ANDALUCÍA EN MAYO

Día 7 de mayo (miércoles)
Ruta: Madrid-Córdoba

Hoy comienza una nueva aventura camino de Andalucía, queremos visitar en especial la feria del caballo de Jerez de la Frontera.

Al final entre unas cosas y otras nos ponemos en camino a las 17;00 horas. Ya somos conscientes de que no llegaremos a Córdoba hasta entrada la noche.

Poco mencionar, la carretera A4 continúa su deterioro del firme que la hace en muchos tramos muy peligrosa. Han colocado innumerables prohibiciones y limitaciones de velocidad para señalizar las zonas más conflictivas.

Llegamos a Córdoba a las 21:00 horas lo que hace difícil una pequeña escapada para ver algunos de los patios cercanos.

Al final nos quedamos en el parking de Zoo, situado en la calle Linneo (GPS N 37.868818 W4.786758) que está completamente canibalizado por las autocaravanas, es gratuito y no tiene mala pinta.

Siempre pernoctamos en el parking de pago del centro histórico, pero ya supone casi 25 euros diarios, sin apenas servicios, con malas instalaciones y muy inclinado.

En este parking es curioso porque se escuchan los rugidos de leones, barritos de elefantes y el graznido de algunos pájaros. Mañana veremos cómo nos devolvemos desde aquí.

Día 7 de mayo (miércoles)
Ruta: Córdoba-Sevilla

El día comienza en el parking gratuito situado en el Zoo de Córdoba, donde hemos sentido un poco el frescor de la noche.

No podéis imaginar como hemos vivido la noche. Por un momento parecíamos estar en hotel de esos chulos en el parque del Serengueti, parecíamos vivir en el casting de memorias de África. Los sonidos que llegaban del Zoo eran tan próximos que podíamos imaginar los leones rodeando la autocaravana, los guepardos en los arboles y los cocodrilos en nuestra misma puerta, cuando nos despertamos a las 9;00 horas ya estaban todos los animales callados en la cama.

Nuestra primera intención es que queremos dar una pequeña vuelta por los patios de Córdoba.

Para llegar cogemos el bus 2 cercano que nos deja en la plaza de Colón para iniciar la ruta de santa Marina.

El primer patio está en la calle Chaparro 3. Sus dueños son tan desagradables que siempre vemos cómo se encaran con los visitantes. Este año han puesto un cartel que está prohibido fotografiar y grabar en el interior, decidimos no pasar y saltarnos la visita de este patio.

El siguiente patio es uno de los más famosos y siempre premiado, es Marroquíes 6 (GPS N37.8905424 W4.7768388). Tiene una espera de medía hora porque hay varios grupos y colegios.

Para entrar hay que atravesar un pequeño zaguán para entrar en una de los patios más bonitos de la arquitectura popular de Córdoba. Este tipo de construcción tiene una estructura única en la edificación convencional de este tipo de patio-viviendas. En lugar de ser un patio central desde donde se articulan las viviendas, en este caso, se trata de unas viviendas que se van unión mediante la construcción de un patio. El patio en esta ocasión se trata más bien de una galería descubierta que sirve para articular los accesos a las viviendas, es como las calles de un pequeño pueblecito.

En su interior el patio distribuye la vida de veintitrés viviendas que se unen para utilizar unos servicios colectivos para la comunidad de vecinos de forma tradicional y humilde como la cocina, el pozo, los baños, las fuentes y los lavaderos.

La cocina conserva todos sus antiguos utensilios y fogones que han permanecido casi intactos, en su interior tiene un pequeño pozo una pila de lavado y la misma vajilla y accesorios de nuestros abuelos; los tres retretes son igualmente de uso comunitario su entrada se encuentra perfectamente pintada de azul mientras una buganvilla roja les da sombra a los que esperan su turno.

En uno de sus recovecos encontramos el pozo comunitario debidamente protegido por una tapa de madera y revocado en blanco todavía conserva su cuerda y sus cubos de cinc.

Quizás la sala más emblemática y que mayor sabor tiene es el lugar que se empleaba para el lavado comunitario, las grandes pilas de piedra con tablas de madera dominan la sala, aun se puede escuchar el rumor y los comentarios de sus vecinos mientras hacían la colada, sobre las paredes cuelgan los grandes barreños de cinc.

Todo el recinto es un vergel de color en las paredes y los tejados se encaran las buganvillas de diferentes colores, azucenas y jazmines les acompañan, sobre las macetas podemos ver geranios, madreselvas, rosales y gitanillas.

El siguiente patio Tafures 2 (GPS N 37.889696 W4.77452) es otro de lo más bonitos porque es tan reducido y parece mentira que en una cosa tan pequeña nos ofrece los mismos ornamentos de los patios mucho más grandes: su fuente, limonero, ficus, pajareras, tiestos. Todo dentro de una armonía sobresaliente.

El siguiente está muy cerca en la calle Zarco 15 (GPS N 37.8892407 W4.7741978). Este patio participa en el premio de nueva arquitectura.

Este patio la dueña tiene malas formas y te recibe con mala cara. Creo que este tipo de actitudes deben corregirse. Entiendo que somos muchos los que en un día visitamos los patios, pero en su gran mayoría lo hacemos con respeto.

El siguiente en Zarco, 13 (GPS N37.8892383 W4.7739384) después de esperar nos dicen que tampoco nos permiten fotografiar, entrar y salir. No entiendo como se permite la participación en el festival de esta forma cuando lo que ha dado grandeza y publicidad son sus imágenes que han dado la vuelta al mundo.

Seguimos hasta la calle Ocaña,19 (GPS N37.888630 W4.772404). Aquí la dueña nos recibe y no duda en atender con explicaciones todas las preguntas que la gente platea sobre el cuidado de plantas. En el centro tiene un pozo de chapa adornado con limones.

El siguiente patio está en la calle Parras, 6 también son muy agradables y podemos disfrutar de su variedad de plantas.

Para terminar visitamos el patio de los patios fuera del concurso. Es el Palacio de Viana que tiene el patio de entrada gratuito y que nos muestra como pueden ser la colección de patios de su interior, si decides pagar la visita.

Desde aquí volvemos en bus 2 hasta el parking de Zoo donde almorzamos.

Nuestro siguiente destino es en Sevilla donde pasamos la noche

Día 8 de mayo (miércoles)
Ruta: Sevilla-Jerez de la Frontera

La noche la pasamos en Sevilla muy tranquilos aunque la verdad acusamos el cambio de temperatura.

A primera hora de la mañana salimos pitando camino de Jerez de la Frontera donde llegamos en apenas una hora.

No llevamos nada reservado dentro de los posibles parkings, afortunadamente encontramos el área de autocaravanas con plazas libres en Jerez de la Frontera (GPS N36.6916145 W6.160159), situado en el Centro Comercial Alcampo en la calle del Amanecer. El precio por día son 15 euros con todo tipo de servicios (vaciado, llenado, duchas, lavadora), incluido wifi.

Sin mucho conocimiento de los transportes del lugar, pedimos un taxi nos acerca los cuatro kilómetros que nos separan del recinto del Real de la Feria del Caballo (GPS N 36.696846 W6.127099), la entrada por la avenida Alcalde Álvaro Demecq.

Cuando llegamos la feria está en un impase a la espera para recuperar el aliento del día anterior.

Sin quererlo, nos metemos en la primera caseta que vemos, digo que sin quererlo porque las cartas de los menús indican CCOO, sindicato trabajador.

Pedimos dos jarras de rebujitos para entrar en juego, nos acompañan unas patatas aliñadas, unas perlas de pollo, croquetas y unos pimientos verdes.

Estamos súper adaptados al ambiente y parece que es nuestro campo de juego, pero no, es la primera vez que venimos a Jerez.

Cuando aquello empieza a hervir como una cafetera salimos para empaparnos del ambiente y del sabor y olor a caballos.

Regresamos pronto a nuestra casa para preparar el partido del mayor espectáculo del mundo mundial, la semifinal de la champions.

Del resultado no digo nada pero empezamos a preparar la final en Wembley stadium.

Día 9 de mayo (jueves)
Ruta: Jerez de la Frontera

El día comienza en el área de autocaravanas en Jerez de la frontera, lo noche ha sido tranquila, aunque notamos el aumente de temperatura.

