de oro y la tripartición del espacio, que recuerda ciertos políticos del siglo XV. Es una de las obras que ha llegado completa en todas sus partes: el coronamiento superior, los pilares laterales, la predela y las bases de los extremos donde se representan los mecenas arrodillados.

“Anunciación”, obra de Maestro de la Natividad, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Anunciación”, obra de Maestro de la Natividad y Filippino Lippi, realizado en temple sobre madera, datado entre 1475-1480; tiene unas medidas de 184 x 190 cm., se expone en la Sala del Coloso.

La tabla es una copia del cuadro de la Anunciación de Filippino Lippi para el monasterio de Murate. Esta obra fue pintada como un encargo del convento de San Firenze en Florencia. El maestro de la Natividad ha sido identificado con mucha probabilidad como Domenico di Zenobi.

“La Trinidad y san Bendito con Juan Segundo”, obra de Alesso Baldovinetti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “La Trinidad y san Bendito con Juan Segundo”, obra de Alesso Baldovinetti, realizado en temple sobre madera, datado en 1470; tiene unas medidas de 238 x 284 cm., se expone en la Sala del Coloso.

“Santa Bárbara y san Juan Bautista y Mateo”, obra de Cosimo Reselli, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Santa Bárbara y san Juan Bautista y Mateo”, obra de Cosimo Reselli, realizado en temple sobre madera, datado en 1468; tiene unas medidas de 207 x 204 cm., se expone en la Sala del Coloso.

“San Esteban entre san Jacobo y san Pedro”, obra de Cosimo Reselli, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “San Esteban entre san Jacobo y san Pedro”, obra de Cosimo Reselli, realizado en temple sobre madera, datado en 1493; se expone en la Sala del Coloso.

El cuadro tuvo una alteración unos veinte años después en que intervino el pintor Fray Bartolomeo interpreto la figura de san Esteban con los rasgos de san Jerónimo. En el siglo XIX el cuadro sufrió una profunda restauración y se devolvió a su aspecto original. El maestro nos ofrece una composición que destaca por la vivaz narración y una especial decoración de los tres personajes que emergen con fuerza y luz desde el claroscuro del fondo de sus respectivas hornacinas.

“La Asunción de la Virgen y San Bernardo, Jorge, Juan y Catalina de Alejandría”, obra de Francisco Granacci, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “ La Asunción de la Virgen y San Bernardo, Jorge, Juan y Catalina de Alejandría”, obra de Francisco Granacci, realizado en temple sobre madera, datado en 1520; se expone en la Sala del Coloso.

La obra fue pintada para la iglesia de San Giorgio della Costa (Florencia), ofrece un gran parecido con la obra de Perugino para el monasterio de Villambrosa. El pintor desarrolla una notable influencia de Ghirlandio y sobretodo del maestro Miguel Ángel.

“Disputa de los Padres de la iglesia sobre la Inmaculada Concepción”, obra de Giovanni Antonio Sogliani, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Disputa de los Padres de la iglesia sobre la Inmaculada Concepción ”, obra de Giovanni Antonio Sogliani, realizado en temple sobre madera, datado en 1521; tiene unas medidas de 345 x 230. Se expone en la Sala del Coloso.

El cuadro fue pintado para el Monasterio de San Nicolás de Cafaggio donde el tema principal es las diferencias de los Padres de la Iglesia sobre el tema de la Inmaculada Concepción. Podemos ver en el cuadro los distintos personajes que participan: Adán; San Juan Evangelista; San Jerónimo; San Ambrosio; San Agustín; San Gregorio; San Bernardo de Claraval; Virgen; Dios Padre y los ángeles.

“Tondo de la Sagrada Familia con San Juan Bautista”, obra de Franciabigio, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Tondo de la Sagrada Familia con San Juan Bautista”, obra de Franciabigio, realizado en temple sobre madera, datado entre 1500-1510; tiene unas medidas de 97 cm. diámetro. Se expone en la Sala del Coloso.

La obra fue pintada para Monasterio de San Nicolás de Cafaggio, la pintura se ha datado en torno a los últimos años de la primera década de los años 1500, basado en la afinidad estilística con Rafael, Leonardo, Mariotto Albertinelli y en comparaciones con otras obras como la Virgen con el niño de la Galería Nacional de Roma, la Virgen del Pozo de los Uffizi y el Tondo Ranieri.

“La Deposición de Cristo en el sepulcro”, obra de Jacopo di Arcangelo, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “ La Deposición de Cristo en el sepulcro”, obra de Jacopo di Arcangelo, conocido como Jacopo del Sellaio, realizado en temple sobre madera, datado entre 1480-1493; tiene unas medidas de 169 x 173. Se expone en la Sala del Coloso.

La obra fue pintada para la iglesia de Dan Jocopo de Barbetti en Florencia. El pintor nos ofrece una deposición con una especial representación dramática con una clara influencia de los maestros: Botticelli y Ghirlandio.

“La vida de Santa Apolonia”, obra de Francesco Granacci, Galleria dell'Accademia de Florencia

Los siguientes siete cuadros muestran “La vida de Santa Apolonia”, obra de Francesco Granacci, realizados en temple sobre madera, datado en 1530. Se expone en la Sala del Coloso.

Los cuadros formaban parte de un retablo del convento de Santa Apolonia de Florencia que nos muestran distintos episodios de la vida de la santa. De arriba abajo: Bautismo de Santa Apolonia; Disputa de Santa Apolonia; Flagelación; Martirio; Rescate con ángel; Santa Apolonia frente al rey; Martirio de Santa Apolonia.

“La piedad de Cristo con la Virgen ”, obra de un pintor anónimo florentino, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “La piedad de Cristo con la Virgen ”, obra de un pintor anónimo florentino, realizado en temple sobre madera, está datado en 1490; tiene unas medidas de 169 x 173 cm. Se expone en la Sala del Coloso.

La obra fue pintada para el convento de san Girolano alla Costa de Florencia, el pintor es anónimo pero intenta hacer unos de los primeros estudios del cuerpo humano para ofrecer una obra de un especial dramatismo.

“La Adoración del niño”, obra de Pier Francesco Fiorentino, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “ La Adoración del Niño”, obra de Pier Francesco Fiorentino, realizado en temple sobre madera, datado en 1476. Se expone en la Sala del Coloso.

Pier Francesco Fiorentino fue hijo del pintor florentino Bartolomeo di Donato, recibió su primera formación artística en el taller de su padre. A los veinticinco años fue ordenado sacerdote: también se conoce como Pier Francesco Prete. Se formó en el círculo de Benozzo Gozzoli y trabajó con él en San Gimignano y Certaldo durante los años sesenta del siglo XV.

“Ángel anunciando; Padre Eterno; Anunciación de la Virgen”, obra de Biagio d'Antonio, Galleria dell'Accademia

El siguiente cuadro “Ángel anunciando; Padre Eterno; Anunciación de la Virgen ”, obra de Biagio d'Antonio, realizado en temple sobre madera, datado en 1475. Se expone en la Sala del Coloso.

El cuadro pertenece a la parte inferior de un retablo de una iglesia desconocida. El pintor desarrolla la pintura formándose en el ámbito del taller de Verrocchio con una clara influencia de Ghilandio.

“Padre eterno”, obra anónima de un pintor florentino, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Padre Eterno”, obra anónima de un pintor florentino, realizado en temple sobre madera, datado en 1505. Se expone en la Sala del Coloso.

La obra estuvo expuesta en el convento Carmine de Florencia. La pintura está próxima a las formas de Cosimo Rosselli. La luneta probablemente es la parte superior de un retablo dedicado a la figura de Dios Padre.

“Adoración del niño”, obra de Lorenzo de Credi, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Adoración del Niño”, obra de Lorenzo de Credi, realizado en temple sobre madera, datado en 1480-1490. Se expone en la Sala del Coloso.

La obra estuvo expuesta en la Basílica de la Santísima Anunciación de Florencia. Es una de las últimas obras renacentistas de Lorenzo di Credi que adopta las novedades de que llegan de la mano de Leonardo da Vinci pero sin representar una ruptura con el pasado. La pintura tiene un esquema simétrico, la visión es a una escala de plano por plano donde se aprecian la manifestación de los sentimientos en las figuras que son muy distintos a los de Leonardo en las perspectivas.

Él transformo el paisaje y las pequeñas figuras de pastores y ángeles volando en la izquierda, lo que revela una influencia cercana a Piero di Cosimo.

“Anunciación de la Virgen ”, obra de Carlo Portelli, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Anunciación de la Virgen ”, obra de Carlo Portelli, realizado en temple sobre madera, datado a mediados del siglo XVI.

“Madonna con el niño, San Lorenzo y Santa Cecilia”, obra de Carlo Portelli, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Madonna con el Niño, San Lorenzo y Santa Cecilia”, obra de Carlo Portelli, realizado en temple sobre madera, datado a mediados del siglo XVI.

Galería de los Esclavos, Galleria dell'Accademia de Florencia

Pasamos a la Galería de los Esclavos (Prigioni) ocupa el espacio de la antigua Galería de los Cuadros Antiguos, donde se conservaban gran número de tablas y polípticos de los siglos XIII y XIV de autores desconocidos. Con el traslado del David de Miguel Ángel se produce una nueva forma de exponer las esculturas, donde se incorporan los Esclavos (Prigioni) desde la Gruta de Buontalenti en Boboli a la Galería de la Academia , en el 1909, determinó que la sala se destinase a la exposición de las obras de Miguel Ángel. En la actualidad los cuatro Esclavos (Prigioni) a ambos lados de la sala, para ayudar a introducir a los visitantes, en un crescendo de emociones hasta llegar a los pies del David.

Las cuatro esculturas Prigioni estaban destinadas a decorar la base del un complejo mausoleo que tenía que levantarse bajo la cúpula de la Basílica de San Pedro en el Vaticano para alojar los restos del papa Julio II della Rovere. El proyecto paso por grandes inconvenientes, y después de desestimarse en el Vaticano, fue realizado en San Pietro in Vincoli de Roma, donde sigue en la actualidad y se puede ver el célebre Moisés de Miguel Ángel.

Los cuatro esbozos de Esclavos que ya no utilizaron, pasaron después de la muerte de Miguel Ángel al duque Cosme I de los Medici que los colocó en la Gruta Buontalenti en los jardines de Boboli, lugar desde salieron con destino a la Academia.

Los Esclavos forman parte de la nueva técnica que utiliza Miguel Ángel para expresar “non finito” (inacabado): las formas de la obra están sin ejecutar a la perfección, esto consigue transmitir un significado universal a aquella sensación de esfuerzo sobrehumano para liberarse de la materia que a todos nos emociona cuando las contemplamos.

“Joven esclavo”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El primero de los cuatro esclavos “Joven esclavo”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, escultura de mármol, realizada para el papa Julio II en Roma. Se expone en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

La escultura representa a un hombre con las rodillas ligeramente flexionadas, haciendo un gesto de protegerse la cara con el brazo izquierdo, mientras que el brazo derecho se desliza por detrás de la cadera en un gesto de dolor. La figura emerge de un bloque de mármol, y representa distintos grados de acabado en sus diferentes zonas: la cabeza esta apenas esbozada, pudiera ser cualquier persona, mientras que el busto está mejor definido por el lado izquierdo al derecho. La escultura tiene a lo largo de su superficie las distintas marcas que Miguel Ángel dejo en el uso de sus instrumentos durante el proceso de creación.

La figura lucha constantemente dentro de un orden por abandonar la piedra y pasar a convertirse en una obra de arte eterna.

“Esclavo despertando”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El segundo de los cuatro esclavos “Esclavo despertando”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, escultura de mármol, realizada para el papa Julio II en Roma. Se expone en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Esta es una de las obras más sorprendentes porque solamente se puede apreciar como desde uno de sus costados de una roca sin trabajar donde aparece el cuerpo robusto de una figura viril. La cabeza hay que mirarla dos veces para poder adivinarla porque tienen los rasgos esbozados, mientras que la pierna derecha la mantiene doblada hacia la izquierda, se inclina hacia delante con un gesto que repite el del brazo del mismo lado. El resultado es una composición tensa y dinámica, que expresa el esfuerzo del hombre para salir de sus propios límites.

“San Mateo”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

Otra de las esculturas inacabadas “San Mateo”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, realizada en mármol. Se expone en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

El origen de esta escultura seguramente estuvo pensado para formar parte de una serie de doce apóstoles, encargados a Miguel Ángel en 1503 para los pilares de la catedral de Florencia. El escultor realizo únicamente ésta, además dejándola inacabada, razón por lo que quedó olvidada en el interior del patio de la Obrería del Duomo hasta 1831.

