Situado en el Paseo de la Castellana, bajo el paso elevado que une las calles de Juan Bravo y Eduardo Dato, se expone al aire libre una excelente colección de esculturas abstractas de artistas españoles como Andreu Alfaro, Julio González, Joan Miró o Eduardo Chillida, entre otros- que se integran armoniosamente con el resto de los elementos urbanos de su entorno.
La fuente, la barandilla y los bancos con forma de "S" fueron diseñados por el escultor Eusebio Sempere que, junto con los ingenieros del puente Alberto Corral, José Antonio Fernández Ordóñez y Julio Martínez configuraron este novedoso museo entre 1972 y 1979, todo el conjunto forma un todo unitario junto con la colección de obras astractas.
El puente es uno de los más elegantes de Madrid, sobre todo por sus proporciones, su diseño y los materiales con los que fue confeccionado -hormigón armado y acero cortén-. El proyecto fue aprobado en 1971, pero fue demorandose hasta 1979 cuando quedo inaugurado.
Muchas de las obras expuestas fueron diseñadas expresamente para el lugar que iban a ocupar en el museo, otras fueron donadas por familiares, teniendo siempre en cuenta su ubicación final.
La colección es una muestra de diferentes tendencias dentro del movimiento abstracto español. Los primeros intentos de ruptura con el academicismo de la decada de 1920, de este movimiento se representan obras de Alberto Sanchez, Joan Miro y Julio González, tras un largo parentesis, posteriormente, recobra fuerza este movimiento con una nueva generación de escultores que unos buscan las distintas tendencias basadas en la geometria como: Rafael Leoz, Pablo Palazuelo, Francisco Sobrino, Gerardo Rueda, Andreu Alfaro, Gustavo Torner y Amadeo Gabino, otra tendencia basada en la busqueda expresiva de los volúmnes y la materia como los artistas: Pablo Serrano, Martín Chirino, Marcel Martí y Eduardo Chillida; el analisis de la escultura dentro del movimiento como son: Eusebio Sempere y José María Subirachs; también estan representados artistas que estudiaban los efectos pictoricos y luminicos, como Manuel Rivera.