Nuestro primer destino es la fiesta del caballo con sus diferentes celebraciones.

Cogemos el bus 9 circular, la parada está situada en la puerta central del Centro Comercial Alcampo (GPS N36.6930964 W6.1584428) que nos lleva hasta el mismo corazón de la feria, para ello, tenemos que recorrer antes todos los extrarradios de la ciudad y no es pequeña. Si quisiéramos coger el bus 8 es el circular en dirección contraria y con destino al centro histórico de Jerez, lo cogemos en la parada de bus situada en la gasolinera del Alcampo (GPS N 36.6920924 W6.1591269).

El evento del día se encuentra en el recinto que está pegado al recinto de la feria se encuentra el pabellón de exposiciones IFECA donde se celebra el concurso de potros de raza, situado en el paseo de Sementales (GPS N 36.6962174 W6.1215511), entrada gratuita.

El evento Concurso Morfológico del Ganado Selecto Caballar de la raza Anglo-árabe, es muy simple, un jurado va evaluando la constitución morfológica de los potros sin montar de 2 a 6 años.

Hubo casi treinta participantes entre las distintas secciones, en una competencia muy interesante y con ejemplares de notable calidad que terminó con las victorias absolutas de Arco, AA, un ejemplar de ocho años de Mónica Vázquez Barba que se proclamó Campeón de la Raza, y Dichosa, AA, yegua de cinco años de Almenara Alta, como Campeona.

Y en otra pista se evalúan las actitudes de los caballos para el Salto en Libertad..

Enseguida se nos echa la tarde encima y regresamos para comer, descansar y acudir a la tarde noche al recinto ferial.

La noche en la feria es otro ambiente, la gente es más mayor con ganas de fiesta. Las casetas son uno de los emblemas más representativos de la Feria y el lugar de encuentro para tomar un buen vino, degustar de una amplía gastronomía y bailar unas sevillanas. Dentro de ellas se respira y se vive el ambiente de la fiesta.

En Jerez existe una gran tradición en la decoración y el cuidado de las casetas, tanto en el interior como en el exterior, con la construcción de portadas alegóricas a monumentos o lugares típicos de la ciudad. Una tendencia habitual también es que las casetas adopten la estética tradicional andaluza.

Cenamos unas croquetas, tortilla, pinchos morunos y montados de lomo. Damos una vuelta para ver el ambiente y regresamos antes de las 24,00 horas.

Día 10 de mayo (viernes)
Ruta: Jerez de la Frontera

El día comienza en el área de autocaravanas de Jerez donde hemos tenido una noche muy tranquila

Hoy es viernes de feria, uno de los más emotivos porque está dedicado al caballo como protagonista.

Salimos en el bus 9 y después de recorrernos media España y 50 minutos nos deja enfrente del Pabellón del Depósito de Sementales (GPS N 36.6964131 W6.1220069), contiguo a la feria.

Hoy se celebra el concurso exhibición Enganches Feria de Jerez. Es la mayor reunión de coches de caballos de época del Mundo.

Es maravilloso admirar cada uno de estos coches, la mayoría son del siglo XVIII y XIX profundamente rehabilitados por manos de artistas expertos, ahora, en manos de las principales familias que tienen relación económica con el caballo.

Después se celebra la entrega del caballo de oro de la ciudad de Jerez, es la primera distinción que otorga la ciudad a instituciones que ayudan en la promoción del caballo español.

La entrega del Caballo de Oro a la Real Hermandad del Rocío de Jerez en un año en el que cumple 50 años haciendo el camino por Doñana y el mismo tiempo en el que los característicos carros de la comitiva rociera jerezana fueron y vinieron por el Coto.. En el acto se produce una recreación del paso por las marismas en su paso en romería camino de Almonte para rezar ante la Virgen de la Blanca Paloma.

Una vez acabado marchamos hasta el centro de Jerez para almorzar en una de sus ventas para comer carne a la parrilla.

Damos una vuelta por la plaza del Alcázar y los restos de la fortaleza árabe.

Desde aquí se pueden ver las bodegas de Tío Pepe y González Byass.

La cúpula de la catedral barroca destaca sobre el horizonte.

Poco más nos espera en un día tan de color y de tan verdadero, como dicen por aquí.

Día 11 de mayo (sábado)
Ruta: Jerez de la Frontera-Puerto de Santamaría

El día comienza en el área de autocaravanas de Jerez de la Frontera donde pasamos una noche fantástica.

Nada más levantarnos hacemos un reset a la autocaravana porque unos pocos minutos después nos marchamos. Pagamos los 45 euros de los tres días que hemos estado y salíamos pintando para el Puerto de Santamaría, son 15 km.

El parking en el Puerto de Santamaría está justo enfrente de la ría, muy céntrico (GPS N36.5991708 W6.2210978), en estos momentos es gratuito.

Lo primero que visitamos es el Monasterio de la Victoria, Monasterio de la Victoria, Av. del Monasterio, 2, 11500 El Puerto de Sta María, Cádiz (GPS N 36.6053685 W6.2219457), fue construido en el siglo XVI, doce años después del descubrimiento de América.

Se hizo muy famoso en época de Franco porque era utilizado como cárcel. En todos los telediarios aparecía porque hasta aquí llegaban los presos más peligrosos del régimen. Solamente escuchar el nombre, entonces, te entraban sudores. Desde aquí se fugó el Lute y redobló su fama nacional.

El Lute había observado durante uno de sus rutinarios paseos por el patio del penal que si conseguía llegar a uno de los tejados de un ala del edificio, el camino hacia la libertad era posible.

Alrededor de la una de la mañana, cuando el alcohol ya hacía estragos entre los presos, comenzaron a abrir hueco en aquella pared, amparados por los sonidos de las carracas y los cánticos del resto.

Alrededor de las cinco de la mañana de ese primer día de 1971 los cinco hombres lograban acceder al tejado, pero quedaba lo más difícil. Después de lanzar una cuerda que quedó enganchada en los muros de enfrente y, sin la certeza de que aguantaría el peso humano, fue Eleuterio el primero en probar. Hasta ese momento la suerte estaba de su lado, pero, al comenzar la maniobra, algo falló. La cuerda no aguantó correctamente el peso, El Lute se desplomó unos metros y en ese proceso varios cristales estallaron, causando un estruendo que no pasó inadvertido para nadie. Varias voces de los guardias alertaron del intento de fuga y rápidamente comenzó un tiroteo hacia la figura de Eleuterio, que trataba de avanzar como podía, colgado de mala manera. Consiguió alcanzar la parte exterior del muro, donde quedó por un momento a salvo de los disparos, y ahí decidió saltar los cinco metros que le separaban del suelo.

Era la noticia que recorría, una vez más, el país. Él por su parte volvía a vivir con esa etiqueta tan familiar de hombre más buscado de España que le llevó a dormir en copas de árboles, barriadas o a pasar varios meses en un colector, de huida en huida entre Jerez, Málaga, Granada y Sevilla.

En la actualidad se quitaron todos los vestigios como cárcel y se devolvió el aspecto de Monasterio.

Marchamos hasta el antiguo Monasterio de san Miguel (GPS N36.6022107 W6.2229191), situado calle Ingeniero Ruíz de la Cuesta, 19, 11500 El Puerto de Sta María, Cádiz, ahora convertido en hotel de súper lujo.

El acceso al convento se realizaba mediante una portada adintelada, flanqueada por pilastras toscanas, sobre cuya cornisa, se ubica una hornacina que cobija la escultura de piedra de Santa Clara. Esta portada da acceso a un pequeño atrio donde se abre la puerta de la Iglesia, la cual presenta unas características muy semejantes a las de su homónima sevillana, en la que aparece la escultura de San Miguel Arcángel.

Tenemos ocasión de ver la parte de la iglesia y del claustro. Como particularidad podemos ver el monasterio lleno de obras de arte, como si las monjas lo hubieran abandonado apresuradamente, cinco minutos antes.

Seguimos andando hasta la plaza de España donde se encuentra la iglesia mayor prioral o Basílica Menor (GPS N36.6001553 W6.2298695). Está cerrada hasta las 18;00 horas.

Aprovecharnos en la plaza para almorzar: paella y cachopo. Nos han comentado que es uno de los mejores sitios, precio, calidad.