Cuando se traslado a la Academia de Bellas Artes fue colocada en un hornacina del patio y posteriormente, en 1909, se coloco cerca de los esclavos por sus similitudes.

“Esclavo barbudo”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El tercero de los cuatro esclavos “Esclavo barbudo”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, escultura de mármol, realizada para el papa Julio II en Roma. Se expone en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Esta escultura corresponde con la más acabada de los cuatro Esclavos tiene la cabeza cubierta por una espesa y rizada barba y los muslos ceñidos por una faja. Miguel Ángel crea un refinadísimo busto modelado bajo el estudio atento y pormenorizado de la anatomía, esculpida en su superficie con una suave sensibilidad por la luz y con una nítida evidencia plástica. La escultura está atravesada por una franja circular debajo de las caderas cuya finalidad se desconoce pero pudiera ser interpretada que es una banda para colocar unas letras.

“Atlas”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El cuarto de los cuatro esclavos “Atlas”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, escultura de mármol, realizada para el papa Julio II en Roma. Se expone en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Es quizás la figura más comprometida, se la llamo Atlas, parece sujetar una piedra en la cabeza, a pesar que la misma piedra sea la misma cabeza, no está separada, no está embutida y no se distingue de ella. Las piernas están separadas y los brazos doblados, intentado levantar el peso cargado sobre sus anchos hombros y dejar ver de su interior la cabeza para descubrir su propia identidad. Atlas, quizás es la figura más expresiva de los cuatro, tiene una enorme energía comprimida y concentrada en el esfuerzo inmaterial de salir del mármol.

“La Piedad de Palestrina”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

Otra de las esculturas inacabadas “La Piedad de Palestrina”, obra de Miguel Ángel Buinarroti, escultura de mármol. Se expone en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Esta escultura no está identificada como auténtica de Miguel Ángel, aunque esta atribuida. Llegó al museo en 1939, como adquisición del Estado italiano, desde una capilla del Palazzo Barberini en Palestrina. Aparece documentada como un esbozo de Buonarroti en una publicación histórica de 1736. La ausencia de documentación ha probado un amplio debate sobre su autoría. Se ha considerado que tiene una presencia desproporcionada, de una suavidad inusual en el modelado y un cierto aplastamiento del relieve, por lo que puede atribuirse a un seguidor del maestro.

A lo largo de las paredes de la Galería de los Esclavos (Prigioni) se han colgado una importante selección de obras pictóricas que acompañan y hacen fuerza sobre las piedras de mármol del maestro Miguel Ángel.

“Venus y cupido”, obra de Juan Pontormo, Galleria dell'Accademia de Florencia

El primer cuadro que vemos es “Venus y Cupido”, obra de Juan Pontormo, esta datada en 1533, realizada en temple sobre tabla. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Es una preciosa pintura de Jacopo Carucci, conocido como Pontormo, realizado sobre un boceto del propio Miguel Ángel, como demuestran las formas escultóricas que representan a Venus y al pequeño Cupido. El cuadro fue mutilado y se tapo el cuerpo desnudo, según aparece en una copia que se encuentra en el Palazzo Colona de Roma. En 1852, el restaurador Ulisse Forni restaura el original volviendo a sacar a la luz el desnudo de Pontorno.

“Cabeza ideal”, obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro que vemos es “Cabeza ideal”, obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, esta datada entre 1560-1570, realizada en temple sobre tabla; tiene unas medidas de 75,5 x 57 cm. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

El vestido usado por esta señora indica que la obra esta data entre los años sesenta o setenta del siglo XVI. La pintura fue recientemente restaurada y confirmó la atribución a Michele di Ridolfo por las que parece ser una versión elegante del tipo de mujer de origen divino que tanto busco Miguel Ángel.

“Zenobia”, obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro es “Cabeza ideal (conocida como Zenobia)”, obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, esta datada entre 1560-1570, realizada en temple sobre tabla; tiene unas medidas de 75,5 x 57 cm. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Esta obra junto con la anterior oval procede del convento florentino delle Stabilite, a pesar del tema tratado se puede suponer que fue un encargo por parte de un particular y estuvo oculto en el convento.

La Zenobia fue pintada sobre un fondo verde con un complejo peinado, lleva un traje rosa y un velo transparente que deja al descubierto sus pechos; la mirada parece seguir al espectador de forma maliciosa de una cortesana y recuerda mucho a un célebre dibujo de Miguel Ángel.

“Cristo de la piedad” obra de Andrea del Sarto, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro es “Cristo de la piedad” obra de Andrea del Sarto, esta datada en 1525, realizada en temple sobre tabla. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

La pintura al fresco fue separada en 1810 de la escalera que comunica el noviciado del convento Annunziata en Florencia. El cuadro está muy dañado, quizás durante la separación de la pared, se va a Cristo sufriendo, tiene las manos heridas y apoyadas sobre el asiento de piedra en un gesto de cansancio, expresa una gran intensidad en el drama de la muerte y del dolor.

“Traslado del cuerpo de san Cenobio” obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro es “Traslado del cuerpo de san Cenobio” obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, esta datada en 1516, realizada en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 203 x 175 cm. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

El cuadro fue un encargo de la compañía de san Cenobio. Las reliquias de San Cenobio están en el Duomo de Florencia, probablemente desde el siglo IX, cuando fueron trasladados desde la iglesia de San Lorenzo, donde fue enterrado el santo. La tradición cuenta que durante el paso de sus restos mortales, un olmo que se encontraba en las proximidades del Baptisterio, que entra en contacto con el coche fúnebre, y floreció de repente.

“San Cenobio resucita a un niño” obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro que vemos es “San Cenobio resucita a un niño” obra de Michale di Rodolfo del Ghirlandaio, esta datada en 1516, realizada en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 203 x 175 cm. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Esta obra estaba expuesta junto con la anterior pintura “Traslado del cuerpo de san Cenobio” y formaba parte de la decoración del altar de la compañía de San Cenobio.

“El profeta Job” obra de Fray Bartolomeo, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro que vemos es “El profeta Job” obra de Fray Bartolomeo, esta datada entre 1514-1516, realizada en óleo sobre tabla tiene unas medidas de 188 x 108 cm. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

La tabla estuvo colgada en la basílica de Santa Anunziata de Florencia, en cuyo centro el Salvador Mundi con los cuatro Evangelistas, El Cardenal Carlo de Medici adquirió las tres tablas y las colocó en la plaza de San Marcos.

“El profeta Isaías” obra de Fray Bartolomeo, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro que vemos es “El profeta Isaías” obra de Fray Bartolomeo, esta datada entre 1514-1516, realizada en óleo sobre tabla; tiene unas medidas de 188 x 108 cm. Se exponen en la Galería de los Esclavos (Prigioni).

Fray Bartolomeo pinta a los profetas que por aquel tiempo son profesionales,estos cobran por difundir la palabra de Dios, sobre el pedestal se graba el nombre de Isaías, en su cartela lleva las palabras: Ecce deus Salvat meus (él es mi dios y mi salvador).

La sala alargada de la Galería de los Esclavos (Prigioni) desemboca en la Tribuna de David, fue proyectada por el arquitecto Emilio De Fabris entre 1872 y 1882, formando una cruz latina en cuya cabecera se colocaría la escultura del David de Miguel Ángel, debajo de un enorme lucernario circular.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

Pasamos a ver una de las esculturas más famosas del mundo “David”, de Miguel Ángel Buinarroti, escultura de mármol blanco, datada entre 1501 y 1504; tiene unas medidas de 5,14 metros con un peso de 5572 kg. Se expone en la Tribuna de David.

Miguel Ángel Buonarroti fue un importante artista del Renacimiento italiano. Nació el 6 de marzo de 1475. Su padre fue Ludovico Buonarroti (1444-1534) y su madre Francesca di Neri di Miniato del Sera (1455-1481). En su vida se produce un profundo trauma porque fallece su madre cuando Miguel Ángel tenía solo seis años. Ludovico Buonarroti fue podestà (cargo civil más alto en el gobierno de la ciudad) de Chiui y de Caprese en Casentino, fue en este periodo cuando nació Miguel Ángel. Tras acabar este trabajo Ludovico se trasladó a Florencia.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

Cuando Miguel Ángel fue mayor, Ludovico le envió a la escuela de Francesco Urbino donde este estudió letras, en especial gramática, sin embargo Miguel Ángel decidió abandonar estos estudios y comenzar a dedicarse a la pintura entrando a formar parte del taller de los Ghirlandaio.

La historia de David comienza en el año 1501, cuando los responsables de la Opera del Duomo (institución laica encargada de la conservación y el mantenimiento de los bienes pertenecientes a lugares sagrados, como las iglesias), oficina de trabajos de la catedral de Florencia, y varios miembros del influyente gremio de Mercaderes de la lana, plantearon la construcción de doce grandes esculturas de personajes del Antiguo Testamento que se colocarían sobre los contrafuertes externos al ábside de Santa María del Fiore. Antes del David, sólo dos de estas esculturas habían sido construidas, una de ellas por Donatello y la otra por su discípulo Agostino di Duccio. Este último recibió en 1464 otro encargo, esta vez para crear una escultura de David.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El bloque de mármol a partir del cual se creó el David había sido extraído de la cantera de Fantiscritti, en Carrara, fue extraído 100 años antes, ya que la catedral de Florencia le había encargado una monumental escultura a Agostino di Duccio en el año 1464. La piedra había sido transportada a Florencia en barco por el mar Mediterráneo y remontando el río Arno hasta la ciudad. El bloque, de 18 pies de altura y denominado «el gigante», había sido dañado por un artista llamado Simone da Fiesole, que lo había estropeado tratando de esculpir una escultura en él. El bloque fue apartado por los encargados de Santa María del Fiore y abandonado durante años. Tanto Agostino di Duccio como Antonio Rossellino esculpieron el bloque sin éxito, abandonándolo con varias fracturas y partes a medio trabajar. Las autoridades de la Opera del Duomo comenzaron la búsqueda de un escultor que lograra terminar el trabajo. Varios artistas fueron consultados sobre las posibilidades de esculpir el David, entre ellos Miguel Ángel.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

Después de la expulsión de los Médici de Florencia en 1494, Miguel Ángel se había visto obligado a volver a la casa de su padre, viajando a otras ciudades italianas. En Bolonia realizó tres esculturas para el arca de San Doménico, San Petronio, Ángel Arrodillado y San Procolo. En Roma, el papa Julio II le había encargado la Piedad para el Vaticano. Miguel Ángel no había realizado todavía ninguna obra importante en su ciudad natal, por lo que tomó una postura agresiva para que le encargasen a él la escultura del David, lo que generó tensiones con el resto de los escultores florentinos. El 16 de agosto de 1501, la Opera del Duomo de Florencia encargó oficialmente la escultura del David a Miguel Ángel, veinticinco años después de que Rossellino abandonase el trabajo sobre el bloque de mármol. El artista comenzó a trabajar en la escultura el 13 de septiembre, un mes después de recibir el encargo, y trabajaría en ella durante dos años.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

Tras ver la obra ya terminada, el confaloniero de justicia Piero Soderini decidió finalmente ubicarla en la Piazza della Signoria, atribuyéndole a la obra un valor más civil que el religioso original. Miguel Ángel se impuso a una comisión de artistas célebres florentinos, entre los que se encontraban Andrea della Robbia, Piero di Cosimo, Pietro Perugino, Leonardo da Vinci, Sandro Botticelli y Cosimo Rosselli, que pretendían colocar la estatua en la Loggia dei Lanzi. Miguel Ángel impuso su criterio de colocarla frente al Palazzo Vecchio, aunque esta decisión dejó al David desprotegido frente a las inclemencias del tiempo. La escultura fue trasladada desde la Opera del Duomo a la Piazza della Signoria la noche del 18 de mayo de 1504, y fue alzada y colocada en su emplazamiento definitivo el 8 de junio del mismo año. Finalmente, el David fue descubierto a la ciudad de Florencia el 8 de septiembre de 1504.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El trabajo de preparación de la escultura definitiva incluyó bocetos, dibujos y modelos a pequeña escala de cera o terracota. Miguel Ángel pasó directamente de estos estudios preliminares al trabajo sobre el mármol, sin hacer un modelo de yeso a escala real, como hacían otros artistas de la época como Giambologna. El David fue esculpido mediante cincel desde distintos puntos de vista, puesto que Miguel Ángel lo diseñó para que fuese admirado desde cualquier punto de su perímetro, de forma diametralmente opuesta a la manera medieval que diseñaba las esculturas para ser vistas exclusivamente desde el frente.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