Desde aquí marchamos al Castillo de San Marcos (GPS N 36.5964796 W6.2286276), situado en la plaza Alfonso X el Sabio, 3, 11500 El Puerto de Sta María, Cádiz, tiene un buen aspecto exterior pero está cerrado.

El Castillo es muy bonito desde el exterior, con las torres donde se pueden ver escritos, fue ordenado construir por Alfonso X tras la conquista de la ciudad en el siglo XIII.

Enfrente, está el Palacio Arinabar (GPS N 36.5963462 W6.2270246), situado en la plaza Alfonso X el Sabio, 9, 11500 El Puerto de Sta María, Cádiz, ha sido recientemente restaurado por la Junta de Andalucía. De su mobiliario destaca la fachada, el patio central y en el salón el artesonado mudéjar.

Su propietario, Juan de Aranibar y Alberro, natural de San Sebastián y descendiente de familia de origen navarro, vino a El Puerto, como militar y caballerizo mayor del Duque de Medinaceli. Considerado el hombre más poderoso y acomodado de la ciudad, a mediados del siglo XVII, ocupó el cargo de regidor.

De camino nos pasamos por la zona del puerto marinero dedicada actualmente a la restauración. Tiene la bonita Fuente de las Galeras (GPS N36.5977873 W6.2252313), situada Pl. de las Galeras Reales, 1, 11500 El Puerto de Sta María, Cádiz.

La importancia de esta fuente radicaba en que, antes de partir hacia América, la Flota de Indias se abastecía de agua fresca y potable. Se construye esta fuente en el siglo XVIII, para adornar la ciudad por la visita del rey Felipe V y su esposa Isabel de Farnesio.

La Plaza de las Galeras en Cádiz debe su nombre al hecho de que durante siglos fue el lugar donde se ubicaba el astillero de galeras de la ciudad. Las galeras eran embarcaciones de guerra propulsadas por remos que se utilizaron ampliamente en la Edad Media y la Edad Moderna. Eran barcos de guerra ágiles y maniobrables que desempeñaron un papel importante en la defensa de las costas y en las operaciones navales de la época.

Volvemos hacia la plaza de España para ver el interior de la iglesia. Tenemos mucha suerte porque se está celebrando un bautizo y nos permiten ver la iglesia totalmente iluminada.

La portada del Perdón y la gran portada historiada, es de estilo manierista. En los extremos dos grandes columnas que imitan al templo de Salomón.

En el centro santa María del Mar, acompañada de apóstoles. Está coronada por las virtudes: fe, esperanza y caridad.

Se trata de una Iglesia del siglo XV, que fue promovida por los Duques de Medinaceli, en el año 1636 se produjo un terremoto que derrumbó la nave principal del templo, se reedificó pero aún hoy se pueden ver restos del templo original en la fachada, es muy interesante, dentro se puede ver la imagen de la Virgen de Los Milagros, patrona de la ciudad, merece la pena la visita, la puerta lateral es de gran belleza.

De planta de tres naves, la central más alta que las laterales. La nave central tiene elementos barrocos, como el friso, almohadillado de las pilastras, etc. El coro es del siglo XVII y el Altar Mayor estaba decorado con un gran retablo gótico que fue sustituido en el siglo XVIII por el templete de estilo neoclásico, además de la balaustrada y la escalinata, obra realizada por el arquitecto portuense Torcuato Benjumeda, que verdaderamente desmerece.

Solamente nos queda regresar al parking donde pasamos la noche.

Día 12 de mayo (domingo)
Ruta: Puerto de Santamaría-Córdoba

El día comienza en el parking, en estos momentos gratuito, del Puerto de Santamaría.

Madrugamos porque tenemos intenciones de llegar a Córdoba poco después de las 11, 00 de la mañana.

Llegamos a las 12 al parking del Zoo, hoy es domingo y está lleno. Nos desplazamos hasta el parking del Centro Histórico (GPS N 37.8752603 W4.7873431), está casi vacío, ahora el precio son 23;5 euros diarios.

Desde aquí todo es más fácil porque solamente tienes que cruzar la calle y estás en la puerta de Sevilla.

Nuestra intención es visitar los patios de la zona San Basilio, pero las colas en los patios son muy grandes, nunca habíamos visto nada igual. Decidimos dejar los patios para la tarde y navegar por Córdoba sin rumbo fijo.

Paseando por la calle de San Basilio donde se encuentra la iglesia de Nuestra Señora de la Paz (GPS N 37.8761406 W 4.7841423), a sus puertas la Hermandad de la Pasión han sacado la imagen de la Virgen del Amor.

La imagen de María Santísima del Amor es una talla de candelero para vestir, realizada en madera policromada de 1,70 metros de altura. Desde antiguo, fue conocida bajo la advocación de Virgen de los Dolores, pero cuando pasó a formar parte de la Hermandad de Pasión, comenzó a ser venerada en su advocación actual.

Aunque no documentada, la Imagen de María Santísima del Amor ha sido atribuida históricamente a la escuela granadina y fechada también hacia finales del siglo XVII. Actualmente, hay corrientes que se inclinan más por una atribución a talleres de imaginería local y a una fecha de ejecución más tardía, hacia la primera mitad del siglo XVIII.

Lo que más llama la atención de la escultura es el rostro pues se representa dotado de una dulzura y belleza, con unas facciones finas y mesuradas, que la alejan del patetismo forzado de otras dolorosas.

Entramos en el centro histórico por la Judería, es quizás la mejor esencia del sabor cordobés. Las calles estrechas, todas blancas donde el sol y el cielo son difíciles de ver.

Sin quererlo aparecemos ante la capilla de san Bartolomé (GPA N37.8795876 W4.7848711), situada calle Averroes, s/n, Centro, 14004 Córdoba. Precio entrada: 2 euros. Es una verdadera joya que poca gente tiene la oportunidad de descubrir.

Un patio con dos arcos dan la bienvenida a la iglesia levantada sobre un minarete de una de las mezquitas.

En su interior podemos descubrir los trabajos de los mejores artesanos mudéjares que había en Córdoba. Un friso de cerámica musulmana acompaña a un texto en lengua árabe y sobre las paredes la mejor colección de yeserías, después de la Alhambra de Granada.

Continuamos andando hasta el patio de la mezquita de Córdoba para entender cómo era esa mano de obra que tanto apreciamos.

La tarde la empleamos en descubrir los patios de san Basilio. No se puede decir que sean los mejores pero si los más visitados.

Comenzamos la visita al festival de patios por el barrio de San Basilio en el patio de la Calle Duartas, afortunadamente algunas veces tenemos ocasión de encontrar a los dueños que quieren ensalzar su perfecto patio fruto de sus esfuerzos y de sus continuos riegos.

El patio de la calle Duartas núm. 2 (GPS N37.8747483 W4.7852222), es una casa particular que solamente se abre en contadas ocasiones, tiene una zaguán ornamentado donde se mezcla lo popular, lo religioso y lo privado. Donde se exponen copias de cuadros de Julio Romero, la máquina de coser Sigma o una copia de la Virgen de la Cabeza, además de un mobiliario rustico pero a la vez romántico.

El patio es sencillo y pequeño pero tiene una eclosión de especies que le hace muy variopinto, donde hay una combinación de árboles frutales –naranjos y limoneros– y una amplia variedad de tiestos con flores que abarca desde los típicos geranios, gitanillas, claveles, jazmines, clavelinas, dalias y rosales. El patio está dividido en una especie de parterres donde combina los elementos de barro con el forjado metálico.

En la calle posterior se encuentra nuestra segunda parada el Patio de Postrera 28 (GPS N37.8747743 W4.7855535). Es uno de los clásicos porque abre durante todo el año.

Se considera que es uno de los patios más antiguos, se estima que pudo construirse en el siglo XVI, durante este tiempo se ha conservando, en gran medida, su aspecto original, como son las vigas de madera del techo. Atravesando el oscuro zaguán, lleno de cachivaches antiguos, entramos en el pequeño pórtico que se abre al patio, de reducidas dimensiones, encontrándose la pila lavadero a la izquierda y sus habitaciones a la derecha. El cuidado durante todo el año es patente por la presentación y el esmero de las plantas, desde las tradicionales gitanillas y geranios hasta los bellos claveles, helechos, jazmines, pendientes de la reina o frescas matas de menta.

Nuestra siguiente parada es el Patio de San Basilio núm. 44 (GPS N37.8753913 W4.785308), siempre está abierto y merece siempre una visita por los cambios de flores de año en año.

En la portada hay un azulejo que nos anuncia que este patio es la sede de la Asociación de los Amigos del Patio de Córdoba. Nada más entrar nos sorprende la belleza tan especial que desprende este patio, dispone de una arquitectura única, principalmente porque están representados todos los elementos tradicionales de la Casa Patio de Vecinos de Córdoba que es muy parecido a lo que significaban las corralas en Madrid.

En su interior, destaca una escalera central que une el patio con la primera planta, tres de los cuatro lados tiene unas galerías bajo soportales, están apoyados en pilares de piedra encalados, el suelo del patio es de piedras de río del tipo cordobés. En un lateral se encuentra el pozo encalado medio cubierto de una extensa hiedra que se alarga por todo el patio, destaca el cubo de metal oxidado que seguramente ha servido para sacar el agua por medio de la maroma y el cabestrante. Un doble fregadero con una tabla de madera aseguraba las críticas a los vecinos durante los duros trabajos de las coladas diarias. De las paredes cuelgan cuadros con los ojos de la mujer cordobesa, ojos grandes y endrinos de India Brava que pintaba Julio Romero de Torres, están prácticamente tapados por “el geranio” que es el verdadero protagonista de este patio. Las macetas son azules añil que destacan aun más con las flores rojas y la luz artificial de la noche, las buganvillas disputan el espacio a los geranios. Una de las viviendas tiene en la entrada un mueble con tres cantaras de agua y sobre la pared un espejo envuelto entre varios tiestos rojos con pequeñas flores rosas, una silla de madera nos identifica la importancia de los patios y este rincón es como un patio propio interior dentro del patio general.

El siguiente patio esta en la misma calle de San Basilio núm. 40 (GPS N37.8754881 W4.784995). Es otro de los patios más clásicos de la zona.

La antigüedad del patio se estima que tiene 400 años. Es una casa habitada considerada como un verdadero museo. El pozo es de época árabe y puede tener 800 años de antigüedad, profundidad de al menos 18 metros está acompañado en la habitación con una bonita colección de objetos etnográficos. Las macetas destacan por su colorido especial, verde malaquita con azul añil.

Seguimos andando por la calle de San Basilio y en el número 22 (GPS N37.8763968 W4.784192) se halla otros de los clásicos. En estos momentos no hay mucha gente y nos permite hacer un pequeño recorrido.

Nos encontramos un patio bastante reformado aunque se han conservado los elementos populares de las antiguas casas patios de múltiples viviendas, su antigüedad se desconoce aunque a la entrada tiene una imponente reja que está marcada la fecha de 1898. En la actualidad es propiedad de un solo dueño Ana de Austria Bogallo que adquirió la totalidad del edificio, aunque ha conservado los servicios básicos comunes de las ocho viviendas. Se accede a través de un zaguán y un pórtico y ante nuestros ojos se abre una inmensidad de macetas de color verde colgadas de las paredes con geranios, rosales, pensamientos, gitanillas, jazmines y la dama de las noches. En diferentes lugares del patio se asoman pequeños árboles como un limonero, un níspero y una palmera.

El pavimento del patio es del tipo de cantos rodados cordobeses realizado recientemente con un escudo nobiliario. En uno de los laterales tiene un doble arco con una fuente y una pila de lavado, en un lateral tiene el pequeño pozo de brocal encalado todavía conserva su aspecto popular con la antigua polea de cuerda y el cubo de cinc a su lado colgando de un hierro y a la sombra, podemos ver la estampa popular del típico botijo.

El siguiente patio se encuentra en la casa contigua San Basilio núm. 20 (GPS N37.8765353,-4.7838596 ).

El patio destaca por sus plantas con una profusión de hiedras y flores decoran las paredes de este patio. Es uno de los patios más elegantes de la ciudad con todas las decoraciones típicas de este tipo de patios: su fuente y objetos decorativos están integrados con la arquitectura de la casa.

El patio, rodeado de seis arcos forjados y acristalados, está hecho respetando la arquitectura cordobesa, incluido el pavimento de chino cordobés. Predominan, junto al nuevo limonero en espaldera, capiteles, basas y fustes de piedra de estilo romano y musulmán.

El brocal del patio es de estilo musulmán realizado en arcilla, tiene muchos restos de objetos arqueológicos de época árabe.

El siguiente patio se encuentra en la acera contraria San Basilio núm. 17 (GPS N 37.8766134-W4.7837814).

En la zona del Alcázar Viejo se encuentra este patio que participa desde hace años de forma tradicional, se accede por un zaguán con un pavimento de cantos rodados cordobeses, el interior tiene dos galerías, una con arcos de ladrillo sujetados con columnas de arenisca y la de enfrente es una voladizo de madera. Sobre las paredes se cuelgan numerosos ornamentos de carácter popular de cerámica uno hace referencia a uno de los pasajes del Quijote, citas de toreo, una bonita colección de benditeras para guarda el agua bendita a la entrada y la salida de la casa. Las macetas están sin pintar y nos ofrecen una amplia colección de geranios. El pozo esta tomado por las plantas pero aun conserva su antiguo semblante con una polea de cuerda y un cubo de madera. En una de las esquinas esta otro de las partes del patio tradicional la pila del lavadero.

La casa además del patio compite por la decoración del enrejado y de los balcones de la calle principal, durante muchos años ha conseguido números premios, en este año es espectacular, consiguiendo una cascada de flores que tapan completamente las ventanas de la casa.

El siguiente patio se encuentra en la casa contigua San Basilio núm. 15 (GPS N37.8766501-W4.7837336 ).

Es una casa nueva fue reconstruida en 1993, sobre una antigua taberna de la calle San Basilio. La nueva casa conserva herrajes y restos arqueológicos existentes que están expuestos, decorando el patio actual.

Es un patio singular porque es el único pentagonal del concurso, tiene un pavimento de mármol y la blanca entrada o las inmaculadas paredes. Así, y en esta atmósfera tan luminosa aún en el más oscuro de los días de invierno, resulta muy complicado y hay que escoger muy bien qué plantas de verde y de color hay que disponer en el recinto.

Nos recibe dos grandes cestas de limones y naranjas. Tiene un helecho del zaguán que ya tiene su medio siglo de edad. Se exponen varios ejemplares de minerales porque los dueños son aficionados a la mineralogía, sigue incrementando una peculiar colección. No se trata de antigüedades típicas, aunque algunas piezas tengan millones de años: son rocas de cuarzo recogidas exclusivamente en la Sierra de Córdoba. Cristal puro para el más cristalino patio.

El siguiente patio se encuentra en la acera contraria San Basilio núm. 14 (GPS N 37.8768521 W4.7836329). Dentro de la ruta Alcázar-Viejo

Una puerta de madera nos conduce al pequeño zaguán de entrada, adornado con numerosas macetas. Un pórtico compuesto por tres arcos soportados por columnas de piedra nos da la bienvenida al patio. Dentro del propio pórtico se eleva una pequeña y empinada escalera que conduce al segundo piso. Los arcos están pintados de amarillo crema para diferenciarlos del blanco de las paredes.

El patio está adornado por cuantiosas macetas de color rojo carruaje, más de 600, que cubren casi totalmente el blanco de las paredes, pero que les da un gran colorido al lugar, destacando, entre otras, las siguientes plantas: geranios, costillas de Adán, esparragueras, gitanillas, helechos, cintas, pilistras…

Tiene suelo de cemento que fue sustituido por el antiguo enchinado cordobés. Las habitaciones están dispuestas a su alrededor. De entre estas habitaciones podemos acceder a los antiguos lavaderos, los cuales parecen que no ha pasado el tiempo por ellos, ya que conservan casi intactas sus pilas de lavar, pero además esa habitación es como un pequeño museo, que conserva las antiguas planchas y llaves colgadas por sus paredes.

La antigua cocina comunitaria también llama mucho la atención del visitante, pues contiene todo tipo de utensilios, como si de un museo rural se tratase: molinillos de café, planchas para la ropa, candiles, braseros, tenazas…

Tomando la primera calle a la izquierda llegamos al Patio de Martín Roa, 2 (GPS N 37.8770099 W4.7837254).