La técnica utilizada para la representación de este David es totalmente innovadora ya que Miguel Ángel se centra en el interior del cuerpo humano y no en el exterior. Esto lo consigue realizando un estudio minucioso de la anatomía humana, consiguiendo así una clara diferenciación entre venas, músculos, huesos y carne, es por ello que pese a la inmovilidad de la obra se observa en él la mano derecha toda la tensión gracias a las venas y a los músculos marcados. También se observa la tensión del momento en la expresión facial, se ve claramente gracias al tratamiento dado por Miguel Ángel de los músculos faciales, como se contraen los músculos de la frente y de la nariz, así como los labios para expresar ese sentimiento.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El David contrasta con las representaciones previas de Donatello y Verrocchio en las que David aparece con el cuerpo de Goliat asesinado. En la versión de Miguel Ángel, Goliat no aparece, por lo que se interpreta que aún no ha sido vencido. En esta ocasión el cuerpo de David se representa como el de un hombre musculoso, no el del muchacho de las obras de Donatello y Verrocchio. En lugar de aparecer victorioso como en las dos versiones antes mencionadas, David aparece en tensión y preparado para el combate. Su cuerpo se encuentra girado con un ligero contrapposto –es un término italiano que designa la oposición armónica de las distintas partes del cuerpo de la figura humana, lo que proporciona cierto movimiento y contribuye a romper la ley de la frontalidad–, en este caso, la pierna izquierda se adelanta a la derecha, el brazo izquierdo se eleva y se curva hasta que la mano casi toca el hombro, mientras que el brazo derecho se deja caer hasta que la mano toca el muslo, el torso se curva sutilmente, la cabeza mira hacia su izquierda, manteniendo los ojos fijos en su objetivo, con el ceño fruncido. El rostro evidencia esta tensión contenida, gran concentración y las aletas de la nariz bastante abiertas. El movimiento es contenido, centrípeto con líneas de fuerza que vuelven al bloque. La mirada ha sido interpretada en el sentido de que la escultura muestra el momento en el que David ha tomado la decisión de atacar pero aún no ha comenzado el combate.

El escultor creía que en cada bloque de mármol en el que trabajaba existía un alma, una obra latente que él trataba de recuperar. En el caso del David, las múltiples fracturas y fallas que tenía el bloque fueron encaminando a Miguel Ángel para encaminar la forma final de la escultura. El gran hueco que tenía el bloque en su flanco izquierdo origina que la escultura se apoye completamente en el pie derecho, generando un contrapposto en la figura y haciendo que la parte izquierda de la figura se balancee hacia la parte derecha del cuerpo. La cabeza de David se gira hacia su izquierda, mientras que sus hombros se escoran hacia la derecha, en sentido opuesto a sus caderas. En el Alto Renacimiento, el contrapposto era considerado un símbolo de la escultura antigua, muy apreciada en la época. El David llegó a convertirse en el paradigma de la escultura renacentista gracias a su inteligente uso del contrapposto.

“David”, de Miguel Ángel Buinarroti, Galleria dell'Accademia de Florencia

Las proporciones del David no corresponden exactamente a las de la figura humana: su cabeza, manos y torso son más grandes de lo estipulado según las proporciones clásicas. Algunos críticos han visto en esta aparente desproporción una muestra de manierismo por remarcar los elementos fundamentales de la composición, aunque otra explicación se debería a la ubicación original de la estatua: sobre uno de los contrafuertes de la catedral de Florencia, por lo que las proporciones de la escultura deberían aparecer de forma correcta a cierta distancia.

Existe una incoherencia: el David aparentemente no está circuncidado a pesar de ser judío, lo que contradiría la ley judaica. Esta aparente incoherencia ha sido justificada por algunos críticos e historiadores por la visión que tenía el arte renacentista del ser humano, menos ligado a la religión y más a los valores de la belleza.

El David ha sufrido numerosos percances a lo largo de su historia, tanto en su emplazamiento original en la Piazza della Signoria como en el interior de la Galería de la Academia, a partir de 1873.

Los problemas del David comienzan con las crisis políticas en Florencia, en 1504, mientras se producía el traslado a la Piazza della Signoria, fue apedreado por jóvenes partidarios de los Medici. En 1512, un rayo cayó sobre la base de la escultura. En 1527, durante una revuelta popular contra los Medici, le fue amputado el brazo izquierdo, tras caerle un banco lanzado desde una ventana. El brazo fue repuesto dieciséis años después. En el año 1843 se llevó a cabo la primera gran restauración del David de Miguel Ángel, fue realizada por un restaurador florentino. Para esta restauración se usó una disolución al 50% de ácido clorhídrico lo que provocó la destrucción del barniz a base de cera que cubría a la obra, además provocó la desaparición de sus colores dejando el mármol expuesto a las inclemencias meteorológicas. Finalmente, en 1873, el David fue trasladado de su lugar en la Piazza della Signoria a la Galería de la Academia , para evitar que fuera dañado. En 1910, se colocó una réplica de la escultura a escala 1:1 en el lugar que ocupaba previamente en la Piazza della Signoria, que se mantiene en la actualidad.

Galería de los esclavos y Tribuna de David, Florencia

El último atentado fue 1991, cuando un hombre llamado Piero Cannata destruyó un dedo del pie izquierdo del David tras golpearlo con un martillo. El dedo fue reconstruido posteriormente, y para evitar futuros daños a la escultura, se colocó una estructura acristalada blindada rodeando por todos sus flancos la base del David. Las investigaciones hechas a partir de los fragmentos de mármol recuperadas tras el ataque de Cannata permitieron conocer que el tipo de mármol con el que estaba construido el David contenía ya unas pequeñas incisiones microscópicas que producían una degradación mayor que la de otros tipos de mármol.

La última restauración de la escultura se realizó en el año 2003, la anterior intervención había sido en 1843, en medio de una fuerte polémica sobre el método a utilizar y la profundidad de la restauración. La responsable de las labores de restauración, Agnese Parronchi, se vio obligada a dimitir por sus discrepancias con el superintendente de Bienes Artísticos de la región de Toscana, Antonio Paolucci. Parronchi era partidaria de llevar a cabo una intervención seca y no invasiva, mediante pinceles, bastoncillos y gomas de borrar. Paolucci y la directora de la Galería de la Academia , Franca Falleti, eran partidarios de una intervención húmeda, mediante compresas de agua destilada aplicadas sobre el mármol durante quince o veinte minutos. James Beck, director de ArtWatch International, inició una campaña solicitando la cancelación de los trabajos de restauración. Finalmente, la restauración se llevó a cabo siguiendo el método húmedo al que se considero menos invasivo, y se terminó el 22 de abril de 2004 bajo la dirección de Cinzia Parnigoni. El David fue restaurado a la vista de los visitantes de la Galería de la Academia , aunque se mostró de nuevo al público definitivamente el 24 de mayo de 2004.

Si el paso de Miguel Ángel por el campo de la arquitectura y de la pintura es decisivo para el destino de ambas artes, en el de la escultura lo es aún más. No sólo todos los escultores del siglo resultan a su lado verdaderos aprendices, sino que en su estilo se encuentra ya todo el manierismo posterior a él, y el germen, del siguiente estilo barroco.

En los corredores laterales de la Tribuna de David se colocaron una serie de pinturas de artistas contemporáneos de Miguel Ángel que sirvieran de acompañamiento del David, entre ellas importantísimas obras de Alessandro Allori.

“Deposición de Cristo en la Cruz”, obra de Santi di Tito, Galleria dell'Accademia de Florencia

Entre otros cuadros podemos ver “Deposición de Cristo en la Cruz ”, obra de Santi di Tito, esta datada en 1585, realizada en temple sobre madera; tiene unas medidas de 177 x 176 cm. Se expone en la Tribuna de David.

Santi di Tito nació en el pueblo toscano de Borgo Sansepolcro, se formó como artista en Florencia en el taller de Sebastiano da Montecarlo y estuvo también en contacto con Agnolo Bronzino así como con Baccio Bandinelli.

“Deposición de Cristo en la Cruz ”, obra de Stefano Pieri, Galleria dell'Accademia de Florencia

Entre otros cuadros podemos ver “Deposición de Cristo en la Cruz ”, obra de Stefano Pieri, esta datada en 1587, realizada en temple sobre madera; tiene unas medidas de 171 x 127 cm. Se expone en la Tribuna de David.

“Coronación de la Virgen”, obra de Alessandro Allori, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro es la “Coronación de la Virgen ”, obra de Alessandro Allori apodado Bronzino, esta datada en 1595, realizada en óleo sobre madera; tiene unas medidas de 415 x 285 cm. Se expone en la Tribuna de David.

Al fondo de amplio pasillo de la Tribuna de David se encuentra la llamada “Sala del siglo XIX” donde se encuentra la colección de esculturas en yeso de Lorenzo Bartolini. Sobre la sala se agolpan en estantes un gran número de bustos de personas en su mayoría no identificados.

“Venus yaciente, de Tiziano”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, Galleria dell'Accademia de Florencia

Empezamos la visita con “Venus yaciente, de Tiziano”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, realizada en yeso, está datada entre 1821 y 1822; tiene unas medidas de 69 x 173.5 cm. Se exponen en la sala del siglo XIX.

Es una representación de la famosa obra del pintor Tiziano de la Venus Yaciente , se encontraba expuesta Monasterio di S. Niccolò di Cafaggio.

“Las bailarinas”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente escultura “Las bailarinas”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, realizada en yeso, está datada entre 1821. Se exponen en la sala del siglo XIX.

La imagen es de dos chicas Emma y Julia Camphell vestidas con antiguos y ceñidos trajes de baile doblando la pierna derecha en un paso de baile. El modelo es clavado en la transposición a la figura de mármol.

“Juno”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente escultura “Juno”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, realizada en yeso, está datada entre 1823-1832; tiene unas medidas de 110,5 x 182 cm. Se exponen en la sala del siglo XIX.

“La caridad”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente escultura “La caridad”, fue realizada por Lorenzo Bartolini, realizada en yeso, está datada entre 1828. Se exponen en la sala del siglo XIX.

El monumento La Caridad , donde se inmortaliza al Conde Nikolaj Demidoff, Piazza Demidoff, Florencia, fue encargado por sus hijos Pablo y Anatolio al fallecer su padre. El original fue terminado por Romanelli, discípulo de Bartonini.

Es una compleja obra de arte, formada por varias esculturas, alguna de ellas superiores al tamaño natural y de una explicación alegórica.

Pasamos a la Sala del siglo III y principios del siglo XIV, es el lugar donde se inicia la importante colección de pintura gótica florentina y que se halla en tres pequeñas salas que reúne numerosas tablas donde el denominador común son los fondos en oro.

La sala central se exponen las obras de pintores anteriores a Giotto; en la sala de la derecha los seguidores directos de Giotto, además de un fresco del mismo Giotto; en la sala de la izquierda están los pintores: Orcagna, Giovanni da Milano y Giottino.

“Madonna con el niño”, fue realizada por un pintor florentino anónimo, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Madonna con el niño”, fue realizada por un pintor florentino anónimo, realizada en temple y oro sobre madera, está datada en el siglo XIII. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Es una pintura primitiva que nos muestra el incipiente arte de la pintura heredera de la tradición bizantina. En la tabla podemos una Virgen con una corona de oro sobre la cabeza un tanto tosca, es una virgen desproporcionada con unas manos largas, el niño sobre sus brazos tampoco guarda ninguna proporción, destaca el tamaño de la mano derecha bendiciendo sobre la mano izquierda. En la esquina superior dos ángeles acompañan la escena.

“Magdalena penitente y ocho historias de su vida”, obra del denominado Maestro de la Magdalena, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Magdalena penitente y ocho historias de su vida”, obra del denominado Maestro de la Magdalena , realizada en temple y oro sobre madera, está datada en el siglo XIII. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La tabla procede de la basílica de la SS. Anunziata (Florencia) que ilustra lo que significó la pintura florentina anterior a Giotto. Este maestro anónimo fundo uno de los primeros talleres productivos en la ciudad de Florencia y se le llamo Maestro de la Magdalena , siguiendo las novedades introducidas por Cimabue. Destacando que la hierática figura central, atraen las escenas laterales que narran con inmediatez y vivacidad las vicisitudes en la vida de santa Magdalena.

“El árbol de la vida”, obra de Pacino di Bonaguida, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “El árbol de la vida”, obra de Pacino di Bonaguida, realizada en temple y oro sobre madera, está datada entre 1310-1315. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Detalle “El árbol de la vida”, obra de Pacino di Bonaguida

La obra, una gran tabla de cúspide, fue encargada por las clarisas del convento de Monticelli en Florencia y fue trasladado a la nueva sede en Via de Malcontenti al transferir el convento en 1531. Con la supresión de las ordenes en 1808, el retablo termino en este museo.