En la zona del Alcázar Viejo se encuentra el patio en la calle Martín Roa, 2, es quizás el patio más abigarrado de todo Córdoba con una altura de casi nueve metros, sus macetas son de color azul y destacan sus geranios y gitanillas de color rojo.

El patio tiene la particularidad que esta adosado a una parte del lienzo de la antigua muralla árabe construida en tapial con tierra y piedra prensados donde se aprecian los agujeros que dejaban durante la construcción los andamios de madera y que en Marruecos son utilizados para que aniden los vencejos, aquí están tapados para que los pájaros no manchen el patio.

Tiene forma irregular para salvar los restos de la muralla y dar acceso en varias partes a la vivienda, el pavimento es de piedras cordobesas imitando a mosaicos romanos, en sus paredes se decoran con elementos populares, platos cerámicos decorados, vasijas de cerámica y cantaras de agua.

El siguiente está en la misma calle en la acera contraria, Patio de Martín Roa núm. 7 (GPS N37.8771805 W4.7840327).

En la zona del Alcázar Viejo se encuentra en la calle Martín Roa, 7 en realidad son dos patios con una configuración bien diferenciada, en total todavía viven trece vecinos, de una condición muy modesta y con unos alquileres muy bajos pero con mucho ahínco y mucho esfuerzo hermosean año a año sus plantas para exhibir uno de los patios más tradicionales, más populares y mejor expuestos de todo el festival de primavera.

Sin más preámbulo atravesamos el zaguán que nos adentra en el patio de Martín Roa en el numero 7, es ocupado por varias de sus inquilinas que nos presentan con mucho fervor el trabajo de todo el año, aun se conservan los servicios comunes, dos pilas de piedra para el lavado con sus barreños de cinc que parece que han sido usados esa misma mañana, el patio es de canto rodado pero se diferencia de los anteriores porque en este las piedras son de varios colores y carece de cualquier tipo de decoración.

El patio tiene elementos constructivos musulmanes del mismo tipo que podemos encontrar en los actuales patios de la ciudad de Xauen (Marruecos). Los paramentos verticales son irregulares y están decorados con macetas sin pintar con geranios y gitanillas, una caña con una goma consiguen unirse y con mucha puntería poder llevar el agua hasta las zonas más altas de la pared y que por inundación y goteo va regándose de arriba abajo. El pozo es el otro de los elementos que no puede faltar en este tipo de patio, este es muy antiguo y se encuentra encalado, todavía conserva la polea de cuerda y un cubo primitivo de goma.

La vida comunal era una de las características de este tipo de viviendas patio, aunque aún los vecinos guardan una profunda relación de comunidad pero los elementos constructivos comunes como el baño, la cocina y el lavadero están en desuso.

Una de las propietarias nos cuenta que el edificio era propiedad de un Conde que al morir sus hijos pasaron sus propiedades a la administración de la iglesia que utilizaba estas viviendas para atender las obras social y de caridad de la parroquia, ante la falta de inversiones y de mantenimiento mínimo del patio y de las viviendas el ayuntamiento se hizo cargo de la propiedad produciéndose una profunda rehabilitación y manteniendo un uso y unos alquileres sociales a cambio de una dedicación importante para conservar este tipo de viviendas y su presentación a los concursos y festivales.

El siguiente está en la misma y compartiendo entrada con el anterior se encuentra el Patio de Martín Roa núm. 9 (GPS N37.8771805 W4.7840327).

En la zona del Alcázar Viejo se encuentra en la calle Martín Roa, 9. Atravesando el zaguán de entrada sirve de distribución para el patio contiguo en el número 9 de la misma calle Martín Roa, entrar en este patio es adentrarse en una plaza de un pueblo de Andalucía, las macetas son tantas que apenas hay un espacio libre para que destaque el blanco de su encalada fachada, predominan los colores rojos y rosas de geranios y gitanillas.

En uno de sus extremos hay una escalera que ofrece uno de los rincones más bonitos del patio, es la entrada a la casa de Manuel que nos cuenta los trabajos tan arduos durante todo el año de todos los vecinos para que el mes de mayo florezca con todo su esplendor.

Terminamos otra vez en la Judería para pasear por sus calles estrechas y en estos momentos casi desiertas, cuando la tarde se apaga entre las sombras de otra época.

El barrio de la Judería se separó del resto de la ciudad por un recinto amurallado que aislaba a sus habitantes, al tiempo que los protegía de las iras de los cristianos. Sabemos que una de las puertas de este recinto era la del Malburguete, ubicada frente a la Mezquita- Catedral, al inicio de la actual calle Judería. Pero no todos los judíos habitaban en este barrio. Reducidos al principio a éste, muy pronto, a partir de 1260, algunos de ellos se instalan en zonas próximas y, posteriormente, en lugares comerciales dentro del barrio de San Salvador –donde se asienta hoy el Ayuntamiento-, y de San Andrés, junto a la parroquia de San Nicolás de la Axerquía -en la Ribera- e incluso al norte de la ciudad en los alrededores de la Puerta Osario, el campo de la Merced y el barrio de Santa Marina, lo que muestra que se podían mover con facilidad por la ciudad. A lo largo de los siglos, los sefarditas también vivieron en otras zonas de la ciudad.

Alfonso X el Sabio autorizó en 1272 la ocupación de otros barrios de la ciudad por judíos, creándose la Judería entorno a la Mezquita que hoy conocemos. El corregidor Francisco Valdés trasladó en 1478 a los judíos hasta el barrio del Alcázar Viejo. Sin embargo, la comunidad judía reclamó ante el Rey y logró volver a su antiguo recinto un año más tarde. Junto a la puerta de Osario, llamada Bab al-Yahud (Puerta de los Judíos) antes de la conquista cristiana, se encuentra la iglesia de San Miguel, en cuyo interior se ha localizado una inscripción hebrea. La inscripción es un cipo funerario procedente de un cementerio judío, reutilizado en la construcción del templo, situado en el ábside central, el del presbiterio, en el lado del Evangelio. Pese a la dificultad de lectura por el deterioro de la pieza, según el experto Jordi Casanovas, la inscripción, de sólo tres líneas, viene a decir: “Meir hijo de rabí G..... Descanse su alma en la vida eterna”.

La judería de Córdoba es la mejor conservada de Europa, sus callejuelas encaladas que sostienen el peso de la historia, patios y plazas, entidades que mantienen viva la herencia judeoespañola, sabores sefardíes.... El barrio de los judíos es una hermosura locura capaz de desarmar al más impasible de los viajeros.

En una de las pequeñas plaza de la judería de Córdoba se encuentra la estatua de Maimónides cuya escultura de bronce preside la plaza de Tiberíades. Por inercia y sin saber muy bien por qué, muchos se empeñan en mesar su perilla y tocar sus babuchas. Son los que desconocen que están ante la figura más importante del judaísmo andalusí: el Sefardí. Un insigne filósofo, médico y rabino cordobés al que, como muchos afirman, se le atribuye la expresión “mantenerse en sus trece” porque, en su afán por sintetizar el judaísmo y simplificar la vida de los seguidores de la ley de Moisés, redujo a 13 los 613 preceptos de la Torá.

Aun tenemos tiempo de visitar el último de los patios porque este año cierran a las 22,00 h., situado en la calle Judíos núm. 6 (GPS N 37.8803567 W4.7837827).

Este patio es uno de los más antiguos de Córdoba con más de tres siglos tiene una medidas muy reducidas y destaca en sus paredes por la enorme cantidad de macetas de color rojo que contiene geranios, rojos, blancos y rosas. Tiene un suelo de losa y en las paredes está rodeado el perímetro de un zócalo de cerámica marrón y blanco. En el centro del patio encontramos una fuente con forma de estrella pentagonal.

En uno de los laterales se levanta una galería porticada que da entrada algunas de las estancias de la casa decorada con utensilios populares, como calienta camas de bronce, atizadores de hierro forjado, molinillos de café, tejas pintadas, etc.

En la misma calle y justo enfrente se encuentra la Bodega de Guzmán (GPS N37.8803567 W4.7837827). Uno de esos lugares q te transportan al pasado, un poquito rancio pero q su historia nos enseña cosas nuevas y nos hacen olvidar cualquier pega q nos podamos encontrar.

El local, nada más verlo, invita a que entres porque crees que ese tipo de sitios antiguos y populares son los que gustan.

Este lugar irradia historia y tradición. La carta es una delicia para los amantes de la comida y la cultura local, con una variedad de platos a precios sorprendentemente asequibles.

Solamente nos queda seguir por la calle de Judíos para salir del Centro Histórico por la puerta de Almodóvar, de aquí al parking de autocaravanas son 5 minutos andando.

Día 13 de mayo (lunes)
Ruta: Córdoba

El día comienza en el parking del llamado Centro Histórico, situado justo enfrente de la puerta de Sevilla.

Lo primero que hacemos con la fresca es visitar el cementerio que está a nuestro lado. Es una de las paradojas de Córdoba que el cementerio recibe el nombre de nuestra señora de la Salud, la Virgen se mostro la primera vez en un pozo donde se levantó la ermita.

Nos llevamos una gran decepción porque este invierno sufrió un tornado y arrasó un número importante de tumbas, quizás las más bonitas y antiguas. No podemos abandonarlo sin visitar al famoso torero Manolete, siempre me dice lo mismo: perdona que no me levante.

Nuestro plan del día es abandonar este parking son 23,50 € diarios y trasladarnos al parking del zoo que es gratuito (GPS N 37.8692568 W4.7889867).

Afortunadamente cuando llegamos tenemos suerte y hay sitio para nosotros, aunque imaginamos que está noche viajaremos al Parque Nacional de Kruger.

Seguir en Córdoba fuera de la fiesta de los patios tiene sentido porque ahora el Cabildo ha creado la Ruta de las iglesias Fernandinas, por un precio de 5 euros puedes verlas todas.

El programa de las iglesias Fernandinas es una oportunidad única de ver ciertas iglesias que están en zonas de Córdoba donde los fieles no acuden, pero están llenas de obras de arte. Además, el resto de iglesias de la misma época disponen de un programa de puertas abiertas.

En el horario de mañana podemos ver tres iglesias fuera del programa y otras tres dentro de la ruta.

La mayoría de las iglesias Fernandinas fueron levantadas sobre mezquitas, aunque solamente se conservan las improntas de los minaretes y algunos arcos.

Comenzamos la visita de la ruta por una de las iglesias que no está en el programa aunque es fernandina san Juan y Todos los Santos Trinidad (GPS N37.8827101 W4.7917479), situada en la plaza de la Trinidad, Centro, 14003 Córdoba.

La iglesia se encuentra en el lugar estuvo el convento y la iglesia de la Trinidad que fue una fundación del rey Fernando III de Castilla en el siglo XIII. El edificio que se conserva, de arquitectura barroca, data de los primeros años del siglo XVIII.

El convento de la Trinidad fue en su origen una de las fundaciones del rey Fernando III pero de aquel edificio no se conserva nada. El templo actual —de arquitectura barroca— data del año 1710. La planta es de cruz latina, de una sola nave, con un crucero de dimensiones reducidas, muros bastante altos cubiertos por bóveda de cañón y lunetos con ventanas. Sobre el crucero se alza la cúpula que descansa sobre pechinas. Tiene un coro a los pies, también cubierto de bóveda de cañón en cuyos laterales se abren lunetos decorados con pinturas murales de temas vegetales y heráldicos.

La siguiente iglesia que hacemos una parada San Nicolás de la Villa (GPS N37.8845988 W4.7845902), situada en la plaza de San Nicolás, Centro, 14003 Córdoba.

La iglesia fue fundada y se remonta al siglo XIII, constituyéndose como una de las iglesias fernandinas. Se conserva la primitiva estructura del gótico-mudéjar con planta casi cuadrada, de tres naves sin crucero. Posee una de las torres más bellas de las iglesias fernandinas, de forma poligonal y realizada sobre un alminar.

Otra de las particularidades que tiene se puede observar en la nave central más profunda, alta y ancha que las laterales, está cubierta con armadura de madera, con tirantes de forja, compuesta bajo los postulados manieristas. Esta cubierta es de un valor artístico sobresaliente pero si queréis ver la original del siglo XIII podéis contemplarla en la sacristía a escasos metros sobre nuestra cabeza. Es fantástico el diseño y lo bien conservada que está. Otra de las maravillas que descubrí en esta iglesia está en un pequeño cuadro que también está en la sacristía y que es la representación del Cristo crucificado y Dios padre sobre un fondo dorado de sobre un pequeño cuadro en forma de cruz. Una "pequeña" maravilla. Finalmente otro detalle arquitectónico que hay es una escalera de caracol que sirve de acceso a una de las torres traseras. Un gusto ver su tallado en piedra y lo perfecto de su diseño. Todo un descubrir es el pasear por este templo.

La siguiente iglesia que vemos San Miguel Arcángel (GPS N 37.8853257 W4.782818), situado en la plaza de San Miguel, s/n, Centro, 14002 Córdoba.

Aunque su construcción actual es del siglo XIII, pero denota un estilo barroco, cuenta con una fachada muy ornamentada, con detalles en piedra y una torre campanario en la esquina derecha. En su interior se pueden admirar diversas obras de arte religioso, como retablos, esculturas y pinturas.

Uno de los aspectos más destacados es su capilla mayor, donde se encuentra el altar mayor, que es de estilo neoclásico y está presidido por la imagen del Arcángel San Miguel. Además, en la sacristía se conservan diversos objetos religiosos de gran valor, como casullas, cálices y relicarios.

La parroquia de San Miguel Arcángel también es conocida por su patrimonio musical, ya que cuenta con una importante coral que ha interpretado diversas obras musicales en diferentes eventos religiosos y culturales.

En resumen, la parroquia de San Miguel Arcángel de Córdoba es una de las joyas arquitectónicas de la ciudad, que además de su belleza artística,

Pasamos por Convento de San Rafael o de las Capuchinas (GPS N37.8855679 W4.7790592), situado en la plaza de Capuchinas, 3, Centro, 14001 Córdoba

El interior del templo tiene una iluminación escasa y apenas se puede disfrutar de sus retablos y pinturas. Por lo contrario, el claustro suele estar abierto al público todas las mañanas siendo este de gran belleza. Además, muy interesante, arqueológicamente hablando, contemplar de cerca los capiteles de época romana e andalusí que componen el patio. Conserva su suelo original de enchinado cordobés y tiene diferentes retablos cerámicos, como el de la Virgen de Luna, Patrona de Villanueva de Córdoba y Pozoblanco.

La primera de las iglesias de la ruta oficial fernandina Iglesia de San Francisco y San Eulogio (GPS N37.8814348 W4.7772597), situada C. Compás de San Francisco, 0, Centro, 14003 Córdoba.

Una de las iglesias fernandinas de Córdoba, ya que cuando el rey Fernando III de Castilla conquistó Córdoba el 29 de junio de 1236, día de San Pedro y San Pablo. Motivo por el cual el rey fundó el convento de San Pablo, para los dominicos; y el de San Pedro, para los franciscanos, por lo que su nombre derivó de convento de San Pedro el Real hasta la actual iglesia de San Francisco. La amplia reforma que sufrió la iglesia en el siglo XVIII modificó su fisonomía medieval por otra barroca, poseyendo una importante colección de pinturas de artistas cordobeses del siglo XVIII.

Antiguo convento que perteneció a esta congregación hasta las desamortizaciones españolas del siglo XIX, en las que pasó a ser una fábrica de tejidos.

El claustro se derribó parcialmente, siendo sus materiales reutilizados para la construcción del Hotel Suizo en la actual plaza de las Tendillas y los mármoles para una casa solariega en Écija. El claustro fue urbanizado y convertido en plaza pública, llamada de la Tierra Andaluza, en 1982 está compuesto por dos pisos de arcadas, correspondiéndose dos arcos del piso superior con uno del piso inferior. Los arcos son de medio punto y se apoyan sobre columnas de capiteles toscanos. También es un recuerdo de su antiguo papel como convento la existencia de un compás, es decir, un espacio que antecede a la iglesia.

La iglesia se albergan dos hermandades: La Hermandad del Huerto y La Hermandad de la Caridad, además de ser sede de la hermandad filial de la Virgen de la Cabeza.