La mano de las clarisas se demuestra por la presencia de Santa Clara de Asís, bajo el árbol de Navidad, y otra hermana, tal vez su hermana Agnes de Clara y la abadesa del convento de Monticelli, en una de la ronda cristológica.

El tema de la tabla es típicamente franciscana y está inspirado en el libro de meditaciones del Lignum Vitae de Buenaventura, donde el antiguo tema de “árbol de la vida se fusionó con la historia de la cruz de Cristo”. En efecto, el texto se divide en doce ramas o frutos y cuarenta y ocho capítulos o meditaciones, fielmente reproducidas en la pintura.

En el centro está el Cristo crucificado, en una posición realista contemplada unos pocos años antes por Giotto en el Crucifijo de Santa Maria Novella, pero con una dulzura derivada del ejemplo del Crucifijo de San Felice, unos pocos con alusiones expresionistas de la sangre que corre por el tronco del árbol. Dentro de cada rama lateral hay seis ramas, que se leen de izquierda a derecha y de abajo a arriba, alternativamente con anotaciones vegetales rojas y verdes de la que cuelgan a su vez cuatro medallones (frutos) con historias cristológicas, que simbolizan las virtudes de Jesús, que figuran en los rollos que se ejecutan a lo largo de las ramas. La excepción es la última rama en la parte superior derecha, como el capítulo cuarenta y ocho está representado en la cumbre de un paraíso.

A continuación se le cuentan las historias de Génesis estrechamente relacionados con el tema del árbol prohibido, que más tarde se convirtió en el árbol de la vida y la madera de la Cruz. Son los siguientes: creado por el hombre; la creación de la mujer; Dios muestra a nuestros primeros padres del árbol prohibido; La tentación de Adán; el pecado original; Reproche de Dios; Fuente de los cuatro ríos del paraíso; Expulsión del paraíso.

Estas escenas, ricas en connotaciones naturales que parecen anunciar el gusto gótico tardío, se dividen en cuatro patas, con un montículo central del calvario en el centro, dentro de un nicho oscuro, con vistas a un franciscano con un libro abierto, probablemente San Buenaventura Bagnoregio con Lignum Vitae. Sobre la escena del Génesis son cuatro de los santos y de los profetas con los desfiles: Moisés, Francisco de Asís, Santa Clara y San Juan Evangelista, con inscripciones tomadas, respectivamente, desde el Génesis, a partir de las cartas a los Gálatas, el Cantar de los Cantares y la Revelación.

“San Nicolás de Bari, san Juan Evangelista y san Procolo”, obra del denominado Pacino di Bonaguida, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “San Nicolás de Bari, san Juan Evangelista y san Procolo”, obra del denominado Pacino di Bonaguida, realizada en temple y oro sobre madera, está datada entre 1305-1310. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Pacino di Bonaguida es un joven artista, que se define como publicus Artifex en pictorum arte, comienza su colaboración con el pintor Tambo Serraglio, de quien tal vez en su taller empezó su aprendizaje.

“Madonna con el niño”, obra de Pacino di Bonaguida, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Madonna con el niño”, obra de Pacino di Bonaguida, realizada en temple y oro sobre madera, está datada entre 1305-1310. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

A pesar de las diferencias técnicas, el destino y el tamaño, la conexión entre miniaturas y pinturas era evidente para la mayoría de la gente, al menos respecto de las obras de alto compromiso, que Pacino fue señalado como el miniaturista florentino más representativo del segundo cuarto del siglo XIV.

“Crucifixión santa”, obra de Pacino di Bonaguida, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Crucifixión santa”, obra de Pacino di Bonaguida, realizada en temple y oro sobre madera, está datada entre 1305-1310. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La obra estuvo expuesta en la iglesia de Fiorence de Florencia, en el retablo muestra en el centro a Cristo Crucificado como dramáticamente explota un chorro de sangre de su abdomen, a los lados están: San Nicolás, Bartolomeo, Fiorenzo y Lucas evangelista.

“Madonna el trono con el niño”, obra del denominado Maestro de Santa Cecilia, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Madonna en el trono con el niño”, obra del denominado Maestro de Santa Cecilia, realizada en temple y oro sobre madera, está datada entre 1320-1325. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La tabla es de una enorme relevancia para la pintura florentina es atribuida al Maestro de Santa Cecilia, que fue un colaborador de Giotto, cuya huella se reconoce en algunos puntos de los frescos que retratan las historias de San Francisco en la Basílica superiora de Asís.

“Cristo Crucificado”, obra de un pintor anónimo florentino, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Cristo Crucificado”, obra de un pintor anónimo florentino, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en el siglo XIV. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La figura de Cristo Crucificado parte de la escuela toscana y su uso fue extendiéndose en Florencia, normalmente era historiados, en este caso en la parte inferior aparece la figura de María Magdalena besando el pie derecho y viendo como se derrama la sangre.

“Madona de la leche con el niño”, obra de Grifo di Tancredi, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Madona de la leche con el niño”, obra de Grifo di Tancredi, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1300. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La obra fue pintada para la iglesia de San Gaggio de Florencia: esta tabla es una representación de la primera escuela florentina del siglo XIII y XIV, el pintor tiene influencias o está formado en el ámbito del Maestro de la Magdalena y se nota la próxima de Giotto en el ambiente de los pintores florentinos. En la obra aparece la virgen acompañada de los santos: Pablo, san Juan Bautista, Pedro y Juan Evangelista.

“Juan y la historia de su vida, Santiago y la historia de su vida”, obra del denominado Maestro de la Magdalena, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Juan y la historia de su vida, Santiago y la historia de su vida”, obra del denominado Maestro de la Magdalena , realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1290-1295. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El díptico estuvo colgado en el convento de san Miguel en San Salvi de Florencia, estas dos tablas probablemente fue desmembrado de un imaginario retablo, en el centro iría la Madona y el Niño que primeramente estuvo colgado en el convento de San Juan Evangelista de Florencia.

El Maestro de la Magdalena es uno de los pintores florentinos más famosos de los talleres de Florencia a finales del siglo XIII que interpreta la pintura figurativa local.

“San Bartolomeo en el Trono con ángeles”, obra de Jacopo del Casentino, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “San Bartolomeo en el Trono con ángeles”, obra de Jacopo del Casentino, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1340-1345. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El cuadro seguramente fue encargado por la compañía del aceite y de los queseros para venerar al patrón San Bartolomé. La tabla probablemente estuvo expuesta en una capilla de la iglesia de Orsanmichele de Florencia.

“San Juan Bautista; San Juan Evangelista; San Virgilio”, obra de Jacopo del Casentino, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “San Juan Bautista; San Juan Evangelista; San Virgilio”, obra de Jacopo del Casentino, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1330-1335. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La tabla estuvo expuesta en el convento de la Santísima Anunciación de Florencia. El retablo nos presenta unas figuras un tanto primitivas, están coronadas por unas pinturas pequeñas que representan a los profetas.

“San Bartolomeo; San Lorenzo”, obra de Bernardo Daddi, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “San Bartolomeo; San Lorenzo”, obra de Bernardo Daddi, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1340. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Estas dos tablas formaron parte de un políptico realizado para la capilla de los Santos Bartolomé y Lorenzo en la iglesia del Carmine de Florencia; el políptico tenía en el centro la figura de la Virgen y el Niño y, en los lados, otras dos tablas desconocidos, probablemente tenía una predela. Estas dos pinturas son de una calidad excepcional y representan la perfección de la producción del taller de Daddi.

“Historias de la vida de Cristo; Historias de la vida de san Francisco de Asís”, obra de Taddeo Daddi, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Historias de la vida de Cristo; Historias de la vida de san Francisco de Asís”, obra de Taddeo Daddi, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1340. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Corresponden a una serie de pequeños paneles y un luneto partido procedente de la sacristía de la basílica de la Santa Cruz , que debería de adornar un armario para guardar reliquias. En cada uno de los paneles se habla de la vida de San Francisco, entre los que podemos ver: la Imposición de los estigmas al santo está relacionado con la Crucifixión. El pintor fue uno de los más directos discípulos de Giotto, y uno de los primeros en incorporar las técnicas de este, que se parecían en la volumetría de los cuerpos y las nuevas perspectivas bien construidas en las formas arquitectónicas que supone un avance de la pintura bizantina.

“Coronación de la Virgen y santo; en la cúspide Cristo Bendiciendo”, obra de Bernardo Daddi Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Coronación de la Virgen y santo; en la cúspide Cristo Bendiciendo”, obra de Bernardo Daddi, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1343-1345. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Bernardo Daddi se convirtió en el pintor más destacado de Florencia de su generación. Su última obra data del año 1347, y se cree que murió al año siguiente. La tabla estuvo expuesta en la iglesia de santa María de Novella de Florencia.

“Crucifijo historiado”, obra de Bernardo Daddi,, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Crucifijo historiado”, obra de Bernardo Daddi, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1340-1345. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El gran Crucifijo perfilado, procede la iglesia florentina de san Donato in Polvorosa, donde presumiblemente estuvo colocado sobre el altar mayor y colgado de su techo. Este tipo de imagen se colocaba en la parte superior del iconostasio, sobre la pared que separa el presbiterio del coro. La figura de Cristo va acompañada de otras dos figuras más pequeñas: la Virgen y san Juan dolientes; en las cuatro esquinas aparecen historias de la Pasión de Cristo.

“Virgen de la Humildad y santos”, obra de Puccio de Simone, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Virgen de la Humildad y santos”, obra de Puccio de Simone, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1350-1360. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La obra estuvo colgada en la iglesia de San Mateo de Arcetri (Florencia) probablemente colocado sobre su altar mayor. La figura de la Virgen está acompañada de santos: Lorenzo, Onofre, Santiago el Mayor, Bartolomeo. La tabla describe la clara influencia del taller de Bernardo Daddi.

“Crucifixión doliente de María Magdalena”, obra de Bernardo Daddi, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Crucifixión doliente de María Magdalena”, obra de Bernardo Daddi, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1343. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

“Crucifixión doliente con María Magdalena y la piedad en la Cruz”, obra de Bernardo Daddi, Galleria dell'Accademia de Florencia

La siguiente pintura “Crucifixión doliente con María Magdalena y la piedad en la Cruz ”, obra de Bernardo Daddi, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1340-1345. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Se trata de un políptico de cinco tablas, en las cuatro laterales podemos ver a: Santa María Magdalena, San Miguel Arcángel, San Juan y Santa Marta. Se ignora donde estuvo expuesto el retablo.

“Coronación de la Virgen y santos” y “Madonna con el niño y santos”, obra del denominado Maestro de la imagen Dominico, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente díptico “Coronación de la Virgen y santos” y “Madonna con el niño y santos”, obra del denominado Maestro de la imagen Dominico, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1340-1345. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Este Maestro trabajo mucho con pinturas miniaturistas que se empleaban en los libros pero también se han reconocido algunas de las obras de mayor tamaño.

“Madona en el trono con niño y san Juan Bautista, Bernardo y ángel.”, obra de Giotto di Stefano, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Madona en el trono con niño y san Juan Bautista, Bernardo y ángel.”, obra de Giotto di Stefano conocido como Giottino, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1356; tiene unas medidas de 310 x 152cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La obra es un fresco seguramente estuvo colgada en una hornacina en la Piazza Santo Spirito de Florencia a modo de humilladero. Es un buen ejemplo de las obras maestras de la pintura florentina del trecento. Se ve en la obra que se trata de un pintor extraordinario por el lenguaje que emplea desde el punto de vista del claro oscuro. Es una de las pocas piezas que han logrado atribuirse a Giottino que era nieto de Giotto.

“Madona en el trono con niño y santos.”, obra de Andrea di Cione, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Madona en el trono con niño y santos.”, obra de Andrea di Cione conocido como Orcagna, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1355; tiene unas medidas de 127 x 224 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El políptico fue expuesto en el convento de la Santísima Anunciación de Florencia. Los santos representados de las tablas laterales son: San Nicolás, San Juan Bautista, Santiago el menor.

“Cristo de la piedad con la Virgen y los santos: María Magdalena y Juan Evangelista”, obra de Giovanni da Milano, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Cristo de la piedad con la Virgen y los santos: María Magdalena y Juan Evangelista”, obra de Giovanni da Milano, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1365; tiene unas medidas de 121 x 63 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Es una pequeña tabla de devoción, constituye una de las obras de arte de la pintura del siglo XIV después de la muerte de Giotto. Estuvo expuesta en la iglesia de san Girolano alla Costa de Florencia. Esta firmado y tiene los escudos de las familias Strozzi y Riminieri, fueron los donantes de la obra. La obra describe una gran sensibilidad en la utilización del color y por su enorme emotividad.