A las 14;00 horas terminan las visitas de la mañana. Nosotros aprovechamos para comer en la Taberna los 3 califas (GPS N37.8813001 W4.7760468), situada en la calle de San Fernando, 65, Centro, 14003 Córdoba, por 11,90 euros nos ofrece la posibilidad de comer platos cordobeses.

A las 15;00 horas estamos en la primera iglesia de la tarde, Basílica de San Pedro (GPS N 37.8826917 W4.7730588), situada en la de San Pedro, 1, Centro, 14002 Córdoba

Se tiene constancia de la construcción de un templo en este mismo lugar en el siglo IV para albergar los restos de los mártires cordobeses Januario, Marcial y Fausto. Siglos después y tras la conquista de Córdoba por parte de Fernando III, entre finales del siglo XIII y principios del siglo XIV, se construye sobre las ruinas del antiguo templo una iglesia dedicada a San Pedro.

A pesar de tratarse de una de las iglesias fundadas por Fernando III el Santo, su aspecto no presenta algunas de las características propias de la época de su construcción, sino que es el resultado de numerosas reformas de las que ha sido objeto.

Se conservan dos de las portadas medievales, así como parte de la torre, en las que se refleja el estilo mudéjar. Hernán Ruiz II construyó una nueva portada en 1542 debido al mal estado de la original. En el año 1575 se halla en el subsuelo del templo los restos de los Mártires San Acisclo y Santa Victoria, los dos santos patronos de Córdoba. En su interior cabe destacar el retablo de la Capilla de los Santos Mártires realizado por Alonso Gómez de Sandoval y comenzado en el año 1742, así como el retablo mayor, de Félix de Morales.

A finales del siglo XIX, el arquitecto municipal Pedro Nolasco Meléndez proyecta la realización de unas habitaciones que se adosan al templo.

En el año 1986 el templo es cerrado para su rehabilitación que comienza, pero que se interrumpe en breve. En el año 1993, se produce el desprendimiento de varios elementos de las cornisas. En el año 1994, la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y el Obispado firman un acuerdo para la finalización de las obras, produciéndose la reapertura del templo en el año 1996.

La siguiente es la iglesia San Andrés Apóstol (GPS N37.886219 W4.7730609), situada en la plaza de San Andrés, 0, Centro, 14002 Córdoba.

Después de cinco siglos de invasión musulmana, con la caída del Califato, las luchas entre diversa facciones musulmanas propiciaron la Reconquista de la ciudad por Fernando III el Santo en 1236.

Aparte de otras pruebas históricas, la presencia de las Iglesias Fernandinas, entre ellas ésta de San Andrés, constituye una de las mejores muestras del enorme esfuerzo realizado para estructurar nuevamente la ciudad, y del protagonismo desempeñado por la doctrina y cultura cristianas en su conformación. Esta realidad histórica aún persiste en la Córdoba actual, incluso en cuanto a organización territorial y a la dinámica de los barrios, herederos de la configuración diseñada por Fernando III

Tras las capitulaciones (rendición de la ciudad sitiada), Fernando III entra en Córdoba manifestando, por encima de objetivos militares, su interés en devolver al pueblo cristiano el disfrute y la firmeza de la fe arrancada por el Islam. En 1241, el Rey entregaba el Fuero, organizando la ciudad en catorce collaciones (barrios), siete en la Villa (antigua Medina musulmana) y siete en la Ajerquía. Al frente de cada una de ellas, una parroquia asumía su tradicional responsabilidad como centro dinamizador de la vida del barrio. A esta tarea se sumaron las diversas Órdenes Religiosas que se establecían en Córdoba para desempeñar labores asistenciales, espirituales y formativas.

La arquitectura de las Iglesias fernandinas revela una singular convivencia entra la estética románica, gótica y mudéjar. Estas construcciones que, en algunos casos se realizan sobre solares de mezquitas precedentes, evidencian influencias burgalesas y cistercienses, reelaboradas con estilo propio.

En Córdoba se establece un modelo específico de edificios de tres naves sin crucero, separadas por arcadas apoyadas en pilares con columnas, con muros de sillares de piedra “a soga y tizón”, cubiertas de madera, ábsides abovedados y rosetones que acabarán convirtiéndose en símbolo de la ciudad.

San Andrés no se edificó sobre ninguna mezquita. Varios indicios aclaran que esta Parroquia se estableció sobre la Basílica visigoda de San Zoilo, un auténtico centro cultural en el que se veneraban los restos del mártir cordobés de época romana.

La siguiente iglesia es de Santiago (GPS N37.881821 W4.7711491), situada en la calle de Agustín Moreno, 26, Centro, 14002 Córdoba.

Sus orígenes se remontan a 1236, cuando el monarca Fernando III conquistó la antigua capital de al-Ándalus y dividió la ciudad en catorce colaciones o barrios, sustituyendo a diversas mezquitas, que fueron conocidas como iglesias fernandinas, cuyos elementos comunes son generalmente un estilo gótico mezclado con elementos mudéjares. Sin embargo, la construcción de la nueva iglesia sobre la antigua mezquita de este lugar no comenzó hasta 1260, durante el reinado de Alfonso X, y se prolongó durante siglos. En el siglo XV se edificó la capilla existente en la nave de la Epístola (derecha), reformada en el siglo XVII, y cuyas pinturas murales conservadas en el ábside datan de finales del siglo XV.

Durante los siglos XVII y XVIII se transformó el ábside de la nave del Evangelio (izquierda), mientras que el artesonado de la nave central se restauró a finales del siglo XVIII y principios del XIX, cuya remodelación cambió radicalmente la apariencia del templo.

La siguiente iglesia que visitamos es de Nuestra Señora del Carmen Puerta Nueva (GPS N37.8849236 W4.768224), situada en la calle Rda. de Andújar, 23, Centro, 14002 Córdoba.

Esta Iglesia tiene sus antecedentes en el Convento del Carmen Calzado del siglo XVI, aunque las obras de la Iglesia comenzaron en el siglo XVII, y ha tenido numerosos avatares en su historia, tales como el desalojo del Convento en la entrada de los franceses a Córdoba en la Guerra de la Independencia, o la afectación durante la desamortización de Mendizábal. En el siglo XX ocurrió un derrumbe de la Iglesia y el Retablo fue trasladado a la Mezquita-Catedral, hasta que tras la reconstrucción volvió al templo carmelita. En la parte central del Retablo Valdés Leal pintó al profeta Elías subido en un carro de fuego que lo llevaba al Cielo, y también destacan en dicho Retablo las pinturas de las cabezas de los arcángeles San Miguel y San Rafael, así como las pinturas sobre los patrones de Córdoba los mártires San Acisclo y Santa Victoria.

En la actualidad destaca la imagen de Nuestra Señora del Carmen, para destacar las señas de identidad carmelitana, pese a que dicha Orden ya no continúa en el templo, que pasó a la titularidad del Obispado de Córdoba.

Finalizamos la visita en la iglesia de San Lorenzo (GPS N 37.8864069 W4.7699025), situada en la plaza de San Lorenzo, 5, Centro, 14002 Córdoba. Es una de las más bonitas, destaca con su enorme minarete musulmán, ahora convertido en Torre de las Campanas con su giraldillo.

De todas las transformaciones que ha sufrido la Iglesia de San Lorenzo, la más interesante es la protagonizada por el arquitecto cordobés Hernán Ruiz II el Joven, quien erigió, en 1555, la torre-campanario que hoy día podemos apreciar. En años sucesivos, los añadidos fueron constantes en la iglesia, no obstante, las diversas restauraciones acaecidas a lo largo del siglo XX han ido encaminadas a devolverle su estado original.

El predominio de las casas bajas en el barrio hace que destaque especialmente la imagen de la iglesia, que se alza con personalidad propia sobre el blanco caserío circundante. Muy cerca, al Este de la Parroquia, se encuentra la Plaza de los Padres de Gracia, conocida popularmente como Jardín del Alpargate, que aloja al templo trinitario, de principios del siglo XVII, y recibe la misma denominación que la plaza. Tras esta iglesia, y a lo largo de la Ronda del Marrubial, podemos observar cómo el antiguo lienzo de muralla en su lado Este se extendía hacia el Norte. Recordar que la collación de San Lorenzo limitaba con la muralla que protegía la ciudad.

En las cercanías del templo se hallaba la Cruz de Roelas, lugar donde según la tradición el Arcángel San Rafael juró ante el Padre Roelas su condición de Ángel Custodio de Córdoba. Por ese mismo motivo, en la actualidad hay una calle dedicada a este insigne sacerdote, objeto de numerosas composiciones pictóricas esparcidas por toda la ciudad.

El preponderancia del antiguo entramado urbano musulmán es palpable en la mayoría de las calles del barrio, que siguen siendo en gran parte estrechas y sinuosas, propiciando que las casas queden en parte ocultas al exterior, algo muy del gusto musulmán, más amigo de construir hacia dentro y de dejar las ostentaciones aparte.

Para terminar, resaltar que la Iglesia de San Lorenzo es el único templo que cobija tres cofradías de Semana Santa, lo cual no es sino el reflejo del profundo sentimiento religioso y cofrade que este barrio de San Lorenzo respira desde hace ya muchos años.

Desde aquí cogemos el bus 1 que nos lleva cerca de la mezquita y el resto hasta el parking de Zoo lo hacemos andando.

El marcador del móvil indica que hoy hemos batido el record con 11 km. andando.

Día 14 de mayo (martes)
Ruta: Córdoba-Madrid

El día comienza en el parking gratuito del Zoo de Córdoba. La noche ha sido mucho más tranquila de lo que esperábamos porque los animales del zoo parecen estar en otra fase. Pensábamos pasar la noche y marcharnos como si estuviéramos en el Parque Krugel, afortunadamente este Parque es mucho más tranquilo, ya imaginamos que los Ñu habían cruzado el río.

Nos damos prisa para salir con la fresca porque aunque han bajado las temperaturas, Córdoba no deja de ser Córdoba. Solamente tenemos que andar uno cientos de metros para llegar a la parada del bus 2 (precio 1,30 euros) que nos dejará en la puerta de Colodro para iniciar el segundo día por la ruta de las iglesias fernandinas.

La primera de las iglesias que visitamos Real Iglesia Conventual de San Agustín (GPS N37.889238 W4.772024), situada en la plaza del mismo nombre. El horario de apertura es de 9 a 14,00 y de 15,00 a 18,00 horas.

Es una de las iglesia que nunca habíamos visitado interiormente porque ha estado durante muchos años cerrada y con trabajos de restauración.

Nada más abrir la puerta te sorprende que en el interior de las iglesias fernandinas se puedan recrear esa profusión de decoraciones, es un verdadero espectáculo por yeserías que son más propias de un teatro siciliano que de una iglesia.

El templo mantiene es de tres naves, dos laterales y una central de gran tamaño y altura, presentando portada del siglo XV. No obstante, la torre, con dos cuerpos de campanas, se construyó en el siglo XVI. Destacan la bóveda de la nave central, profusamente decorada, como ya hemos mencionado, mediante yeserías y pinturas murales que representan escenas del Credo, y la Inmaculada, situada en el coro y que se atribuye a Cristóbal Vela. Es de destacar la riqueza patrimonial de los retablos, carpinterías, pinturas y altares.

En su interior se puede contemplar una imagen de la Virgen de las Angustias y la imagen de un santo del retablo mayor, obras de Juan de Mesa, así como con un gran número de altares con bellas imágenes y pinturas de la época, destacando un cuadro de Antonio del Castillo.

Callejeamos en una agradable mañana, pasamos por las puertas del palacio de Viana y dudamos de ver sus patios, pero seguimos hasta alcanzar la segunda de las iglesias de esta ruta fernandina, en este caso si la habíamos visitamos en otras ocasiones.

La Real Iglesia de Santa Marina de Aguas Santas (GPS N37.889806 W4.775004), situada en la plaza de Santa Marina.

En el interior, la planta es de tres naves, la central ha conservado el artesonado de madera original. Atención especial hay que prestar a la antigua capilla funeraria de los Orozco, del siglo XV y de estilo mudéjar. Actualmente es la sacristía del templo, con una preciosa portada de yesería mudéjar con mocárabes (adornos), y un arco apuntado enmarcado en alfiz. También destacar la capilla opuesta a la de los Orozco, la del Sagrario, con unas magníficas pinturas de Antonio del Castillo.

La Santa que da nombre a la parroquia y al barrio debe tener un origen gallego, al parecer nació en alguna localidad de Orense en el siglo II después de Cristo. Era de familia aristocrática romana y pagana, pero se convirtió al cristianismo. Fue martirizada, pero salió ilesa del martirio a la que se sometió. Santa Marina fue arrojada dentro de hornos encendidos, y finalmente fue mandada decapitar. Cuando su cabeza rodaba por el suelo fueron surgiendo tres manantiales de aguas milagrosas. Estas aguas parece que curaron al rey Fernando III cuando era niño, y de ahí la devoción del monarca por esta Santa. Por ello dedicó una de las iglesias que fundó tras reconquistar Córdoba.

Y para terminar el recorrido marchamos hasta la iglesia de San Pablo, pasamos por uno de los nuevos iconos de la ciudad, la escultura “La regadora”, es una preciosa estatua a tamaño natural realizada por José Manuel Belmonte Cortes e inaugurada a finales del año 2014, es un homenaje a los patios y sus cuidadoras que con tanta dedicación y esmero miman a sus patios durante todo el año para que luzcan en especial en el mes de mayo.

La iglesia de san Pablo (GPS N37.885238 W4.776001), situada en la calle Capitulares, 18. Formaba parte del antiguo convento de los Dominicos.

La iglesia fue construida en el siglo XIII sobre los restos de una antigua mezquita de la que conserva todavía numerosos vestigios. A lo largo de los siglos, ha sufrido varias modificaciones ? ampliaciones, reflejando diferentes estilos arquitectónicos.

El interior lo constituyen tres naves divididas por pilares que se cubren con artesonados mudéjares de lacería. La cabecera la forman tres ábsides, los laterales circulares en el interior y rectangulares en el exterior, con bóveda de cuarto de esfera, y el central de planta pentagonal y bóveda de crucería.

Nada más entrar a la derecha podemos admirar los restos de un antiguo palacio árabe, tras una reja de forja, enmarcada por un magnífico arco de herradura. La riquísima decoración con yeserías y frisos de cerámica de tradición árabe de esta capilla contrasta con el sobrio y elegante estilo gótico cisterciense del resto del templo.

Son las 13,30 horas y es el momento para almorzar, aprovechando la proximidad vamos a ir al restaurante que siempre que vamos a Córdoba intentamos ir y nunca lo hemos conseguido, se trata Sociedad de Plateros San Francisco (GPS N 37.8809772 W4.7757784), situado calle San Francisco, 6, Centro, 14003 Córdoba.

Afortunadamente hoy acaba el maleficio, pedimos unas berenjenas con miel, media de calamares fritos y un súper flamenquín. El precio 40 euros. Nos sentimos muy satisfechos de por fin sentarnos en esas mesas de tradición centenaria.

Solamente nos queda despedirnos de Córdoba rodeando el edificio más importante para contemplar las puertas de la mezquita. Fueron diseñadas no como meros puntos de acceso al edificio, sino como enclaves esenciales para comprender el ceremonial que en él se desarrolla. Cada una de ellas anticipa al visitante la maestría artística que se despliega en el interior.

Y tampoco podemos dejar de visitar la calle de las Flores, antiguamente era el rincón más apreciado por nosotros, eran un remanso de paz con su fuente y las vistas de la cúpula de la torre de la mezquita. Ahora, es un lugar de peregrinación para todos los free tours, llega un grupo cada 20 segundos, unos a otros se pisan la posibilidad de apreciar la panorámica tan hermosa y escuchar el sonido del agua.

Poco más nos queda por hacer, solamente pasear para dar la última vista al precioso puente romano sobre el Guadalquivir que ha permanecido inalterable durante sus veintiún siglos de vida.

Su situación y presencia, dando entrada a la mezquita, son espectaculares, con 16 arcos y más de 300 metros de longitud y una anchura que permitía el paso de vehículos hasta 2004, soy testigo de ello pues en el año 1978 fue mi primera escapada por Andalucía.

Solamente nos queda regresar lentamente hasta nuestro destino en Madrid y volver a planificar una nueva aventura.

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Ángel López

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