Constituye una alternativa al estilo rígido y severo del Orcagna, que siguió en la pintura después del terrible brote de peste que asoló Florencia en 1348.

“Coronación de la Virgen ”, obra de Jacopo di Cione, Niccolo di Tommaso, Simone di Lapo, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Coronación de la Virgen”, obra de Jacopo di Cione, Niccolo di Tommaso, Simone di Lapo, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1372-1373; tiene unas medidas de 350 x 190 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Detalle “Coronación de la Virgen ”, obra de Jacopo di Cione

La tabla era conocida en Florencia como “Retablo de la Casa de la Moneda ”, y fue encargada por el magistrados de la menta para su sede, ubicada cerca del Palazzo dei Priori. El panel aparece deslumbrante por la presencia masiva del color oro y por la minuciosidad de los detalles en las telas y cortinas. Para la realización del retablo Niccolo di Tommaso y Simone di Lapo ayudaron Jacopo di Cione, el autor principal del panel.

La obra fue terminada con un precioso marco de madera tallada y adornada por cantero Giovanni di Ambrogio, con los escudos de armas de la ciudad de Florencia y de los poderosos gremios florentinos, como el gremio de los comerciantes de textiles (Calimala), y el Gremio del dinero cambiadores y banqueros. Se pueden distinguir diferentes santos protectores de la ciudad de Florencia que representa la escena principal de la coronación: Juan Bautista, Santa Reparata, Santa Ana, San Cenobio primer obispo de Florencia, Bernabé y Víctor, santos honrados en Florencia después de las victorias militares. En el retablo se puede admirar los patronos de los gremios como el de San Juan Evangelista (protector de los comerciantes de Calimala) y San Mateo (protector de los banqueros). En la parte más baja de la estructura de madera que hay escudos de armas (desde la izquierda) de la familia de Alberti, Sindicato de Calimala, el lirio de Florencia, el emblema de Anjou, el Sello de Florencia, el emblema de Anjou de Durazzo, la pintura de Guelph, Sindicato de Banqueros y la familia Davanzati. Los escudos de armas de los Alberti y Alessandra se deben a los representantes de los gremios Calimala (mercaderes de telas) y banqueros a cargo en el momento de la ejecución de la obra.

“Anunciación”, obra de un anónimo pintor florentino, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Anunciación”, obra de un anónimo pintor florentino con la participación de Mariotto di Nardo, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en la segunda mitad del siglo XIV; tiene unas medidas de 280 x 110 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La tabla fue colocada en la Orsanmichele sobre el altar del gremio de los carpinteros. En la predela podemos ver representados: Adoración de los pastores, Adoración de los Magos, Presentación al Templo; en el friso: El profeta Isaías y el profeta Daniel. El cuadro fue pintado por un pintor no identificado aunque se conoce que fue en realizado en el taller de Mariotto di Nardo, aunque se desconoce la participación del maestro.

“San Miguel Arcángel, San Julián y una donante”, obra de Matteo di Pacino, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “San Miguel Arcángel, San Julián y una donante”, obra de Matteo di Pacino, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1360-1365; tiene unas medidas de 158 x 86 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El cuadro se colgó en el Monasterio de San Ambrosio de Florencia en cargado por la orden religiosa de San Miguel. El cuadro fue pintado por un joven Matteo di Pacino en el momento que estaba trabajando en la decoración de la Capilla de la Santa Cruz de Milán.

“Pentecostés” obra de Andrea di Cione, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Pentecostés” obra de Andrea di Cione conocido como Orcagna, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1365-1370; tiene unas medidas de 195 x 273,6 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El tríptico muestra a un pintor que manifiesta unos rasgos en la fase tardía de su vida. Desarrolla una exquisita delimitación de los volúmenes, presente una rigidez de las figuras y la gama cromática que contiene, debía de integrarse de forma muy armónica en el interior de la iglesia románica de los Santos Apóstoles en Florencia, lugar de donde quizás proceda. En la segunda mitad del siglo XVIII el tríptico fue trasladado a la iglesia de Badia, y allí para a esta Galería en 1959. Es posible que en la elaboración de esta tabla colaborará Jacopo di Cione, hermano menor de Orcagna, al que se deben ciertas pinceladas, más suaves y matizadas en la aplicación de los colores, de algunos apóstoles, y ciertas notas de dulzura en la definición de los volúmenes.

“La Trinidad ; San Romualdo; San Juan Evangelista” obra de Nardo di Cione, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “ La Trinidad ; San Romualdo; San Juan Evangelista” obra de Nardo di Cione, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1365; tiene unas medidas de 295 x 216 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El cuadro tiene en la predela una serie de historias que definen la vida de San Romualdo. La tabla fue un encargo de Giovanni Ghiberti para su capilla en el Capitolio de Santa María degli Angeli en Florencia. Aunque en 1750 el cuadro fue trasladado a la capilla de los Della Stufa dedicada a San Andrés.

“Visión de San Bernardo y santos” obra de Matteo di Pacino, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Visión de San Bernardo y santos” obra de Matteo di Pacino, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1365; tiene unas medidas de 173 x 199 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El tríptico tiene en sus cúspides al Redentor Bendiciendo, Ángel anunciando y la Anunciación de la Virgen ; en la predala se representan episodios de la vida de San Bernardo, Benedicto, Juan Evangelista, Quintin y Galgano.

La tabla fue pintada para el Monasterio benedictino de Santa María de Campora. El pintor se formo en el taller de los Orcagna compartiendo su estilo pictórico, caracterizado por un elevado sentido de la volumetría de la monumentalidad, empleando una paleta de colores cálidos y vibrantes.

“Madonna y el Niño con San Pedro y San Pablo” obra del llamado Maestro de la Misericordia, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Madonna y el Niño con San Pedro y San Pablo” obra del llamado Maestro de la Misericordia de la Academia , realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1360; tiene unas medidas de 146 x 63 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El cuadro fue un encargo de la Cámara de Comercio de Florencia, se ignora el nombre aunque se ha considerado que se trata de un pintor que estuvo activo entre 1340 y 1390.

“Virgen con el niño entre ocho santos y cuatro ángeles” obra del llamado Cenni di Francesco, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Virgen con el niño entre ocho santos y cuatro ángeles” obra del llamado Cenni di Francesco, realizada en temple y oro sobre madera, está datado a finales del siglo XIV; tiene unas medidas de 88 x 49 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Cenni di Francesco di Ser Cenni era un italiano pintor de estilo gótico activo en Florencia entre 1370 y 1415. Su obra sólo aparece firmada en el fresco de la Vera Cruz en la Cappella della Croce di Giorno en la iglesia de San Francesco en Volterra, datado en 1410. Hay un par de docenas de trabajos que se han atribuido a Cenni di Francesco en base a la similitud de su estilo comparado con el fresco anterior.

“Santa Inés y Santa Domitila” obra del llamado Andre Bonaiuti, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Santa Inés y Santa Domitila” obra del llamado Andre Bonaiuti, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1366-1370; tiene unas medidas de 66 x 28 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Andrea de Bonaiuto, también llamado Andrea Bonaiuti o Andrea de Florencia, fue un pintor italiano que trabajó en Florencia entre 1343 y 1377. El nivel artístico de las pinturas no se considera muy elevado, pero su vivacidad y riqueza de detalles siempre han despertado gran interés.

“Coronación de la Virgen entre dieciocho santos y dos ángeles” obra del Niccoló di Tomnaso, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Coronación de la Virgen entre dieciocho santos y dos ángeles” obra del Niccoló di Tomnaso, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1365-1370; tiene unas medidas de 90 x 43 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Niccolò di Tommaso fue un pintor de los llamados “primitivos italianos”, nacido en Pistoia activo en durante la segunda mitad del XIV. En su obra se considera un imitador de Jacopo di Cione, aunque fuertemente influenciado por Niccolò di Pietro Gerini y también por Lorenzo Monaco.

“Virgen con el niño” obra de Jacopo di Cione, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Virgen con el niño” obra de Jacopo di Cione, realizada en temple y oro sobre madera, está datado entre 1360-1365; tiene unas medidas de 59 x 63 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La tabla es pequeña y tiene un valor devocional de carácter privado, en el centro, se puede ver la Virgen con el Niño, en la parte izquierda y en pequeño tamaño los dos donantes arrodillados; en las puertas laterales Santos y una escena de la Crucifixión. En las cúspides dos escenas de la Anunciación.

“Virgen de la Misericordia” obra del llamado Maestro de la Misericordia, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Virgen de la Misericordia” obra del llamado Maestro de la Misericordia de la Academia, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1380; tiene unas medidas de 64 x 55 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Esta pequeña tabla de carácter devocional atribuida al Maestro de la Misericordia , quizás pueda tratarse de Giovanni Gaddi. Se pinto para el convento de las monjas agustinas de Santa María in Candeli y representa a la Virgen Mater Misericordiae que acoge bajo su manto, sujetado por dos ángeles, a veintitrés monjas y a cuatro novicias, quizás fueron las que encargaron el tabernáculo. Debido a la elegancia caligráfica y al delicado uso del color presente puede indicar que el pintor es un especialista en miniaturas.

“Virgen con el niño en el trono” obra de Giotto di Stefano, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Virgen con el niño en el trono” obra de Giotto di Stefano conocido como Giottino, realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1348-1349; tiene unas medidas de 74 x 55 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

El pintor fue también escultor de la escuela florentina. Discípulo y según algunos biógrafos hijo de Stéfano de Florencia, se dedicó a estudiar las obras del Giotto, y logró apropiarse de tal manera del estilo del maestro que recibió el sobrenombre del Giottino.

“Virgen con el Niño en el trono y Santos” obra del llamado Maestro de la Misericordia, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Virgen con el Niño en el trono y Santos” obra del llamado Maestro de la Misericordia de la Academia , realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1360-1370; tiene unas medidas de 64 x 55 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

Esta pequeña tabla de carácter devocional atribuida al Maestro de la Misericordia , quizás pueda tratarse de Giovanni Gaddi. La Virgen está pintada en el centro consiguiendo una cierta perspectiva espacial, está acompañada por cuatro santos y santas a cada lado.

“Estigma de San Francisco, Natividad, Conversión de San Pablo” obra del llamado Maestro de la Misericordia de la Academia, Galleria dell'Accademia de Florencia

El siguiente cuadro “Estigma de San Francisco, Natividad, Conversión de San Pablo” obra del llamado Maestro de la Misericordia de la Academia , realizada en temple y oro sobre madera, está datado en 1370-1375; tiene unas medidas de 50 x 94 cm. Se expone en la sala del siglo XIII-XIV.

La obra estuvo colgada en el convento de las Clarisas de Monticelli de Florencia. Es una tabla poco convencional con tres partes historiadas que pudiera tratarse de una predela de algún retablo.

La plaza de la Signoria de Florencia

Aquí damos por concluido la visita al importante Museo de la Galería de la Academia, hemos sido testigo de primera mano de las obras de arte que los alumnos de pintura y de escultura tenían a primera mano para desarrollar nuevos valores y tendencias.

Nos han quedado pendientes de ver tres salas con la historia de la pintura italiana pertenecientes a finales de siglo XIV y principios del siglo XV, y también la estupenda sala de la colección de los iconos rusos.

Estamos satisfechos con lo que ofrece el museo y lo que hemos podido ver. Hemos terminado extenuados pues es difícil poder asimilar tanto arte desde las 10,00 horas hasta las 18,00 horas sin pestañear.

Cuando salimos ya es totalmente de noche, en estos momentos llueve; cuando lleve en Florencia los vendedores de paraguas se multiplican, aprovechamos para comprar uno más para nuestra particular colección, siempre salimos sin paraguas y regresamos con un par de ellos.

En estos momentos la ciudad esta desdibujada por el clima, las tiendas están vacías y solamente se ve el tránsito de personas que huyen rápidamente hacia sus domicilios. Florencia es una de esas ciudades que tienen un Km. 0 magnético y es desde donde empieza la vida social, comercial, cultural y es la plaza de la Signoria.

Calles de Florencia

Hacia allí, sin quererlo, nos conducimos atraídos por una de las torres mas altas de la ciudad la dl Palacio Vecchio. En la calle la gente vuela bajo sus paraguas para llegar antes a casa.

La plaza de la Signoria tiene más de 800 años y ha visto llover muchas veces, comenzó a asumir la forma actual cerca del año 1268, cuando las casas de los gibelinos que estaban en la zona fueron demolidas por los güelfos victoriosos de la batalla de Benevento. Fue sede del poder civil, la plaza era también el lugar de las ejecuciones públicas, de las cuales la más famosa es la del 23 de mayo de 1498, cuando Girolamo Savonarola fue colgado y quemado por herejía en el mismo lugar en el cual, con sus discípulos, había comenzado la “hoguera de las vanidades”, quemando muchos libros (algunos incunables) religiosos, de poesía, tablas de juego, vestidos.

Desde aquí caminamos por el centro hasta la estación de tren de santa María Novella donde sale nuestro autobús que nos lleva hasta el área de autocaravanas.

La noche ha sido una completa tormenta, durante todo la noche no ha dejado de llover, hasta el punto que nos replanteamos nuestra estancia en Florencia.

Día 8 de enero (viernes)

Ruta: Florencia-Pistoia- Km 37; tiempo estimado 00h52' St Laurent du Var (Francia) Km 399; tiempo estimado 4h19'

Plaza de San Francisco de Pistoia

Por la mañana vemos que la cosa sigue igual y las previsiones del tiempo no parecen variar. Teníamos pensado pasar la mitad del día en la ciudad de Florencia pero la lluvia no da tregua; por lo que decidimos continuar nuestro viaje de regreso hacia España, aunque tenemos intención de hacer una parada hasta el mediodía en uno de los pueblos cercanos.

Pensamos parar en la ciudad de Pistoia y imaginamos que es una buena opción para cumplir con todos los objetivos que nos hemos trazado en viaje. Siguiendo las previsiones del tiempo esperamos que a las 11,00 horas deje de llover.

Sobre esa hora llegamos a Pistoia y acudimos directamente al área de autocaravanas, aunque vemos que enfrente hay un enorme parking con la categoría de P+R bus donde hay aparcadas varias autocaravanas, hacia allí marchamos. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con: N 43.94374 // E 10.91583 .

El parking es muy amplio con capacidad para cientos de vehículos, enseguida llega el autobús que te acerca al centro, aunque hay poco más de 1 Km. el precio del parking es gratuito y el bus es 1,20€ válido para todo el día.

Nave de la iglesia de San Francisco de Pistoia

Pistoia es una de esas ciudades que tienen un gran patrimonio y que nunca en un tour por la Toscana te pararían media hora, la gente que acude a Pistoia es que sabe lo que la ciudad ofrece por eso se la conoce en Italia como “ La Ciudad de los Tesoros”.

El bus hace un recorrido circular por la parte exterior de la ciudad pero no se adentra en la ciudad Monumental, pedimos al conductor que no indicara la parada más próxima a la plaza del Duomo; cuando llegamos nos advierte que nos bajemos en la plaza de San Francisco.

Antiguamente esta plaza era el lugar donde se celebraban las carreras de caballos, con el paso del tiempo la plaza se transformo hacia un uso más urbano, se instaló el monumento a los caídos de la Primera Guerra Mundial, obra del escultor Silvio Canevari, está rodeada de una arboleda que dará sombra en verano.

En una de sus esquinas se encuentra la Iglesia de San Francisco; nos llama la atención su fachada de otros elementos exteriores, es una adaptación a los gustos de otras épocas, en concreto en el siglo XVIII se levantada un revestimiento de fachada de mármol en dos colores, blanco y verdes con bandas horizontales sin ninguna decoración, aprovechamos que esta la puerta abierta para adentrarnos. Al principio a nuestros ojos les cuesta hacerse a la poca iluminación interior que tiene en esos momentos pero tenemos suficiente para poder ver que estamos ante un tesoro del arte.

Altar mayor de la iglesia de San Francisco de Pistoia

La iglesia de San Francisco fue construida por la orden franciscana en el siglo XIII. El modelo elegido es que prédica la orden siguiendo el modelo franciscano, con una nave cubierta por cerchas articuladas por medio de capillas laterales, en la cabecera un transepto y tres capillas absidales.

Lo más importante está en las paredes donde aparecen en la nave los rastros de la decoración con frescos pintados durante el siglo XIV. Más allá del gran arco de triunfo se abre la capilla mayor, decorada con frescos que cuentan las historias de San Francisco (1343); los frescos de la capilla Bracciolini con historias de María realizados en la segunda década del siglo XV; Pazzaglia en la capilla, con frescos historias de los Santos Antonio y Ludovico de Giovanni di Bartolomeo Cristiani; en a capilla Gatteschi con historias de San Donnino de Bonaccorso di Cino. La iglesia entre 1386 y el final de siglo estaba decorada la sala capitular con frescos de Antonio Vite y también en la sacristía.

La parte más impresionante son los frescos de la Capilla Mayor descubiertos durante el siglo XX. El programa decorativo de la capilla, que se centra en las historias de San Francisco. Las historias del santo son destacadas por su entorno monumental que permite al artista retratar a los personajes en la escala natural insertando escenas evocadoras de arquitectura. Las escenas de la vida del santo están dispuestas en las paredes laterales dividido en tres registros y siguiendo un patrón de izquierda a derecha y de arriba abajo, donde se puede reconocer: Sueño de San Francisco; Regalo de la capa para los pobres; Visión del Crucifijo de San Damián; Renuncia a los bienes (apenas legible); El sueño de Inocencio III; La aprobación de la norma; Prédica a los pájaros; La expulsión de los demonios de Arezzo (apenas legible); La prueba de fuego; tal vez una de Santa Milagros (perdido) estigmas; La muerte de la Santa (perdido).

Iglesia de San Giovanni Fuorcivitas de Pistoia

Pese a los claro oscuros de la falta de iluminación estamos disfrutando enormemente de la visita pero enseguida nos avisa el cura que tiene que cerrar, al parecer estaba haciendo unas pequeñas tareas de mantenimiento para las celebraciones de la misa.

De esta forma tan sumamente precipitada comenzamos la visita a una ciudad desconocida, caminamos siguiendo las indicaciones de las calles hacia la Piazza del Duomo, en el camino vemos la estupenda fachada de la Chiesa di San Giovanni Fuorcivitas.

La fachada fue construida en mármol a dos colores, blanco y verde, con arcos ciegos y lo más destacado es el dintel románico de la entrada, está fechado en 1166, y hace una interpretación de la última cena.

En el interior lo más destacado es el púlpito obra de Fray Guillermo, está apoyado sobre la pared y en dos columnas de mármol que se levantan sobre sendos leones. Tiene una valiosa colección de grandes obras de arte, una de las obras maestras de Luca Della Robbia, hoy en día en un nicho del lado norte, y un raro crucifijo del siglo XIII que preside el Altar Mayor.

Desgraciadamente sin poder contemplar mucho más el cura nos indica que tiene que cerrar, dejamos pendiente la continuación de la visita por si podemos regresar un poco más tarde.

Plaza del Duomo de Pistoia

Desde aquí marchamos hacia la plaza del Duomo donde vemos la oficina de turismo municipal, aprovechamos para pedir un plano de la ciudad y nos indican los principales monumentos y sus horarios. La Piazza del Duomo Pistoia cobra fuerza en la Edad Media cuando se convirtió en la plaza del mercado local, además del centro político y religioso de la ciudad. Luego adquirió el aspecto que tiene en la actualidad, convirtiéndose en gran espacio circunscrito por las distintas arquitecturas: románica y gótica, convirtiéndose en una de las plazas más bellas de Italia.

En el siglo XI se construyó la Catedral de San Zeno y el Baptisterio de San Juan en la Corte ; más tarde se construyó el antiguo palacio de los obispos y el núcleo del palacio pretoriano. Hacia el final del siglo XIII, un barrio entero fue demolido para permitir la construcción del Ayuntamiento.

Lo primero que visitamos es la Catedral Lombarda de san Zemo. El actual edificio fue construido en el siglo XII y sucesivas modificaciones durante el siglo XIV y XV momento en que fue construido el porche y la actual fachada de mármol en dos colores. Consagrado a la veneración de Santiago.

“Virgen con el niño y ángeles”, obra de Andrea della Robbia,Duomo de Pistoia

Entre 1379 y 1440 la fachada fue reconstruida con la adición de tres niveles de galerías y un pórtico. En 1504 Andrea della Robbia fue el encargado de realizar la decoración de la arquivolta (por la que creó un festón con temas vegetales y, en medio, la cresta de San Juan), del pórtico, así como de la luneta con bajorrelieves sobre el portal central, que representa la “Virgen con el niño y ángeles”. Terminó la obra en 1505.

El interior, la planta tiene tres naves divididas por columnas que sujetan unos arcos de media punta románicos y estos unas cerchas de madera con presbiterio y una cripta, que probablemente fue construida en el siglo X.

“Crucifijo de San Zeno”, obra de Coppo di Marcovaldo, Duomo de Pistoia

Entre las obras más importantes que podemos ver es el Crucifijo de San Zeno es una de las pocas obras comprobadas del florentino Coppo di Marcovaldo, pintados en 1274 en colaboración con su hijo Salerno. Es un crucifijo de madera, realizado en temple sobre madera, mide 280 x 245 cm.

Catedral de Pistoia

El crucifijo es el único superviviente de todos los trabajos que hizo Coppo para la catedral de Pistoia, de acuerdo con los documentos de archivo, además de los frescos de la Capilla de Santiago, los cuales fueron destruidos en 1786, cuando fue demolida. En 1274 también se encargaron a Coppo y Salerno tres paneles para el coro de la catedral (todos desaparecidos) fueron: un crucifijo, una Virgen y San Juan.

La iconografía es la de Cristo Paciente, que se está muriendo de sufrimiento en la cruz, este tipo de representación sustituye a la de Cristo Triunfante (un Cristo ganador, con los ojos abiertos), todo gracias a la nueva influencia de las órdenes mendicantes, especialmente de la orden de los dominicos.

En los paneles laterales del crucifijo se representa seis escenas de la Pasión : la captura de Jesús (izquierda, arriba); Flagelación (izquierda, centro); Deposición de la cruz (izquierda, abajo); Jesús antes de los sacerdotes (derecha, arriba); Pietà (derecha, centro); las mujeres santas en la tumba (derecha, abajo).

Baptisterio de Pistoia

Enfrente de la catedral se levanta el Baptisterio de San Juan en Corte. Fue edificado con su forma actual en la mitad del siglo XIV. Sin embargo, el edificio original pudo ser construido en el siglo XII.

La fecha y la firma de la construcción se puede leer en una inscripción que se encuentra en el interior del tanque. A principios del siglo XIV la ciudad decidió a renovar el baptisterio, aunque no era momento por la enorme crisis política que amenazaba a la ciudad.

Una vez que paso el primer cuarto del siglo, y la crisis política que había empezado a disminuir en la ciudad de Pistoia, se encargo la dirección de la obra de construcción a Cellino di Nese, ex capataz del Baptisterio y el Camposanto de Pisa.

Desde entonces, la fábrica de San Juan continuó su construcción con regularidad y se completó la bóveda en la segunda mitad del siglo XIV, la iglesia podría considerarse que se había terminado. Cellino de Nese era entonces el principal artífice de la decoración exterior con un refinado uso del mármol de diferentes colores ofrece una interpretación particular de la tradición románica de Pistoia: Probablemente Cellino fue también el autor de una parte de la decoración escultórica de mármol de la fachada exterior. El bisel de las esculturas del portal junto con relieves y arquitrabe son obra de un artista muy cercano al taller del famoso Giovanni d'Agostino. Desde la primera mitad del siglo XVII en el baptisterio se levanto un altar de madera.

Interior del Baptisterio de Pistoia

El baptisterio sufre importantes procesos de restauración, entre los que han tenido una importancia considerable fueron a mediados del siglo pasado y la más reciente, que consiguió devolver la apariencia original de la pila bautismal de Lanfranco oculta por las intervenciones barrocas del escultor Andrea Vacca. En estos momentos se ha perdido su función litúrgica y, a veces alberga eventos culturales.

Seguimos en la misma plaza del Duomo, el edificio que se encuentra pegado al Baptisterio es el Palacio Pretorio o Palazzo del Podesta, tiene un aspecto medieval aunque el edificio es el resultado de una reconstrucción llevada a cabo en la segunda mitad del siglo XIX siguiendo el proyecto del arquitecto Giuseppe Faldi.

El primitivo edificio fue construido en la segunda mitad del siglo XIV, y fue cedido para albergar el palacio que administra la justicia en Pistoia; en la Edad Media , estaba la figura del gobernador que era el delegado del gobierno de los Medici, y los comisarios de Florencia.

A principios del siglo XIX, después de la abolición de las magistraturas de la alcaldía, el palacio se convirtió en la sede del Tribunal Colegiado y unos años después en la Corte Real de Primera Instancia o Tribunal de Justicia.

Palacio Pretorio de Pistoia

Nada más entrar en el edificio se ve un gran patio con unas galerías góticas decoradas con frescos al temple que identifican el edificio con los símbolos de poder de justicia, están datados en el siglo XV, durante la restauración también agregaron algunos escenas en la memoria de las épocas más gloriosas de la ciudad. También se puede ver el banco de piedra del siglo XIV donde estaba sentado el alcalde durante las audiencias.

Volvemos a la plaza del Duomo y uno de los edificios es el Palacio Comunal, se levanta como un signo del poder del gobierno de la ciudad. Se empieza a construir en 1294 en estilo gótico, tiene cinco arcos que dan paso a una galería, por encima un primer nivel con balcones que se asoman a la plaza por encima el siguiente nivel tiene una serie de ventanas triforas con arcos apuntados.

En una parte importante del Palacio Comunal ha destinado como museo para albergar la importante colección de pintura del Museo Cívico, el precio es de 3,5 euros por persona, los niños tienen la entrada gratuita.

“San Francisco, historias de su vida”, obra de atribuida al denominado Maestro de la Cruz, Museo Cívico de Pistoia

La primera de las importantes obras “San Francisco, historias de su vida”, obra de atribuida al denominado Maestro de la Cruz , realizada en temple sobre tabla de madera, está datado en 1270.

La tabla estuvo expuesta en la iglesia de San Francisco, representa una de las obras más antiguas del museo. De acuerdo con los últimos estudios del autor se trata de un pintor florentino, podía identificarse con Coppo di Marcovaldo, con la colaboración de algún joven maestro del taller. El esquema de la obra es monumental y retrata un modelo bizantino, donde la figura del santo esta en el centro de la obra, y, simétricamente a cada lado, las escenas historiadas.

“Virgen con niño y santos”, obra de atribuida al denominado Maestro de 1310, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Virgen con Niño y santos”, obra de atribuida al denominado Maestro de 1310, realizada en temple sobre tabla de madera, está datado en 1320.

La obra estuvo expuesta en el Convento de los Humillados. Su autor permanece en el anonimato y se le dio un nombre formal de identidad “Maestro de 1310”. La concepción plástica de las figuras dotadas de una gran vivacidad y variedad indica que estamos ante un gran maestro de la pintura medieval. En esta obra, que se remonta a una etapa más madura de su producción, en torno a 1320, los signos son reconocibles de su formación tardía del siglo XIII, en la dureza de las articulaciones de las manos y los atisbos de la espacialidad que permanece un tanto incierta. Además la obra representa una actualización sobre las tendencias góticas más avanzadas: la tendencia lineal de los pliegues, las sutilezas de algunas soluciones formales y compositivas muestran un lenguaje de alto nivel artístico y una considerable originalidad. Los resultados es una buena prueba de que estamos ante un pintor que seguía las tendencias de Giotto.

“Crucifijo”, obra de anónima de un pintor de Pistoia, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Crucifijo”, obra de anónima de un pintor de Pistoia, realizada en temple sobre tabla de madera, está datado en el siglo XV.

El modelo de Crucifijo del tipo toscano, nos muestra a un Jesús en la cruz doliente sangrando por pies y manos con los ojos cerrados, su cuerpo describe dolor por su cabeza describe una paz infinita.

“Catalina de Alejandría”, obra de anónima de un escultor, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente escultura “Catalina de Alejandría”, obra de anónima de un escultor, realizada en en madera policromada, está datado en el siglo XV.

La figura representa a Catalina de Alejandría porque en su mano izquierda lleva la rueca que la identifica con su martirio. Es una figura con aspecto toscano más parecido románico, donde se describen los pliegues de los vestidos en estilo gótico.

“Virgen entronizada con el niño, Cristo redentor y santos”, obra de Mariotto di Nardo, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Virgen entronizada con el Niño, Cristo redentor y santos”, obra de Mariotto di Nardo, realizada en temple sobre madera, está datado entre 1410-1420.

Los primeros documentos encontrados relativos a Mariotto di Nardo di Cione, probablemente era hijo del pintor del siglo XIV Nardo di Cione y por lo tanto nieto de Andrea Orcagna, se remontan a 1389 (inscripción en el arte de los médicos y boticarios), pero los primeros cuadros se refieren a él sobre la base estilística puede surgir al comienzo de la novena década del siglo.

“Anunciación con San Nicolás y Julián”, obra de Mariotto di Nardo, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Anunciación con San Nicolás y Julián”, obra de Mariotto di Nardo, realizada en temple sobre madera, está datado entre 1415-1420.

El trabajo viene del convento de Giaccherino, donde hay testimonios que estaba expuesto en la sacristía. La presencia del escudo de armas Panciatichi ha permitido la identificación del donante que se muestra en el centro. Se trata de Gabriel Panciatichi, hijo de Bartolomé, nacido en 1352, rico comerciante y financiero, que fundó el convento a finales del siglo XIV. Tradicionalmente el tríptico se le había atribuido a Agnolo Gaddi pero fue reconocido como un trabajo de Mariotto Nardo (la mitad del cuadro), y Rosselló di Jacopo Franchi (el lateral).

“Sacra Conversación”, obra de Gerino Gerini, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Sacra Conversación”, obra de Gerino Gerini, realizada en temple y óleo sobre madera, está datado en 1509.

El cuadro representa a la Virgen entronizada con el niño como desde un nivel superior presencia la conversación entre: San Miguel Arcángel, Pedro, Pablo y san Juan Bautista. El retablo estuvo expuesto iglesia de San Pier Maggiore. Los elementos de la composición describen una estructura arquitectónica en la galería abierta que deja ver un paisaje, los tipos y las poses de los santos, son de la misma calidad pictórica, en las opciones de color y en el tratamiento de la luz y la sombra, es una retroalimentación puntual en las obras de Perugino, dirigida por Vasari como su maestro.

“Virgen con el Niño”, obra de Tommaso Fiamberti, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente escultura “Virgen con el Niño”, obra de Tommaso Fiamberti, realizada en porcelana, está datado en el siglo XVI.

“La Cuna”, obra de Giovan Battista Pistoiese, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “ La Cuna ”, obra de Giovan Battista Pistoiese, realizada en temple sobre madera, está datado en 1525.

La tabla tiene muchas citas y referencias casi literales a las composiciones de Perugino, sobre todo en el ropaje típico de los años veinte del siglo XVI. La influencia de los caracteres originales y excéntricos de la pintura de este artista, aunque hay datos del carácter personal del autor, se identifican en el paisaje y en la atmosférica del fondo sobre todo en las expresiones de las figuras.

“Cristo doliente crucificado”, obra de un autor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Cristo doliente crucificado”, obra de un autor anónimo, realizado en temple sobre madera, está datado en el siglo XVI.

Estamos ante una obra de un pintor secundario de formas toscas, en la que aparece Cristo doliente acompañado de María Magdalena y de Nicodemo, en la parte baja dos santos con la representación de sus martirios.

“Virgen de la leche con comitente”, obra de un autor anónimo de Pistoia, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Virgen de la leche con comitente”, obra de un autor anónimo de Pistoia, realizado en temple sobre madera, está datado en la primera mitad el siglo XVI; tiene unas medidas de 96 x 82 cm.

Es una pequeña tabla de devoción particular que destaca por su colorido y sus formas, mucho más alejadas en la representaciones del tema de las que hasta ese momento se venía dando en la pintura italiana. Estuvo expuesto en la Ospedale del Ceppo.

“Descanso durante la fuga de Egipto”, obra de un autor anónimo de Pistoia, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Descanso durante la fuga de Egipto”, obra de un autor anónimo de Pistoia, realizado en óleo sobre madera, está datado en la primera mitad el siglo XVI; tiene unas medidas de 63 x 48 cm.

Es una obra de un pintor de la escuela de Pistoia es copia de un famoso cuadro de Botticelli donde de una forma muy bella se trata la conocida hazaña de la matrimonio durante su huida a Egipto.

“San Sebastián”, obra de un autor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “San Sebastián”, obra de un autor anónimo septentrional, realizado en madera policromada, está datado en la segunda mitad el siglo XV o primera del siglo XVI; tiene unas medidas de 150 cm. Estuvo expuesto en la iglesia Gesuate.

“Ángel anunciante; Virgen anunciada”, obra de Fra Paolino, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Ángel anunciante; Virgen anunciada”, obra de Fra Paolino, realizado en temple y óleo sobre tabla, está datada en 1525; tiene unas medidas de 194 x 59,5 cm. Estuvo expuesto en el Convento de San Domenico.

Se desconoce la procedencia de esta tabla, lo único que se conoce es donde estuvo expuesta. Fra Paolino tuvo mucho trabajo en el convento de los dominicos, está inspirado en una tabla parecida de su maestro Fra Bartolomeo, aunque en este caso está inspirado en el gusto de Girolamo Savanarola.

La tabla representa unas imágenes dentro de una grandiosidad en su volumen con unas formas casi geométricas que el artista intenta provocar una intensa devoción del espectador.

“Cristo salvador”, obra de Agnolo di Polo, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente escultura “Cristo salvador”, obra de Agnolo di Polo, realizado en terracota policromada, está datado en 1498; tiene unas medidas de 74 x 55 x 22 cm. Estuvo expuesto en la Pia Casa di Sapienza.

El busto fue un encargo del comisionado de la Sapienza para la decoración de la sala de audiencias al escultor Agnolo di Polo. El escultor florentino se forma en el taller de Verrocchio, con Lorenzo di Credi, en concreto esta obra está inspirada en una obra del maestro.

“Sacra conversación con santos”, obra de un pintor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Sacra conversación con santos”, obra de un pintor anónimo de Pistoia, realizado en temple sobre madera, está datado en el cuarto decenio del siglo XVI; tiene unas medidas de 247 x 202 cm.

Estuvo expuesto en la iglesia del convento de San Mercuride y se representa además del patrón comisionado del convento, Santiago, Felipe y Benedicto.

“Crucifijo doliente, dos ángeles y seis Apóstoles”, obra de Giovan Battista Naldini, Museo Cívico de Pistoia

Las siguientes pinturas “Crucifijo doliente, dos ángeles y seis Apóstoles”, obra de Giovanni Battista Naldini, realizado en óleo sobre madera, está datado entre 1565-1566; tiene diferentes medidas.

Estas once tablas corresponden al retablo del altar mayor de la catedral de Pistoia después de ser desmembrado paso a una colección privada de Tolomei, Chiappelli y regreso al Museo Cívico en 1937. La obra de Giovanni está inspirada en el pintor florentino Giorgio Vasari propietario del taller donde estudiaba pintura.

“Sacra conversación con la Virgen de la Humildad ”, obra de Bernardino Detti, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Sacra conversación con la Virgen de la Humildad ”, obra de Bernardino Detti, realizado en temple sobre madera, está datado entre 1523; tiene unas medidas de 213 x 164 cm.

La tabla estuvo expuesta en el oratorio de San Jacopo alla Pergola, en la imagen aparecen la Virgen de luto con una cesta de fruta acompañada de San Bartolomeo, Santiago y San Juan.

“San Bartolomeo”, obra de un pintor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “San Bartolomeo”, obra de un pintor anónimo, realizado en temple sobre madera, está datado en el siglo XVI.

San Bartolomeo es considerado un apóstol y muy venerado en el mundo bizantino, su obra llega a Italia donde adquiere mucha popularidad, lleva un cuchillo en la mano derecha como símbolo de su martirio y un libro en su mano izquierda como símbolo de su apostolado.

“Sacra conversación”, obra de Giovan Battista Volponi, Museo Cívico de Pistoia

La siguiente pintura “Sacra conversación”, obra de Giovanni Battista di Pietro di Stefano Volponi conocido como Lo Scalabrino, realizado en óleo sobre madera, está datado en 1525; tiene unas medidas de 210 x 195 cm.

La tabla estuvo expuesta en la capilla de Santa Agata del Palacio dei Priori. En esta ocasión Giovanni se inspira en los maestros Lorenzo di Credi y Rafael combinando con las características propias de la pintura de la escuela de Pistoia.

El segundo piso del museo está dedicado a la pintura de las escuelas florentina y de Pistoia del siglo XVII al XVIII. También a la pintura de la colección Puccini que empieza en el siglo XIV hasta el siglo XIX.

“Alegoría del dominio de los Medici”, obra de Giacinto Gemignani, Museo Cívico de Pistoia

El primer cuadro que podemos contemplar “Alegoría del dominio de los Medici”, obra de Giacinto Gemignani, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en el siglo XVII.

El cuadro nos muestra como los ángeles mandan desde el cielo flores, en uno de los cintas que acompañan la escena está escrito el lema del cuadro “Tantos Nostra Virent Rutilantia Floribus Arva” traducido: Nuestros campos dorados son exuberantes con flores tan grandes.

“Visión de San Jerónimo”, obra de un pintor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Visión de San Jerónimo”, obra de un pintor anónimo, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en el siglo XVII; tiene unas medidas 186 x 120 cm.

El cuadro muestra los efectos tenebristas barrocos que se llamo en Italia Caravaggismo, era una corriente pictórica dentro del barroco, que designa el estilo de los artistas que se inspiraron en la obra de Caravaggio. Estos pintores también son conocidos como tenebristas, por su uso de la técnica del claroscuro.

“Retrato del caballero Lanfredino Cellesi”, obra de Luigi Crespo, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Retrato del caballero Lanfredino Cellesi”, obra de Luigi Crespo conocido como Lo Spagnoletto, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en 1732; tiene unas medidas 120 x 83 cm.

El cuadro pertenece a la obra temprana de Luigi Crespo fue un pintor con mucho éxito de Bolonia, que revela el conocimiento del retrato francés, donde se ponen muchos detalles en el decorado con buen gusto en la ropa y su solemne actitud, y una notable calidad en los efectos pictóricos de diferentes materiales, armadura brillante, el piel suave y las sedosas texturas.

“Batalla”, obra de Francesco Graziani, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Batalla”, obra de Francesco Graziani conocido como Ciccio Napoletano, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVII; tiene unas medidas 117 x 180 cm.

Francesco Graziani representa una batalla donde la composición no es heroica, pero si es realista, el colorido es ágil y vivaz, en la parte baja se representan los caballos y jinetes en la lucha.

“Batalla”, obra de Francesco Graziani, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Batalla”, obra de Francesco Graziani conocido como Ciccio Napoletano, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVII; tiene unas medidas 117 x 180 cm.

Este cuadro representa una batalla antes de terminarse donde se simboliza el momento más violento antes de producirse el final del combate. Predomina la lucha en un puente que está a punto de caerse, las personas se representan arrojadas al agua.

“Santiago”, obra de un pintor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Santiago”, obra de un pintor anónimo de Pistoia, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en el siglo XVIII; tiene unas medidas 112 x 147 cm.

“Retrato de un gentil hombre con una carta”, obra de Giuseppe Valiani, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Retrato de un gentil hombre con una carta”, obra de Giuseppe Valiani, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en el siglo XVIII; tiene unas medidas 89 x 68.5 cm.

“Virgen del Rosario con Santa Catalina y un dominico”, obra de un pintor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Virgen del Rosario con Santa Catalina y un dominico”, obra de un pintor anónimo de Pistoia, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVIII; tiene unas medidas 95 x 210 cm.

El cuadro se encontraba depositado en el conservatorio de San Juan Bautista en algún sitio no identificado del convento, aunque es de imaginar que estuvo en la capilla del Rosario. La pintura interpreta una línea artística del clasicismo romano durante el settecento.

“Plaza de San Francisco”, obra de un pintor anónimo, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Plaza de San Francisco”, obra de un pintor anónimo de Pistoia, realizada en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVIII; tiene unas medidas 83 x 154 cm.

El paisaje representa una famosa plaza de Pistoia en una imagen fechada en 1789 durante las fiestas de San Juan, a la izquierda aparece la fachada de la iglesia de Santa María Magdalena.

“Madonna con niño en el trono con ángeles”, obra de Giovanni di Bartolomeo Cristiani, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Madonna con niño en el trono con ángeles”, obra de Giovanni di Bartolomeo Cristiani, realizada en temple sobre tabla, está datado en 1365-1370; tiene unas medidas 163 x 90 cm.

Estamos ante la tabla central de un políptico que fue desmembrado para devoción privada, se le añadió al marco el avemaría: “Ave María Gratia Plena”, se cree que debía estar acompañado por las tablas de san Romualdo y santa Andrea.

“Tondo Madonna con niño y san Juanito”, obra de un pintor anónimo de Pistoia, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Tondo Madonna con niño y san Juanito”, obra de un pintor anónimo de Pistoia, realizada en temple sobre tabla, está datado en la segunda mitad del siglo XVI; tiene unas medidas 83 x 154 cm.

“Virgen entronizada con el niño”, obra del llamado Maestro di Francoforte, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Virgen entronizada con el niño”, obra del llamado Maestro di Francoforte, realizada en temple sobre tabla, está datado en la segunda mitad del siglo XVI; tiene unas medidas la tabla central: 105 x 69 cm y las laterales de 115x39.5 y 105 x 29 cm.

Este enorme retablo se desconoce exactamente a quien pueda pertenecer atribuido primeramente a Luca di Leyda, estuvo expuesto en el Conservatorio degli Orfani, también se le ha atribuido a Hugo van der Goes.

La tabla central representa a la Virgen en el trono con dos ángeles musicantes y las tablas laterales aparecen la familia de los donantes que están acompañados de san Bartolomeo y santa Catalina.

“Historia de san Antonio”, obra de un pintor de la escuela de San Marcos, Museo Cívico de Pistoia

El siguientes tres cuadros hablan de la “Historia de san Antonio”, obra de un pintor de la escuela de San Marcos, realizada en temple sobre tabla, está datado en 1515; tiene unas medidas de 49 x 25 cm.

Las tres tablas pertenecían a un retablo desmembrado de un altar, se ignora donde estuvo expuesto, aunque debía de pertenecer alguna capilla dedicada a san Antonio, las historias del santo: Elevación de San Antonio, el santo muerto, el santo resucita.

“Sagrada Familia con san Juanito”, obra de Giovan Battista Nadini, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Sagrada Familia con san Juanito”, obra de Giovan Battista Nadini, realizada en temple sobre tabla, está datado en la segunda mitad del siglo XVI; tiene unas medidas de 116 x 86 cm.

La tabla proviene de una colección privada atribuida al taller de Naldini, tiene una fuerte inspiración de Bronzino. El tema está más desarrollado porque muestra una escena de la Sagrada Familia en el preciso momento que Jesús está dormido y la Virgen intenta taparle, mientras la escena es contemplada por San José y San Juanito.

“Radamisto en el momento de matar a Zenobia”, obra de Luigi Sabatelli, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Radamisto en el momento de matar a Zenobia”, obra de Luigi Sabatelli, realizado en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVII; tiene unas medidas de 123 x 145 cm.

“Retrato de Granduca Ferdinando III de Lorena”, obra de Nicola Monti, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Retrato de Granduca Ferdinando III de Lorena”, obra de Nicola Monti, realizado en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVII; tiene unas medidas de 232 x 168 cm.

El gran retrato estuvo expuesto en el Palacio Comunale hasta finales de 1854, seguramente hasta que llegó el gobierno de Napoleón. La escena representa a un personaje de forma majestuosa dentro de un ambiente naturalista y reconocible.

“Danza de la vendimia”, obra de Nicolás Didier Boguet, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Danza de la vendimia”, obra de Nicolás Didier Boguet, realizado en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVIII; tiene unas medidas de 99 x 133 cm.

Se trata de un paisaje típico de la escuela romana, muy parecido al que ejecutaban Poussin o Lorrain. Tiene una visión nítida de una atmósfera del paisaje anglosajón pero trasladado a la campiña italiana.

“El movimiento Balilla”, obra de Emilio Busi y Luigi Asioli, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “El movimiento Balilla”, obra de Emilio Busi y Luigi Asioli, realizado en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XVIII; tiene unas medidas de 305 x 368 cm.

El cuadro muestra el hecho histórico del nacimiento del movimiento fascista de Balilla, era un muchacho que inicio una revuelta al tirar una piedra al cónsul de Austria y desemboca en la insurrección de los genoveses.

“Asesinato de Lorenzino de Medici”, obra de Giuseppe Bezzuoli, Museo Cívico de Pistoia

El siguiente cuadro “Asesinato de Lorenzino de Medici”, obra de Giuseppe Bezzuoli, realizado en óleo sobre lienzo, está datado en la segunda mitad del siglo XIX; tiene unas medidas de 225 x 296 cm.

El museo comparte la exposición con la obra de otros artistas de redoble nacidos en Pistoia, entre los que están Giovanni Michelucci, es considerado como un gran arquitecto y urbanista contemporáneo italiano.

Me llama la atención que entre los obras expuestas hay numerosas iglesias italianas del siglo XX están realizadas por el arquitecto Giovanni Michelucci, quizás fue unos de los trabajos más demandados, pero no solo en Italia, también diseño iglesias fuera de Italia.

Plaza del Duomo de Pistoia

Veo que la obra que se expone parece que estoy ante las iglesias construidas por Le Corbusier, efectivamente, ambos arquitectos pertenecen al movimiento racionalismo que surge en Europa tras la I Guerra Mundial. El Art Nouveau, que rompió con la contradicción y señaló el primer paso hacia la plasticidad de las líneas constructivas, derivó en ornamentalismo vacuo, por lo que a principios del siglo XX se originó una corriente que rechazaba dicho ornamento, y aprovechaba los descubrimientos de la llamada Segunda Revolución Industrial, cuyo objetivo era encontrar un camino intermedio entre la renuncia a la imitación de lo antiguo y a un excesivo tecnicismo uniformador.

Aquí damos por finalizada nuestra visita a la ciudad de Pistoia, es la una de la tarde, es la hora de la comida para los italianos. Nosotros marchamos hacia la plaza de san Francisco para esperar el bus de la línea M que nos devuelva al parking donde tenemos la autocaravana.

Enfrente se encuentra el área de autocaravanas de la ciudad de Pistoia (Italia), es gratuita, se halla en la Via Marini Marino. Las coordenadas GPS del lugar corresponde N 43.94383 // E 10.91539 .

Después de comer salimos inmediatamente en dirección a Francia, repostamos en una gasolinera solo un cuarto de depósito para que nos permita llegar hasta nuestro destino en Francia.

Parking en St Laurent du Var (Francia)

Nos separan 400 km, la primera parte del recorrido la hacemos a bien ritmo pero al final cuando llegamos a las estribaciones de los Alpes hay mucho viento lo que no impide conducir a la velocidad de la vía.

Llegamos la ciudad de St Laurent du Var pasadas las 21,00 horas y vamos directamente a la calle donde habíamos pernoctado a la ida. Las coordenadas del lugar corresponden con: N 43.68124// E 7.18945 . Desgraciadamente no hay sitio suficiente para aparcar.

Continuamos a ver si hay más suerte en el área para autocaravanas de St Laurent du Var. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con: N 43.68550, E 7.18522 , Pero tampoco hay suerte, está llena.

Marchamos por la ciudad en la busca del parking señalizado exclusivamente para autocaravanas. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con: N43.66634 // E 7.19582 . Es para cinco plazas y afortunadamente hay sitio.

El aparcamiento es solamente válido para autocaravanas pero en horario desde las 17,00 horas hasta las 10,00 horas, podemos pasar la noche con mucha comodidad.

Día 9 de enero de 2016

Ruta: St Laurent du Var (Francia)-Gerona Km 557; tiempo estimado 5h 42'

Catedral de Gerona

A las nueve de la mañana tenemos todo preparado para cruzarnos todo Francia, afortunadamente las autopistas de peaje de Francia, aunque caras, son una garantía de una conducción segura.

Llegamos a las 21,00 horas a Gerona, acudimos directamente al parking situado cerca del polideportivo. A la entrada una señal del ayuntamiento indica que el parking es válido para autocaravanas y caravanas, pero está prohibido el camping. Las coordenadas GPS del lugar corresponden con: N 41.99149 // E 2.81190 .

El parking se encuentra en una zona arbolada, amplia y llana. Es perfecto para dejar la autocaravana y visitar a la ciudad de Gerona, se halla a unos 10 minutos andado del centro urbano.

Día 10 de enero (domingo)

Ruta: Gerona-Madrid Km 686; tiempo estimado 7h 46'

Nos levantamos temprano para poder hacer el último trayecto hasta casa, la primera parte la hacemos con completa normalidad pero unos 100 km antes de llegar a Zaragoza y casi a la entrada en Madrid somos sorprendidos por un temporal de viento que nos dificultan mucho la conducción.

Llegamos a Madrid a las 19,00 horas, el indicador dice que hemos tenemos un consumo medio de 11,9 litros, aunque analizado el recorrido veo que es de 11,6 litros, los kilómetros recorridos han sido 3.616; los doy por bien aprovechados.

Parking para autocaravanas en Gerona

 

-FIN-

 

by

A. López

© Fotografías y textos son propiedad:

www.viajeuniversal.com

Blog por Italia Parte II
   
Subir arriba